Pastor insiste: "Nuestro compromiso es que el AVE llegue al País Vasco, Galicia y Asturias"

La ministra trabaja con este horizonte, aunque no descarta tajantemente que pueda entrar capital privado en alguna de las cuatro empresas en las que se dividirá la actual Renfe, posibilidad que, de hecho, deja abierto el Plan Presupuestario 2012-2014 remitido el pasado 3 de agosto a Bruselas. Y es que, cómo recordó la ministra de Fomento, Renfe arrastra una deuda de 5.000 millones de euros, Adif debe también 15.000 millones y la FEVE adeuda otros 600 millones de euros. Según explicó, "el Estado están poniendo al conjunto del sistema ferroviario una financiación de más de 2.000 millones de euros al año", algo que consideró necesario corregir para "hacer posible que Renfe no le cueste el dinero que le cuesta a los españoles".

Pastor expuso estas cifras para justificar el Real Decreto Ley de liberalización y racionalización del sector ferroviario que, entre otras cosas, prevé la apertura a la competencia del tráfico de viajeros en tren a partir de julio de 2013 y la definición antes del 31 de diciembre de las obligaciones de sector público de Renfe.

Mano tendida a los trabajadores

Por otro lado, Pastor recalcó que confía en poder "consensuar" todo cuanto recoge el Real Decreto Ley con los representantes de los trabajadores de Renfe, tras el paro celebrado el pasado 3 de agosto en el ente, Adif y FEVE en rechazo de la norma. Los trabajadores del sector ferroviario siguen en pie de guerra y está prevista una nueva huelga para el próximo 17 de septiembre. Con este horizonte, Pastor ha asegurado que lo que quiere su Ministerio es "poner en valor Renfe con la ayuda de sus trabajadores".

"Renfe tiene magníficos profesionales, buenas infraestructuras, máquinas potentes y somos un referente en el mundo", subrayó, para añadir: "Lo que me gustaría es que ningún trabajador perdiera su trabajo, que antes estaba en riesgo".