Las lágrimas de Rafa Nadal ante Federer cuando creyó que perdería Wimbledon 2008
Hacemos un repaso de la mítica final de Wimbledon 2008 entre Rafa Nadal y Roger Federer para vislumbrar por qué está considerado como el mejor partido de la historia del tenis
Este viernes se vuelven a enfrentar sobre la hierba de Wimbledon los que han sido en los últimos tiempos los dos colosos del deporte de la raqueta (con permiso de Novak Djokovic) en lo que ya es conocido como un clásico del tenis: Rafael Nadal vs Roger Federer.
Estas semifinales de 2019 cruzan al español y al suizo en el torneo de Londres 11 años después. Aquella vez fue en la final, un encuentro que lo tuvo todo, épica, lucha, lluvia y mucho tenis, en lo que a día de hoy es reconocido por muchos como el mejor partido de la historia del tenis.
Una final de infarto
Era el 6 de julio de 2008, cuando un joven Nadal de 22 años se enfrentaba al rey de la hierba en unos años en los que el duelo entre ambos estaba en su pleno apogeo. En las dos ediciones anteriores del torneo, Federer había tumbado al español, con lo que este llegaba con un hambre y una motivación desbordadas.
La pista central del All England Club presenció un partido muy duro y disputado que empezó bien para Rafa. Atacando el revés del suizo consiguió llevarse los dos primeros sets con un doble 6-4. Ya en el tercero, cuando el marcador reflejaba un 4-5 para Federer, la lluvia hizo acto de presencia y provocó que el partido tuviera que parar durante media hora. Primer parón.
A la vuelta, en la muerte súbita, Roger hizo valer su mejor servicio para poner el 2-1 y meter presión al manacorí, al que se le sumaba la de la grada. El cuarto set también fue para el suizo, en un trepidante ‘Tie Break’ en el que Nadal llegó a tener dos bolas de partido. 2-2.
El empate trajo el miedo por que se repitiera el desenlace de los dos últimos años (en ambas ocasiones ganó el suizo al español en la final inglesa) y, nuevamente, la lluvia. Rafa confesó después que en el tiempo que estuvo en el vestuario hasta la reanudación lloró desconsoladamente por ver cómo se le había escapado la oportunidad. Esto a cualquier mortal le habría pasado factura, pero a Rafael Nadal no hizo otra cosa que hacerlo más fuerte.
El quinto set concluyó a las 21:16 horas (desde las 14:36 que empezó) con 4 horas y 48 minutos de juego, dos parones por la lluvia y el primer Wimbledon para Nadal después de que Federer estrellara una derecha a la red de la central de Londres. El marcador reflejó un 6-4, 6-4, 6-7 (5), 6-7 (8) y 9-7 y Rafa dejó la imagen de él tumbado sobre la hierba de Wimbledon para la historia.
Fue un momento muy especial para mi carrera porque venía de hacer dos finales seguidas
42 años después de que Manolo Santana ganara Wimbledon, un joven de Manacor volvía a llevar el nombre de España a lo más alto del torneo más prestigioso del tenis. Una final para el recuerdo que Nadal define como “uno de los partidos más emocionantes que he jugado nunca. Fue un momento muy especial para mi carrera porque, además, venía de hacer dos finales seguidas. Fue un paso adelante muy importante para mí. Abrió mi camino hacia otro lado. Ganar, perder, es parte del deporte, pero ese fue un momento clave”. El otro protagonista, Federer, reconoció que esa fue “la derrota más dura” de su carrera, aunque al mismo tiempo dijo que “fue muy especial formar parte de aquel momento”.
Sin duda un momento histórico, un clásico entre los clásicos que el medio Sports Illustrated situó como el mejor partido de la década, que leyendas como John McEnroe definieron como “lo más grande que haya visto nunca” o Björn Borg como "la final más grande de siempre" y que tendrá su réplica en las semifinales de este viernes en Wimbledon 2019.
Este viernes se vuelven a enfrentar sobre la hierba de Wimbledon los que han sido en los últimos tiempos los dos colosos del deporte de la raqueta (con permiso de Novak Djokovic) en lo que ya es conocido como un clásico del tenis: Rafael Nadal vs Roger Federer.