Unicaja y Liberbank fijan su nuevo consejo: sale Masaveu y entra el asesor de Cerberus

Unicaja y Liberbank desvelan el secreto mejor guardado de su fusión: el nuevo consejo de administración, cuya negociación estuvo a punto de hacer saltar la operación por los aires a finales de 2020. La entidad malagueña será el grupo absorbente, y por tanto tiene que aprobar la entrada de seis nuevos consejeros en su entidad.

Estos serán el consejero delegado de Liberbank, Manuel Menéndez, Felipe Fernández (Fundación Cajastur), Ernesto Tinajero (accionista mexicano), David Vaamonde (Oceanwood), Jorge Delclaux (independiente) y María Luisa Garaña (independiente). Además, entra Manuel González Cid (independiente) como nuevo representante en Unicaja. Este último es un viejo conocido del sector financiero, ya que fue durante años director financiero de BBVA y desde hace una década uno de los principales asesores de Cerberus en España.

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Junto a los nombramientos, la novedad está en las ausencias del nuevo consejo. Saldrán varios de los dominicales que había en el grupo. Uno de la Fundación Unicaja, Agustín Molina, y varios de Liberbank. Así, destaca la ausencia de Luis Masaveu, empresario asturiano que ha apoyado al grupo desde su salida a bolsa. Tampoco hay ningún representante de Caja Cantabria y Caja Extremadura, otras de las entidades fundadoras del grupo junto a Cajastur.

Entre los independientes, sale la que hasta ahora era consejera coordinadora de Unicaja, Isabel Martín Castelló, que fue la que lideró la oposición del consejo de la entidad malagueña en la guerra interna que hubo frente a los representantes de la Fundación Unicaja.

Los 15 consejeros

De este modo, el nuevo consejo estará presidido por el número uno de Unicaja, Manuel Azuaga, con Menéndez como CEO, cuatro representantes de la Fundación Unicaja -Juan Fraile, Petra Mateos-Aparicio, Manuel Muela y Teresa Sáez-, los tres dominicales de Liberbank -Fernández, Tinajero y Vaamonde- y seis independientes: María Luisa Arjonilla, Ana Bolado, Manuel Conthe, González Cid, Jorge Delclaux y María Luisa Garaña.

El siguiente paso de la fusión será su aprobación en juntas extraordinarias de accionistas, que se celebrarán el 31 de marzo.

Las dos entidades acordaron su fusión 'in extremis' a finales de 2020, tras un bloqueo de sus negociaciones en las últimas semanas de diciembre por el reparto de poder. El problema radica en quién mandará en el grupo cuando salga Azuaga durante 2023. Liberbank y los consejeros de la Fundación Unicaja defienden que sea Menéndez el nuevo primer ejecutivo, a lo que se opone el resto de Unicaja Banco. Este enfrentamiento provocó tensiones incluso a nivel político y una crisis en el patronato de la fundación, presidido por Braulio Medel.

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Finalmente se optó por retrasar a 2022. Menéndez tendrá que poner su cargo a disposición del consejo de Unicaja Banco, y éste decidir si prorroga su mandato o ficha a un nuevo consejero delegado.

La ecuación de canje del nuevo grupo es del 59,5% para los accionistas de Unicaja y del 40,5% para los de Liberbank, como adelantó este medio. La nueva entidad prevé unas sinergias anuales de 159 millones, lo que equivale al 17% de la base de costes de la entidad combinada. Esperan alcanzar el 100% de la ejecución de las sinergias en 2023.

Junto a la convocatoria de juntas extraordinarias, las entidades también han citado a sus accionistas en la última junta general, para aprobar sus cuentas de 2020 y dividendos previos a la fusión: 7,8 millones en el caso de Liberbank y 17 millones en el de Unicaja.