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Quadzilla, el monstruo de la velocidad (10,1 en 100m) que ficha el rugby
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EL AUSTRALIANO MÁS RÁPIDO DE LA HISTORIA

Quadzilla, el monstruo de la velocidad (10,1 en 100m) que ficha el rugby

Trae Williams, joven velocista de 22 años, se ha mudado del tartán al césped para jugar los Juegod Olímpicos de Tokio con la selección aussie de rugby 7

Foto: Trae Williams, la última novedad del rugby australiano.
Trae Williams, la última novedad del rugby australiano.

Trae Williams tenía una fulgurante carrera de velocista por delante. Un joven que con 22 años había parado el cronómetro en 10,1 segundos, lo que le convertía en el quinto australiano más rápido de la historia. Sin embargo, algo cambió en su cabeza y hace unos días dejó de ser un prometedor velocista para convertirse en un jugador de rugby 7 con mucho potencial. Quadzilla, como le conocen todos por la descomunal musculación de sus piernas, debutó con los 'aussies' en las Series Mundiales de Rugby en Dubái. Williams, como casi todos los australianos, probó el rugby en el colegio y jugó a Rugby League (rugby XIII) en Brisbane, llegando a enrolarse en la Academia del North Queensland en 2014.

Pero lo que le ha empujado a cambiar el atletismo por el rugby ha sido la posibilidad de cumplir su sueño de ser olímpico con un deporte que siempre le ha llamado la atención. Para Tim Walsh, seleccionador australiano, no hay prisa. Quadzilla comenzó a jugar al rugby 7 en mayo, cuando firmó un contrato con Rugby Australia que concluirá en 2021. Eso le asegura participar en el grupo que peleará por estar en los Juegos Olímpicos de Tokio en julio de 2020.

"Corre rápido y disfruta", ese fue el consejo que Walsh le dio antes de debutar en las Series Mundiales con Australia. "Quiero que se divierta. Los jugadores a su alrededor crearán espacios para él, para que use su velocidad como arma. Es una gran ocasión para él y, a pesar del poco tiempo que lleva en esto, es un gran paso que esté aquí, por lo que no vamos a poner ninguna presión sobre Trae".

Walsh está entusiasmado con la ética de trabajo de Williams y su velocidad para aprender. Eso ha facilitado que se haya integrado en el grupo con una velocidad sorprendente. "Es rápido, poderoso y realmente bueno a la hora de aprender. Se ha ganado su lugar en este equipo y esperábamos verle disfrutar", apuntó el entrenador antes de llegar a las Series Mundiales de 7.

Williams debutó, como se esperaba, en Dubái, pero con una trascendencia escasa. El partido entre los 'aussies' y los estadounidenses se vendió como un duelo entre Quadzilla y el también velocista estadounidense Carlin Isles, un jugador mucho más integrado en la dinámica de la selección de rugby 7 'yankee'. Australia controló el partido con el juego cerca de los agrupamientos evitando que se convirtiese en un correcalles para no dar opciones al letal Isles, que aún así anotó uno de los ensayos estadounidenses, pero los norteamericanos encajaron cuatro ensayos (24-12). El esperado duelo no se produjo porque Trae Williams solo disfrutó de un minuto en el campo cuando el partido ya estaba decantado para su selección.

placeholder Trae Williams (c), durante las semifinales de los 100 metros en los Juegos de la Commonwealth de 2018. (Reuters)
Trae Williams (c), durante las semifinales de los 100 metros en los Juegos de la Commonwealth de 2018. (Reuters)

Antes, Quadzilla se había estrenado en el partido conta Escocia, donde evitó con su velocidad brutal un ensayo de los del cardo con un gran placaje. Williams cumplía su sueño, aunque no lograba posar ningún ensayo, cosa que sí logró alguno de sus compañeros que se estrenaban con la selección, como Josh Turner. Y nada pudo hacer Williams en la sorprendente derrota 'aussie' ante Samoa en los cuartos de final (14-19), que vio desde el banquillo.

Sin embargo, desde el pasado fin de semana el rugby 7 tiene una nueva figura, un atractivo más. Este pequeño gran velocista de 1,65 y 75 kilos, además de machacarse en el gimnasio para escupir un tren inferior descomunal, es un lector empedernido amante de la obra de Hemingway, Austen y Dickens. Lo que explica que actualmente trabaje como crítico literario. Un rugbier cultivado, un velocista lector, un deportista diferente.

Trae Williams tenía una fulgurante carrera de velocista por delante. Un joven que con 22 años había parado el cronómetro en 10,1 segundos, lo que le convertía en el quinto australiano más rápido de la historia. Sin embargo, algo cambió en su cabeza y hace unos días dejó de ser un prometedor velocista para convertirse en un jugador de rugby 7 con mucho potencial. Quadzilla, como le conocen todos por la descomunal musculación de sus piernas, debutó con los 'aussies' en las Series Mundiales de Rugby en Dubái. Williams, como casi todos los australianos, probó el rugby en el colegio y jugó a Rugby League (rugby XIII) en Brisbane, llegando a enrolarse en la Academia del North Queensland en 2014.

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