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Economía quiere sentar en el banquillo a Olivas y Parra por los pelotazos de 'Aguas' y Bellver
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SOLICITA UN INFORME PERICIAL A KPMG PARA DEMOSTRAR LOS PRESUNTOS FRAUDES

Economía quiere sentar en el banquillo a Olivas y Parra por los pelotazos de 'Aguas' y Bellver

El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), organismo dependiente del Banco de España y del Ministerio de Economía, quiere sentar en el banquillo de los acusados

Foto: Economía quiere sentar en el banquillo a Olivas y Parra por los pelotazos de 'Aguas' y Bellver
Economía quiere sentar en el banquillo a Olivas y Parra por los pelotazos de 'Aguas' y Bellver

El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), organismo dependiente del Banco de España y del Ministerio de Economía, quiere sentar en el banquillo de los acusados a los antiguos directivos de Banco de Valencia. Para ello ha pedido a KPMG un informe con el que demostrar la presunta mala gestión del equipo dirigido por José Luis Olivas y Domingo Parra, consejero delegado durante quince años.

Según fuentes financieras próximas al caso, el documento que ha elaborado KPMG a petición del FROB viene “cargado, muy cargado, para dar y tomar”. El informe que ha desarrollado el equipo jurídico de la consultora tiene munición suficiente para colegir la existencia de indicios de delito cuya gravedad exige su "inmediata actuación".

En el escrito remitido al juzgado de instrucción número 3 de Valencia y firmado por el FROB con fecha 5 de junio, el organismo informa de que sus administradores detectaron posibles delitos que deben ser conocidos por la Audiencia "por su naturaleza y número de posibles afectados, condición de cotizada del Banco de Valencia y repercusión en la economía nacional". Ante la existencia de indicios de actuaciones irregulares en la entidad, las personas designadas por el FROB para ejercer las funciones que le corresponden como administrador provisional solicitaron una investigación independiente que culminó en un informe pericial que refleja actuaciones que podrían ser constitutivas de delito, indica.

Ese informe pericial es el que ha hecho KPMG, que se ha negado a hacer ningún comentario sobre esta información. Se da la circunstancia de que esta misma firma fue contratada por Rodrigo Rato, expresidente de Bankia, para intentar demostrar que Bancaja engañó a Caja Madrid en la fusión al ocultar la situación financiera de Banco de Valencia. Rato pidió a KPMG una evaluación exhaustiva para saber cómo hubiera quedado la ecuación de canje entra las dos cajas si la valoración de la filial se hubiera realizado teniendo en cuenta el agujero patrimonial de 1.000 millones detectado en octubre por el Banco de España.

Los dos grandes casos

Según fuentes próximas a la querella, el FROB centra sus acusaciones en dos operaciones concretas. La primera es la compraventa de Aguas de Valencia por parte del empresario valenciano Eugenio Calabuig, a la vez consejero de Banco de Valencia. Según las pesquisas de KMPG, la entidad dirigida por Parra le concedió financiación al holding de Calabuig para comprar la empresa de aguas participada también por la filial de Bancaja.

A su vez, según esta información, los Calabuig, que se alzó con la presidencia de Aguas de Valencia en 2007 tras una polémica OPA, benefició presuntamente a sociedades personales de Parra, en concreto a IZPA. Lo que si está demostrado, según la documentación en manos del FROB, es que su consejero no hizo frente al préstamo concedido por Banco de Valencia, que le condonó la deuda a cambio de activos inmobiliarios. Sin embargo, dichas propiedades tenían un valor real al registrado en libros, por lo que el canje le provocó una pérdida patrimonial a la entidad de la que Parra fue consejero delegado hasta octubre del pasado año.

Pese a ello, Banco de Valencia intentó -antes de su intervención el 21 de noviembre- vender al grupo de Calabuig su participación del 30% en Aguas de Valencia a través de Inversiones Financieras Agval, pero Banco Financiero y de Ahorros (BFA-Bankia) vetó la transacción al sospechar ya de presuntas irregularidades.

Banco de Valencia decidió poner en el mercado el 49% que controla en Inversiones Financieras Agval, el holding participado por el propio banco y por Fomento Urbano de Castellón, la empresa  de Eugenio Calabuig, y que, a su vez ostenta el 60,68% el grupo de hídrico. Calabuig estuvo relacionado en su día con los accionistas de la inmobiliaria Lubasa y con Vicente Boluda, el que fuera presidente del Real Madrid.

Ladrillo a buen precio

La segunda trama es la de Costa Bellver. Banco de Valencia prestó dinero al propio Calabuig para comprar acciones de Aguas de Valencia que finalmente fue a parar al balance del Valencia CF. El club de fútbol le devolvió posteriormente el préstamo de unos 55 millones de euros al empresario, que lo destinó posteriormente a adquirir la promotora inmobiliaria.

Más adelante, Banco de Valencia se la compró a Calabuig, al que le había prestado en un principios, en el verano de 2009. En plena crisis inmobiliaria, Habitat (filial de Bancaja) se unió con la entidad financiera para, a través de Inversiones Financieras Agval, comprar la promotora a Calabuig. Este empresario recibió unos 107 millones de euros por el 83% de su participación cuando sus activos apenas valían 10 millones.

Las posibles irregularidades no acaban ahí. Según distintas fuentes, el FROB también sospecha de la compra de una empresa de piscifactoría al exministro Antoni Asunción, así como el préstamo de tres millones de euros concedido a Jaume Matas, expresidente de Baleares, para hacer frente a su fianza judicial por el caso Urdargarín. Calabuig también está implicado en el oscuro asunto del yerno del Rey.

El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), organismo dependiente del Banco de España y del Ministerio de Economía, quiere sentar en el banquillo de los acusados a los antiguos directivos de Banco de Valencia. Para ello ha pedido a KPMG un informe con el que demostrar la presunta mala gestión del equipo dirigido por José Luis Olivas y Domingo Parra, consejero delegado durante quince años.