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Aigües de Sabadell o cómo hacer perder el 14% a tus accionistas sin pestañear
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NUEVA OPA DE AGBAR, MÁS BARATA

Aigües de Sabadell o cómo hacer perder el 14% a tus accionistas sin pestañear

En dos años los accionistas de Aigües de Sabadell han perdido un 14% en el valor de sus acciones. Pero no por la cotización bursátil sino

Foto: Aigües de Sabadell o cómo hacer perder el 14% a tus accionistas sin pestañear
Aigües de Sabadell o cómo hacer perder el 14% a tus accionistas sin pestañear

En dos años los accionistas de Aigües de Sabadell han perdido un 14% en el valor de sus acciones. Pero no por la cotización bursátil sino por las enérgicas decisiones de su presidente, Xavier Bigatà.

La clave es que Agbar ha lanzado una OPA sobre Aigües de Sabadell. El Confidencial ya avanzó que esto podía pasar a raíz de que Unnim fue comprada por BBVA y por tanto cambió de manos el paquete que esta caja de ahorros tenía en Aigües de Sabadell y que era del 7,2%.

Agbar ha presentado una OPA en la que ha ofrecido 60 euros por acción. Y todo apunta a que esta vez la oferta será aceptada. Porque no es la primera vez que Agbar lo intenta. En 2010 ya lanzó una OPA hostil sobre Aigües de Sabadell. Pero lo hizo a 70 euros la acción, un 14% más que ahora, y no fue aceptada. Lo dicho, para el accionista, entre la primera y la segunda OPA, una pérdida del 14%.

En 2010 el presidente de Aigües de Sabadell, Xavier Bigatà, organizó una resistencia numantina a la OPA. Consiguió que accionistas que eran proclives a vender, como Banco de Sabadell, que tenía el 5,6% mantuvieran sus acciones. Y que el Ayuntamiento de la ciudad (23%), la Cámara de Comercio de Sabadell (2%) y el Gremio de Fabricantes de la ciudad (3%) rechazasen la oferta.

En 2010 Bigatà cambió el contrato del agua, pagó un dividendo extraordinario y consiguió que la junta aprobase diversas medidas antiopa. Todo este despliegue para aceptar ahora lo que antes rechazó, asegurando en 2010 que el precio era inferior al que marcaba un auditor externo.

Ayuntamiento tocado

Además, el Ayuntamiento de Sabadell está tocado después de que su alcalde, Manuel Bustos haya tenido que dimitir imputado en un caso de corrupción, a pesar de que él ha mantenido su inocencia. En todo caso, el consistorio se encuentra en situación de debilidad.

Dos años después el debate ciudadano es otro. En Sabadell nadie abrió la boca cuando Caixa Sabadell desapareció. Y, después, tampoco cuando Unnim fue comprada por BBVA. Las pequeñas ciudades ya no son capaces de defender las instituciones que generaron y Aigües de Sabadell es sólo una pieza más en un dominó maldito.

Falta de debate

Pero si el entorno ha cambiado, la valoración financiera no debería. Los que lanzan la OPA es la misma compañía. Agbar, como mucho, pagará 26,9 millones, ya que ya es propietaria del 14% de la sociedad que aspira a adquirir. La prima sobre la cotización de Aigües de Sabadell es de apenas el 3%.

Sin embargo no hay debate sobre si la pasada actuación de Bigatà ha hecho perder dinero a los accionistas. En la City londinense los minoritarios ya se habrían querellado contra él por su actuación. Pero esto no es Londres, es Sabadell y no hay que descartar que dentro de unos años una de las calles de la ciudad acabe llevando su nombre.

En dos años los accionistas de Aigües de Sabadell han perdido un 14% en el valor de sus acciones. Pero no por la cotización bursátil sino por las enérgicas decisiones de su presidente, Xavier Bigatà.