FCC prescinde de Miguel Blesa como consejero tras su polémica con Rato

Miguel Blesa dejará de ser consejero de FCC el próximo 1 de junio. La compañía constructora no le renovará su asiento en el órgano de gobierno del grupo controlado por Esther Koplowitz, tal y como adelantó El Confidencial el pasado jueves. La compañía ha optado por que no continuara en su puesto tras las presiones recibidas por Caja Madrid, su socio en varios de los negocios estratégicos del grupo.

Blesa fue nombrado consejero de FCC en 2006, cuando todavía era el primer ejecutivo de la caja madrileña. En aquellos momentos, el  grupo industrial y la entidad financiera era partners bien avenidos en las divisiones de concesiones y de inmobiliaria. Hasta el punto de que el nombre del expresidente de Caja Madrid sonó con fuerza para ser la mano derecha de Esther Koplowitz tras la salida del anterior consejero delegado, Rafael Montes.

Ahora, la situación es muy diferente. La caja y la constructora mantienen sus alianzas, pero los equipos gestores no tienen la misma relación. Gran parte de la discordancia se ha producido por la marcha de los negocios conjuntos y, sobre todo, por la permanencia de Blesa en el consejo de FCC. El actual presidente de Bankia, Rodrigo Rato, hizo saber a la empresaria que sería conveniente la salida de su predecesor tras la polémica del bonus de 25 millones que se iba a repartir la cúpula de Caja Madrid.

Rato propuso suspender ese pago extraordinario al considerar poco ético que unos pocos ejecutivos se repartieran una retribución variable cuando la caja había que tenido que pedir ayudas públicas urgentes para recapitalizarse. En concreto 4.465 millones de forma conjunta con Bancaja.

Caja Madrid y FCC son socios en Global Vía, la sociedad que aglutina sus negocios de concesiones, principalmente autopistas. Cada una de las partes tiene el 50% del capital, si bien la compañía está inmersa en un proceso de búsqueda de nuevos inversores por cerca de 500 millones de euros. Además, la caja y la constructora también comparten accionariado en Realia, la empresa inmobiliaria que salió a bolsa a mediados de 2007. Caja Madrid es dueña del 27,6% del capital, mientras que el grupo industrial posee un 30%.

Otros puntos del orden del día

FCC solicitará a la junta general de accionistas que celebrará el próximo 1 de junio autorización para realizar emisiones de bonos, en una o varias veces, por un importe total máximo de hasta 1.500 millones de euros, según informó la empresa. La compañía controlada por Esther Koplowitz ya recibió el visto bueno de sus socios en la asamblea de 2010 para entrar en el mercado de deuda, si bien desde entonces sólo ha lanzado una emisión a través de su filial austriaca Alpine.

La mala situación de los mercados el pasado año y la animadversión de los inversores por tomar posiciones en las constructoras españolas echó abajo las intenciones de Baldomero Falcones, consejero delegado. Por ello, FCC solicitará a sus accionistas renovar el permiso para lanzar bonos y además ampliar el importe máximo desde los 1.000 millones en que se fijó en 2010 hasta los 1.500 millones de euros.

Entre el resto de puntos del orden del día de la asamblea de FCC, remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), destaca la petición de renovar también la autorización de amortización de las acciones propias que la compañía de construcción, servicios y energía cuenta en autocartera, equivalente a casi el 10% del capital. Con esta operación, también pendiente desde juntas anteriores, FCC busca evitar que sus accionistas diluyan su participación ante la conversión de una emisión de bonos lanzada hace casi dos años.

La junta de accionistas de FCC reelegirá además a Esther Koplowtiz, accionista de control y vicepresidenta primera de la compañía, como miembro de su consejo de administración.

FCC someterá también a la autorización de sus accionistas el reparto a partir del próximo 6 de julio de un dividendo complementario de 0,715 euros brutos por acción, que se sumará al ya abonado a cuenta de los resultados de 2010. Con este pago, la retribución total al accionista se elevará hasta 1,43 euros brutos por acción, con lo que el grupo repite el mismo importe del ejercicio anterior.