Rivera apremia a Sánchez: "Abstenerse no es fácil. La pregunta es ¿hay otra solución?"

A pocas horas de conocerse el primer pacto entre grandes partidos -el de la Mesa del Congreso un día antes de que se constituyan las Cortes- Albert Rivera subió la presión sobre Pedro Sánchez, insistiendo en que “todos deben hacer el mismo esfuerzo” y poniendo en valor el paso dado por Ciudadanos al anunciar que se abstendrán en la segunda vuelta de la investidura de Mariano Rajoy prevista para principios de agosto. El líder de centro apeló una vez más a la responsabilidad que todos los dirigentes deben tener para que cada uno cumpla su parte. “Unos abstenerse [por el PSOE] y otros ofrecer [en referencia al PP]”. Eso sí, el presidente de C’s no dudó en mandar un nuevo recado a Sánchez: “Abstenerse no es fácil pero la pregunta que hay que hacerse es ¿hay otra solución?”.

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Rivera insistió en que la decisión tomada por su ejecutiva nacional la semana pasada fue complicada y “nos costó” porque “abstenerse cuando no es tu Gobierno no es fácil” pero, afirmó, “hay que pensar más en España que en los partidos”. En ese sentido, el líder centrista trató de mover una vez más la pelota al tejado de los socialistas y también de los populares, postulando su formación como “la única” que “busca soluciones” y facilitará el Gobierno. “Ahora les toca mover ficha a los que nunca se mueven y espero que PP y PSOE rompan la guerra fría de los últimos 30 años y pongan la legislatura en marcha”; atizó Rivera en la jornada de este lunes dedicada al partido de Ciudadanos en los cursos de verano de la Universidad Complutense organizados en El Escorial.

El dirigente barcelonés hizo una llamada a la reflexión a sus rivales que, en su opinión, deben asumir la realidad del nuevo mapa político español y entender que el PSOE perdió las elecciones y el PP las ganó pero muy lejos de la mayoría absoluta. “Ambos deben aprender a ceder”, afirmó. En el caso propio de Ciudadanos, Rivera hizo hincapié en “la oportunidad tremenda” para “recomponer la nación española” en esta nueva etapa política y confesó su intención de “utilizar muy bien y de forma inteligente” los más de tres millones de votos que obtuvo el pasado 26 de junio.

En ese sentido, el líder de centro insistió en los grandes retos que el país tiene por delante y que Ciudadanos tratará de implementar con la influencia que tenga en los próximos años. En primer lugar, consolidar el cambio que ya se ha producido con la irrupción de los nuevos partidos tras las elecciones del 20 de diciembre, que inauguraron la nueva realidad política en España. En segundo término, acometer “una importante reforma en las instituciones” desde la ley electoral y la ley de partidos hasta la Constitución “que merece cambios tras cuarenta años”, insistió, apelando a la responsabilidad -una vez más- de conservadores y socialistas “para que dejen de darse la espalda”.

En tercer lugar, Rivera mencionó la necesidad de “reconstruir una Europa mejor”, máxime tras producirse el ‘Brexit’ hace apenas unas semanas, que para el dirigente de centro, fue “una llamada de atención” para tomar las riendas del proyecto europeo y recuperar el espíritu original. Por último, los dos retos finales que precisamente están incluidos en el ideario naranja: “recomponer” la clase media y trabajadora después de que en los últimos años “tres millones de españoles hayan dejado de serlo” y evitar que la desigualdad “siga actuando como caldo de cultivo del populismo”, dijo Rivera, “como vemos en EEUU con Trump, en Francia con Le Pen y también en España”. Y “modernizar España” en tanto a la inversión “estable y que no dependa de los gobiernos” que han de tener la educación, la innovación, la ciencia y la cultura.

La Mesa del Congreso, pendiente del acuerdo

Mientras Rivera participaba en los cursos de verano de la Complutense, las negociaciones sobre la configuración del órgano de Gobierno del Congreso de los Diputados continúa. Las fórmulas son varias y están sobre la mesa, pero las formaciones no terminan de sellar un acuerdo. Por parte de Ciudadanos, el grupo parlamentario se reunirá este lunes por la tarde en el Hemiciclo para, previsiblemente, acordar lo que en la sesión de este martes votarán.

Lo que parece claro es que la formación naranja tiene asegurado un puesto en la Mesa -venga cedido por el PP o por el PSOE en función del acuerdo-. La opción para que el PSOE se hiciera con la presidencia de la Mesa pasa necesariamente porque tanto Ciudadanos como Podemos apuesten por su candidato. Esta opción -que Rivera sí aceptaría- es muy complicada porque los de Pablo Iglesias no están dispuestos a contribuir a la causa "gratis" y, de hecho, este mismo domingo lanzaron su propio candidato: Xavier Domènech.

La otra vía pasaría por que la presidencia la lograran los populares con el voto de Ciudadanos. Opción de la que el partido de centro se muestra reticente -según explican fuentes del partido- al no aceptar los nombres propuestos por el PP. Eso sí, apoyar que los populares tuvieran la mayoría en la Mesa podría dar a los de centro dos sitios en la Mesa o uno -que bien podría ser la presidencia-. Este martes se deben constituir las Cortes y, bien en primera vuelta, o bien en segunda, la Mesa del Congreso debe configurarse con un acuerdo entre las distintas fuerzas... que también deben entenderse para formar el próximo Gobierno de España.