Los inspectores de Trabajo amenazan con la huelga a la "supuesta vicepresidenta segunda"

Los inspectores de Trabajo se han cansado de esperar una mejora de sus condiciones laborales y amenazan con ir a la huelga. La principal causa que arguyen es la falta de personal que vienen sufriendo desde hace, al menos, 10 años; un problema que amenaza con agravarse cuando el Gobierno materialice alguna de sus medidas estrella como la contrarreforma laboral. Sería el primer paro en la historia de todo el personal del organismo, ya que participarían tanto inspectores, subinspectores como personal administrativo.

Los sindicatos están de acuerdo con esta medida, pero reconocen que "no se va a acabar la temporalidad con la reforma laboral, sino con un refuerzo de la inspección", tal y como ha remarcado este martes la presidenta del Sindicato de Inspectores de Trabajo y Seguridad Social (SITSS), Ana Ercoreca. "Va a suponer elementos de carga de trabajo ineludibles para la inspección de trabajo", ha añadido el responsable de Acción Sindical del sector de la Administración General del Estado de FSC-CCOO, Josetxo Gándara.

TE PUEDE INTERESAR

El Gobierno aprueba un plan para modernizar la Inspección de Trabajo

EFE

Para evitar la huelga, los sindicatos piden que se cumpla el acuerdo que alcanzaron el 7 de julio con el Ministerio de Trabajo, encabezado por Yolanda Díaz, y que lleva más de seis meses paralizado por el Ministerio de Hacienda, liderado por María Jesús Montero. "Hemos llegado a un acuerdo con la supuesta vicepresidenta segunda, pero tropezamos con una piedra que desde el punto de vista político está por debajo", ha señalado Gándara en una rueda de prensa en la que ha asegurado que están "dispuestos a pelear con todo lo que sea necesario por la dignidad del servicio público y de la inspección de trabajo".

"En el mes de julio de este año se alcanzó un acuerdo, con la participación de toda la representación sindical y profesional de la ITSS (Inspección de Trabajo y Seguridad Social), capaz de dar respuesta a todas las carencias descritas. Se ha sido paciente en extremo, pero no deja de ser un despropósito que seis meses después se nos pretenda explicar que todo se encuentra en fase de estudio", exponía un comunicado firmado por un total de ocho organizaciones sindicales (CCOO, CIG, CSIF, FESESS, Sindicato de Inspectores de Trabajo, SISLASS, UGT y UPIT).

Actualmente, la Inspección de Trabajo apenas alcanza los 3.000 efectivos, alrededor de unos 1.750 de inspección activa (trabajo de calle) y unos 1.150 que realizan tareas de apoyo administrativo. Con estas cifras, España tendría una ratio de un inspector por cada 13.000 personas de población activa, cuando la recomendación de la Unión Europea es que sea de un inspector por cada 10.000 personas. Para compensar este déficit, desde los sindicatos aseguran que harían falta unos 1.250 efectivos, una pretensión que rebajaron en las negociaciones que tuvieron durante el primer trimestre del año. "El acuerdo del 7 de julio no hablaba de cantidad óptima, todas las partes hacíamos esfuerzos", ha recordado Gándara.

TE PUEDE INTERESAR

El Gobierno nombra nueva directora de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social

Agencias

Uno de los aspectos a mejorar para incrementar la plantilla es la oferta de empleo que se realiza desde el Ministerio de Trabajo, ya que los sindicatos calculan que alrededor del 25% de las plazas se quedan sin ocupar porque los estudiantes prefieren opositar a otras posiciones que son más competitivas. Entre sus reclamaciones también se encuentra una mayor digitalización de Inspección de Trabajo y la eliminación de la desigualdad salarial, aspiraciones que ya se habían conseguido en el acuerdo de julio.

¿Qué debe suceder para evitar la huelga? Gándara lo ha dejado claro: "Los mínimos están suscritos en el acuerdo alcanzado con el Ministerio de Trabajo. No pretendemos renegociar el acuerdo que ya habíamos alcanzado el 7 de julio. El acuerdo está cerrado y está dentro de las posibilidades económicas del presupuesto". Es decir, es el Ministerio de Hacienda quien debe dar luz verde, aunque los sindicatos tampoco se olvidan de que el Ministerio de Trabajo también forma parte del Gobierno y que Yolanda Díaz es la vicepresidenta segunda del mismo.