Villar Mir: luz verde de la Junta andaluza para competir con Enagás en Huelva

Tras siete años de trámites y una reconfiguración de su proyecto, el Grupo Villar Mir ha recibido un importante espaldarazo para el desarrollo de una plataforma logística de gas natural en el puerto de Huelva. La Junta de Andalucía le ha comunicado que no precisa de autorización administrativa para continuar adelante, y que todas las autorizaciones ambientales concedidas al proyecto original siguen siendo válidas. El proyecto, de tres fases, siendo la resolución de la Junta relativa solo a la primera, que incluye la construcción de dos grandes tanques, incluye luego una regasificadora para suministrar gas a la fábrica de Fertiberia (parte del Grupo Villar Mir) y, en tercer lugar, la conexión a la red de gasoductos. Es decir, competencia directa con la instalación que Enagás tiene también en Huelva.

Las conclusiones de fondo de la Junta sobre esa primera fase del proyecto, la única que tramita por ahora Villar Mir Energía (VME), están aún por llegar en cualquier caso. Ahora, la división de energía del grupo familiar ya solo está pendiente de recibir la concesión de suelos por parte de la Autoridad Portuaria de Huelva. Cabe también señalar que la tercera fase del proyecto es por ahora irrealizable, ya que el Ministerio de Industria declaró en 2012 una moratoria para nuevas plantas de regasificación en España, aunque el desbloqueo de la de El Musel (que Enagás promueve en Gijón) abre la puerta a que esta moratoria pueda revertirse a futuro. Depende ahora del nuevo Ministerio de Energía que dirige Teresa Ribera.

TE PUEDE INTERESAR

Grupo Villar Mir pierde la mayoría de OHL: vende un 12% por 97,8 millones

Ruth Ugalde

Para que la construcción de esos tanques, y otras infraestructuras de adecuación del pantalán para recibir los barcos gaseros, arranque y se inviertan 250 millones de euros, es imprescindible la concesión de suelo portuario. El proyecto original, presentado en el puerto en 2011, fue rechazado por el recinto portuario onubense hace ahora tres meses. Desde el organismo, se ha explicado a El Confidencial que la denegación se ha basado en la sentencia del Tribunal Supremo del pasado año, que a su vez confirmó el rechazo del Gobierno central al proyecto original de Villar Mir, debido a esa moratoria para nuevas regasificadoras que fue la que recurrió la compañía.

"Tras esa denegación, Energás [filial que promueve el proyecto de Huelva] ha presentado una nueva solicitud concesional, si bien todavía no ha aportado toda la documentación necesaria para el eventual inicio del expediente. Sobre esta nueva iniciativa, que es un proyecto diferente al original, la Junta de Andalucía ha informado de que no es necesaria su autorización previa para su tramitación, aunque no ha habido pronunciamiento sobre el fondo del proyecto. Por parte de la APH se está evaluando la documentación presentada y se ha informado a Energás de un próximo requerimiento de información complementaria a fin de evaluar el interés y viabilidad portuaria para, en su caso, iniciar el expediente concesional", detallan desde la Autoridad Portuaria que dirige José Luis Ramos.

El proyecto original de Villar Mir incluía los tanques de almacenamiento, regasificación para abastacer de gas natural a la planta de Fertiberia en Palos de la Frontera (Huelva) y conexión a la red de gasoductos española a través de la línea Huelva-Córdoba. Y también la construcción de una planta de producción de electricidad a partir de gas de 800 Mw a la que se iban a destinar 1.000 millones de euros. La coyuntura del mercado eléctrico, que ha llevado a tener cientos de megavatios de plantas de gas al ralentí, y la moratoria de 2012 llevaron a reconfigurarlo y dividirlo en esas tres fases. La primera absorbe, con esos 250 millones, el 90% de la inversión total.

La planta de fertilizantes de Palos de la Frontera, una de las dos con que contaba el grupo junto a la que tuvo que cerrar en 2010 por orden de la Audiencia Nacional y que se ubicaba en Huelva ciudad, consume el equivalente a una ciudad de 2,5 millones de habitantes. Los tanques del proyecto de VME podrán almacenar hasta 300.000 metros cúbicos, y la planta de Fertiberia consume anualmente unos 400.000, que ahora compra en el mercado y le son suministrados por gasoducto, con el correspondiente coste de peajes. Contar con infraestructura propia —una vez se autorice y ejecute la segunda fase del proyecto de VME— le supondría un importante ahorro.

Repostaje de los barcos del futuro

Por su parte, la planta de almacenamiento, regasificación y alimentación de la red de gasoductos de Enagás tiene capacidad para almacenar 615.000 metros cúbicos. Rafael Romero, gerente de la patronal industrial de Huelva (Aiqbe), muestra su satisfacción por la decisión de la Junta de permitir que el proyecto siga adelante porque "el gas es el combustible del futuro, está estrechamente ligado a las necesidades de la transición energética y esto sitúa a Huelva en el mapa mundial de este vector energético".

El directivo añade que el puerto onubense ya ofrece, a través de la refinería de Cepsa, la posibilidad de repostar tanto combustible líquido como gas a través de una gabarra mixta. "Enagás también acabará ofreciendo este servicio, porque el futuro de la navegación va por los motores a gas, que reducen considerablemente las emisiones actuales. Y que Huelva se sitúe ya como punto de referencia en el repostaje de los buques del futuro es una buena noticia". Ramos cree que el proyecto interesa mucho al puerto de Huelva y no duda de que habrá acuerdo entre ambas partes.

Villar Mir tiene en Huelva su único proyecto energético ligado al gas, ya que el resto de su división se compone de 14 plantas hidroeléctricas (12 en España, en Galicia y Aragón, y otras dos en Francia). Es el primer productor hidroeléctrico independiente de España. Tiene un parque eólico que empezará a funcionar este año y comercializa también gas y electricidad.