Cajasur se 'comerá' un cuarto del Fondo de Garantía de Depósitos de las Cajas

La fusión de Unicaja con Cajasur, aprobada ayer por el Banco de España, necesitará una inyección de 990 millones de euros, según fuentes de toda solvencia. Esta cantidad saldrá del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD), no del FROB, como había adelantado El Confidencial, y supone aproximadamente una cuarta parte de los recursos con que contaba el FGD de las cajas de ahorros: 3.971,5 millones de euros al cierre de 2008 (últimas cifras publicadas).

Los 990 millones se dividen en 440 millones para la compra de participaciones preferentes -opción elegida por el Banco de España para entrar en el capital de las cajas fusionadas frente a las cuotas participativas en los casos de rescates forzosos- y otros 550 millones en avales para provisionar créditos fallidos fruto de las alegrías en la financiación inmobiliaria de Cajasur en los últimos años (y de la mayoría de las cajas y bancos).

Contrariamente a lo señalado en algunos medios escritos, caso de El País, la emisión de preferentes tiene caracter de deuda perpetua (sin vencimiento, por tanto, a los 17 años), como es obligado para que computen como TIER-1 a efectos de recursos propios, mientras que los 550 millones son avales que el FGD otorga a la nueva entidad surgida de la fusión, y no son, pues, ayudas ni préstamos que impliquen el correspondiente desembolso. 

Así pues, esta pequeña fusión deja muy mermado el FGD de las cajas con vistas a otras operaciones mucho más grandes, como las que se están fraguando en Cataluña o en Castilla y León. Lo cual significa que, en estas fusiones, será inevitable tirar del FROB, es decir, de dinero público. Un dinero que no se 'regala' a las entidades, sino que se inyecta mediante distintos instrumentos financieros que la entidad ayudada debe devolver al cabo de un plazo mayor o menor.

El Banco de España puso ayer mucho énfasis en su comunicado en que "este apoyo financiero no implicará en ningún caso la utilización de recursos públicos, ya que los fondos del FGD provienen de las aportaciones de las propias entidades adheridas al mismo". Este énfasis es consecuencia de las duras críticas que ha recibido el FROB por destinar recursos públicos al rescate de la banca en vez de a ayudar a otros sectores en crisis que están despidiendo cientos de miles de trabajadores.

Cajasur se ha visto obligada a aceptar su absorción por parte de Unicaja ante la amenaza del Banco de España de intervenirla si seguía en solitario. Eso sí, a cambio ha conseguido unas enormes prebendas que la convierten en 'una caja dentro de otra caja', que José Antonio Griñán, presidente de la Junta de Andalucía, ha impuesto a Braulio Medel, presidente de Unicaja, con tal de que la fusión saliera adelante.