Nasser Al-Attiyah acusa a Carlos Sainz de ser un mentiroso: "¿Tres pinchazos? No es verdad"

Nasser Al-Attiyah, vigente campeón del Rally Dakar, y Carlos Sainz, gran aspirante a la prueba, se han vuelto a enganchar delante de los medios de comunicación. Después de una jornada donde el piloto español quedó segundo y sacó 23 minutos al qatarí y dejó lejos a otros grandes rivales como Peterhansel, el qatarí cargó duramente contra Carlos Sainz.

El piloto español explicó tras la etapa que ganó De Mevius que "habría perdido 15 o 20 minutos por los pinchazos". En efecto, el madrileño confesó "he tenido un pinchazo lento, después otro y después un tercero que nos ha obligado a poner de nuevo la rueda del pinchazo lento. Ahí hemos perdido bastante tiempo y es una pena, pero al final ha sido un día positivo", resumía Sainz en meta.

Preguntado sobre sus palabras, Al-Attiyah disparó a quemarropa contra el español. "No es verdad. Si hubiera tenido tres pinchazos, seguiría allí. No es verdad, olvídate de eso. Sabemos quién tiene un pinchazo y quién no", subrayó el cinco veces ganador.

"Aún hay un largo camino por delante", respondió ante esa brecha que se ha abierto con el tricampeón español. "Carlos ha hecho hoy un gran trabajo, no ha tenido problemas", explicó un Nasser Al-Attiyah que no se creía la versión del español, que reportó dos pinchazos que se sumaban a otro pinchazo lento más.

Una relación muy tensa

Al-Attiyah y Sainz mantienen rencillas desde los días previos al Dakar. El qatarí abrió fuego al asegurar "¿Audi? Les doy solo tres días y se van a casa, ya se vio en Marruecos y Aragón después de cien kilómetros", declaraba el qatarí antes de arrancar la prueba, recordando la precaria fiabilidad del complejo RS Qe-tron E2 alemán en los dos raids de preparación para el Dakar en 2023.

"Que piense lo que quiera", contestó Carlos Sainz cuando todos los micrófonos corrieron a buscar su respuesta tras el comentario despreciativo de su rival. El español no quiso entrar al trapo. Sainz y Al Attiyah disfrutan una relación ambivalente, repleta de polémicas en el pasado, aunque manteniendo siempre las formas.