Susana Díaz avisa a Rajoy: "Se la juega" y le afea que tenga mitin el sábado en Valencia

La candidata socialista, Susana Díaz, estáhoy miércoles, antepenúltimo día de campaña, en la provincia de Sevilla. Quiere afianzar su feudo, el cinturón rural donde el PSOE es más fuerte. Su mensaje en la recta final está claro. Busca el cuerpo a cuerpo con Mariano Rajoy desde el primer minuto y el PP, con un campaña que el presidente ha asumido en primera persona, se lo ha puesto en bandeja. "Se la juega", dijo. La socialista dio por hecho que el próximo domingo el derrotado va a ser el líder del PP.

Incluso le acusó de hacer "trampas" por irse el sábado, jornada de reflexión en Andalucía, a dar un mitin en Valencia. Hoy el presidente del Gobierno vuelve a arropar a su candidato, Juan Manuel Moreno Bonilla, en un acto en Málaga. El tercero en los últimos cuatro días. Rajoy ha asumido el riesgo de poner rostro al PP en unas elecciones andaluzas que van a marcar el intenso ciclo electoral que se abre en España. Las encuestas, que se equivocaron en los últimos comicios vaticinando la mayoría absoluta del PP, hablan ahora de un descalabro de este partido. El PSOE va a utilizar estas autonómicas, si ganan, para vender el comienzo de un vuelco electoral en España en contra del PP. Los augurios para esta formación pasan por una victoria de Díaz, aunque con una mayoría insuficiente para gobernar en solitario y con un complicadísimo panorama postelectoral.

La socialista no quiso ni oír hablar de pactos pese a la insistencia de las encuestas en que necesitaría pactar para gobernar. Ella ha descartado acuerdos con el PP o Podemos. No cierra la puerta a Ciudadanos. No concreta para no pillarse los dedos. Pide una mayoría suficiente para tener un gobierno "estable". No quiso responder a la oferta de Rajoy, en su entrevista en Onda Cero, sobre un pacto para que se deje gobernar a la lista más votada. El presidente del PP dio por hecho que dejarían paso a Díaz antes de permitir un pacto con Podemos. La socialista no responde y aleja tambores de gran coalición.

Díaz atendió a los medios de comunicación en la localidad sevillana de Utrera. Antes de que llegara al lugar donde la esperaba la prensa, la Policía Local, posteriormente auxiliada por la Guardia Civil,evitó un buen susto. Retiró de entre periodistas y cámaras a unhombre aparentemente perturbadoque intentaba hacerse hueco a la espera de Díaz. La sorpresa en el cacheo posterior es queportaba un cuchillo de grandes dimensiones. Fuentes de la Guardia Civil trataron de restar gravedad al suceso. El hombre fue interrogado y trasladado a su casa. Al parecer es un viejo conocido con problemas mentales.

La socialista, ajena a lo ocurrido y bajo la atenta mirada de su discreto equipo de seguridad, llegaba minutos después a responder las preguntas de los medios de comunicación. Se mostró satisfecha y contenta con el papel jugado la noche anterior en el debate de Canal Sur. Pese a que la lectura casi unánime esta mañana en la prensa es que pecó de "soberbia", por sus continuas interrupciones a Moreno Bonilla. ella se mostró convencida de que la imagen que proyectó le beneficia. Los ciudadanos, aseguró, quieren "seguridad". Es cierto que en su equipo de campaña están contentos con la actuación, aunque pudo pasarse de frenada. El debate fue hostil y bronco.

Sobre la propuesta del PP de retirar el aforamiento a los 109 diputados del Parlamento andaluz, que lanzó Moreno Bonilla en el debate y que supondría reformar el Estatuto de Autonomía, Díaz pidió a los populares coherencia. Aseguró que avalaría esa propuesta si se asume para el Congreso y el Senado. Recordó que en un debate hace un mes en el Congreso el PP rechazó esa propuesta, que lanzó UPyD. Lo mismo rechazó María Dolores de Cospedal en Castilla La Mancha meses atrás. "Que descuelgue el teléfono y se lo diga a Rajoy y ahí estaré yo, para toda España", replicó a Moreno Bonilla.