Paula Badosa se despide de Roland Garros tras una remontada frustrada (7-5, 4-6 y 8-6)

Adiós al sueño de Paula Badosa de conquistar Roland Garros. La española se coló en los cuartos de final del torneo parisino donde completó un auténtico partidazo contra Tamara Zidansek, quien acabó por llevarse el encuentro con un resultado de 7-5, 4-6 y 8-6. Una apretada primera manga fue a parar al casillero de la eslovena, más centrada en el inicio del partido. Pero la número 35 del mundo sacó su mejor versión gracias a la contundencia de su zurda, con un 'drive' que dejó sin argumentos tenísticos a Zidansek, y a su fuerza mental para remontar el segundo set. La tercera manga acabaría por ser una batalla constante. En el momento de la verdad, la rival de Badosa dio un paso al frente. La española se despide de París con su mejor resultado en un Grand Slam y la promesa de volver más fuerte.

La española comenzó el primer set de la mejor manera posible, rompiendo el servicio de Zidansek y demostrando su candidatura para acceder a las semifinales del torneo parisino. Con un 2-0 inicial, Badosa parecía tener todo controlado. La eslovena ni siquiera fue capaz de estrenar el marcador de juegos en su segundo saque. La gran sorpresa del circuito femenino en este Roland Garros solo cedía puntos con fallos propios, con pelotas que se marchaban demasiado lejos de la red. Las dobles faltas acabarían por castigar sus opciones.

Del 3-0 al 4-4. Reacción definitiva de Zidansek, demostrando por qué es la número 85 del mundo del actual 'ranking' WATP. Diversas situaciones enfadaron a Badosa, que mostró su disgusto y su visible enfado con el juez de silla mientras su entrenador, Javier Martí, la instó a mantener la concentración. El set —que duró casi una hora— se lo acabó por llevar la eslovena, después de vivir hasta seis roturas en toda la manga. Golpe anímico para Paula, a la que le tocaba empatar o despedirse de París.

Vivió Badosa el peor momento del partido en el inicio del segundo set. Zidansek, lanzada tras una espectacular remontada, enseñó sus credenciales. Golpes de alta factura, mientras la estabilidad de la española se tambaleaba. 'Break' incluido, 3-1 y sumaba cinco servicios arrebatados la eslovena. Paula apretó los dientes. Tres roturas consecutivas se vieron hasta el 4-3 a favor de Zidansek, quien a esas alturas de partido había logrado 18 golpes ganadores, más del doble que los de Badosa.

Los puntos largos, con el desgaste físico que implicaba llevar una hora jugando bajo un sol de justicia en París, favorecieron a nuestra representante. Gritó de pura rabia Badosa cuando igualó el set a cuatro juegos en media hora. Del 30-0 en la posible rotura del saque por parte de Zidansek a anotar cuatro puntos seguidos y lograr la igualdad en la manga. La nacida en Nueva York brilló, recuperando sensaciones, mientras que a la eslovena todas las pelotas difíciles se le quedaban en la red. Encontró Paula el camino con saques al fondo. Saque de Zidansek y rotura, con juego en blanco, a favor de la española.

Servía Badosa para adjudicarse el segundo set con un 4-6. Su rival respondía al servicio con pelotas cortas, a las que la española llegaba con facilidad para ejecutar remates imposibles de ser devueltos. Solo la red se interpuso en lo que parecía un juego en blanco. Pero Zidansek sacó uno de los mejores puntos del partido, con una paralela justo a la línea desde su revés que Paula solo pudo admirar desde lejos. El set, sin embargo, acabaría por llevárselo la tenista de 23 años y gran promesa española. Todo por decidir en la tercera y definitiva manga.

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No podía empezar de mejor manera el tercer set para Badosa. Servicio a cargo de Zidansek, que ya se mostraba fatigada, y que se encargó de romper nuestra representante. Poderosa zurda de Paula en las pelotas largas, mientras que su derecha aguantaba con solidez. A la eslovena se le fueron muy largos varios golpes claros, síntomas de que su físico empezaba a flaquear. “¡Vamos!”, gritó la española, todo un martillo en este inicio de manga. 2-0 para ella en siete minutos y sensación de superioridad evidente.

Sacó fuerzas de flaqueza y de su talento Zidansek para demostrar que esto no se había acabado. Primero con una estética dejada que dejó descuadrada a Badosa, luego con un agresivo punto en el que buscó la esquina de la pista y que provocó los aplausos de la grada de París. Dos juegos seguidos para la eslovena. Otra vez la pelota sobre el tejado de Paula. No iba a ser una victoria sencilla. Se lamentó la entrenada por Martí de una bola a la que golpeó mal, yendo a parar a la grada que aguardaba tras de ella. 2-3 para Zidansek, tocaba remontar de nuevo.

El partido atravesó entonces momento más emocionante gracias a un intercambio sin freno de juegos, con ninguna tenista consiguiéndose imponer con claridad y ganando los puntos gracias a rachas. Zidansek elevó su nivel para poner el 4-5 a su favor, dejando toda la presión para Paula en su saque, quien respondió hasta irse al 6-6. Llegó entonces el juego más largo de todo el partido, casi siete minutos. Badosa estuvo muy cerca de romper el saque de la eslovena, pero acabó por sucumbir y quedarse al borde de la derrota. Zidansek dispuso de dos bolas de partido. La primera se marchó larga en un remate sencillo. Los nervios aumentaban. Pero la segunda acabó dentro, poniendo fin a la trayectoria de la española en Roland Garros tras un partido de más de dos horas.