El golpe que detiene el tiempo: lo que necesita Alcaraz para derrotar al jugador que nunca ganó

Carlos Alcaraz vuelve a sonreír. El tenista español ha vivido en una montaña rusa este comienzo de temporada. No pudo disputar el Open de Australia por culpa de una lesión que arrastraba del pasado curso y, tras recuperarse y regresar a las pistas como un tiro -ganando el torneo de Buenos Aires-, volvió a sufrir un problema físico en la final de Río. Ahora, semanas más tarde, se encuentra completamente recuperado... y ha descubierto la manera de saberlo.

Una de las claves para que un deportista sea capaz de mejorar es saber escucharse a sí mismo. Muchas veces, el atleta, de manera mecánica, lleva a cabo rutinas en su actividad sin pararse a pensar si son buenas o malas e, incluso, cuando sufre un determinado problema físico, solo piensa en el momento y no en ponderar las consecuencias que puede tener seguir peleando a pesar del dolor. Pero escucharse también tiene que ver con el rendimiento en pista.

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El Confidencial

Es fundamental que un tenista sepa cuándo va todo bien, en qué momento ha entrado en trance en su juego y que no hay nada que pueda frenarlo. Y, a pesar de tener solo 19 años y ser un recién llegado al deporte de elite, Alcaraz ya ha sido capaz de encontrar ese clic. Ya está en cuartos de Indian Wells, tras pasar de ronda en un cómodo partido ante el lesionado Jack Draper pero, lo más importante, es que ha descubierto su gran fortaleza en el momento clave.

El tenista murciano sabe que, si es capaz de ganar el torneo, volverá a recuperar el número uno del mundo, en lo que se ha convertido su principal objetivo a corto plazo. Pero, para ello, la primera piedra que tiene en el camino no es nada sencilla: Félix Auger-Aliassime. El canadiense no es solo la décima raqueta del mundo, lo que ya hace complicado el envite de cuartos, sino que es un jugador que le tiene tomada la medida y que le ha vencido las tres veces que se han enfrentado.

Pero la mejor noticia para el español no es solo que llega lanzado -y relativamente descansado- a un duro duelo sino, sobre todo, que ha sido capaz de entender en qué momento empieza a volar en pista. Después de superar las cien victorias en la ATP y de confirmar que ha regresado al más alto nivel, la realidad es que Alcaraz conoce el golpe que detiene el tiempo. O, dicho de otra manera, ese momento en el que su tenis es imparable y es muy difícil de frenar sobre la pista.

Así lo explicaba tras su partido ante Draper. "La derecha a la línea es un golpe clave, un golpe que me ayuda a entender dónde estoy. Cuando lo conecto muy bien, me digo a mí mismo: 'Está bien, sé que estoy jugando a un gran nivel, es el momento'. Digamos que es uno de mis tiros favoritos, en el que golpeo la pelota muy fuerte. Poner esa bola en la línea sígnica golpear con mucha claridad. Es el punto que me ayuda a entender que estoy jugando a un gran nivel". Poco más que añadir.

Cuando el español consigue conectar ese golpe, sabe que todo fluye como debe... y su gran objetivo es volver a conseguirlo ante Auger-Aliassime. Y es que el canadiense es uno de esos pocos rivales que le tienen muy cogida la medida a Alcaraz, al que ha derrotado en las tres ocasiones en las que se han enfrentado: en cuartos del US Open de 2021, en el round robin de la Copa Davis de 2022 y en semifinales del torneo de Basilea de 2022. Y en Indian Wells llegará el cuarto duelo.

La mejor noticia para Alcaraz es que parece que ya tiene completamente olvidada la lesión de comienzo de temporada y que, de nuevo, empieza a jugar al más alto nivel. Su confianza es grande y se encuentra en un gran momento de forma, confiado de poder hacer un gran papel ante el canadiense. Y, por qué no, sacar a paseo ese golpe que detiene el tiempo para demostrarse que nadie detendrá su camino en busca de recuperar el número uno del tenis mundial.