La leyenda Peterhansel: "Si no puedo ganar, ayudaré al 100% a mi amigo Nani Roma"

Stephane Peterhansel es la leyenda del Dakar. Con cuarenta y ocho años, en la próximo edición que comienza el día 5 en Argentina, cumple un cuarto de siglo en la prueba. Tiene en su haber el récord de victorias y de ganar en 2014igualaría sus triunfos tanto en dos como en cuatro ruedas. El piloto francés abre para El Confidencial el libro de su amplia experiencia, tanto desde el punto de vista profesional como humano. Ha visto de todo y, también, reconocehaber sentido diferentes sensaciones, como la del miedo.

Este será su Dakar número 25, es decir, la mitad de su vida compitiendo en el Dakar. Con once victorias en su haber, ¿cómo recuerda aquella primera carrera en moto de1988?

(Sonríe) Cuando comencé mi primer Dakar estaba muy motivado para correr esta carrera, pero también tenía miedo porque todo era nuevo para mí. No sabía lo que me iba a encontrar. Era como ir a la guerra, estaba muy estresado. Entonces, me sentía realmente feliz de poder participar en esta carrera, pero me decía “quizás no vuelvas”, así que era una sensación extraña. Pero desde el principio afronté la realidad de la prueba con toda su durezaporque mi compañero de equipo, un piloto muy famoso, tuvo un accidente y se quedó totalmente tetrapléjico, así que recibí el golpe de la realidad directamente en la cara según llegué. Me dí cuenta de que esta carrera no era un juego, era algo muy peligroso.

Ahora, veinticinco años después, cuando comienzo un nuevo Dakar estoy totalmente relajado, con más confianza, pero la pasión sigue ahí todavía, también la motivación

Con su experiencia y conocimiento, echando la vista atrás hacia aquellos tiempos, de las dos ruedas, con todos sus peligros, ¿se dice a sí mismo queentonces estaban locos?

No, no… Pero era muy peligroso, por eso tras participar diez veces en moto decidí parar. Pero nunca tuve una caída seria, probablemente porque en mi primera edición vi a mi compañero de equipo sufrirun accidente a los tres días que le dejótetrapléjico. Así que directamente y muy pronto me llegó el mensaje al cerebro sobre la peligrosidad del Dakar. Entonces afronté las carreras con una actitud particular. Africa era muy peligrosa para este tipo de carreras, hacía falta tener márgenes de seguridad, de reserva, nunca ir al cien por cien de tu capacidad, porque las pistas de Africa son demasiado peligrosas.Al final nunca hice locuras y desconecté totalmente el cerebro.

Por ejemplo, sabías que eras más rápido que un rival, pero un día se volvía loco, iba a toda velocidad y te adelantaba, así que el gran error era intentar seguirle. Tenías que ser capaz de decirte a ti mismo que no tiraras más. Había que trabajar mucho mentalmente.

Pero en la moto usted era consistente, y muy rápido a la vez

Era más consistente que rápido, quizás algún día iba un poco más rápido, pero quería ir siempre a la misma velocidad. Es imposible hacer un Dakar siempre en 'full attack'. Para mí no era posible, era demasiado peligroso. Necesitaba reducir al mínimo el tiempo de ataque.

¿Y cómo le sirvieron aquellos años de la moto para los coches? Este año podría igualar su número de victorias en cuatro ruedas a las conseguidas sobre dos. ¿Mantiene también el cerebro ‘conectado’ en los coches?

(Se ríe) Todo lo que aprendes en la moto es posible llevarlo al coche. Intento tener la misma estrategia. Cuantos más kilómetros haces en el Dakar más experiencia tienes. La experiencia es esencial. Pero en el coche puedes acercarte al límite más tiempo porque te sientes seguro, y quizás vuelques, pero la gran diferencia con la moto son las consecuencias de un golpe. Cuando competía en moto, cada día, durante toda mi carrera, treinta minutos antes de la salida, estaba completamente revuelto, el estómago… como James Hunt en la película de Rush, porque sabías que salías al peligro. Luego, cuando comenzaba la etapa me olvidaba de todo. Sin embargo, con el coche, cinco segundos antes de la salida estás totalmente relajado.

¿Y cómo luchaba entonces con ese miedo?

Es por lo que decidí parar en moto. Cada día así, quince veinte días así no era nada agradable. Por eso, con el coche no me importa seguir compitiendo, y llevo ya quince años. No era fácil manejar aquello, pero al final intentaba concentrarme en el objetivo.

Durante 25 años ha recorrido compitiendo en la mayor parte de Africa (en 1992 el Dakar llegó hasta Ciudad del Cabo). Ahoraestá recorriendo gran parte del continente sudamericano. Personalmente, ¿qué le ha aportado la experiencia del Dakar?

Para mí, el paisaje fue un gran 'shock'en mi primer Dakar, probablemente uno de los más hermosos desiertos era el de Argelia del Sur, y nunca he encontrado un lugar igual. Pero Sudamerica también es muy interesante, con un espíritu totalmente diferente, con una atmósfera distinta, una gran recepción de la gente. Cuando estamos cerca de los Andes el paisaje es increíble.Estoy un poco dividido entre Africa y Sudamérica.

Aprendes también mucho de la gente, su mentalidad, totalmente diferente. En Africaes una vida por la supervivencia,no se puede entender la carrera contra el tiempo como en Occidente, porque lo más importante es sobrevivir en las duras condiciones del desierto. Cuando ves esto, te das cuenta que el dinero no es lo más importante, sino cosas muy sencillas.

¿Y cómo es la competición enel Dakar sudamericano?

Has de ser casi perfecto, porque si cometes un pequeño error pierdes la carrera. En Africa sepodía perder una hora al principio de la carrera, pero luego podías recuperar. Ahora, si pierdes veintes minutos, ‘finito’.

¿De dónde saca la motivación y el ‘hambre’ para seguir compitiendo alguien que lo tiene todo ya?

Es ya una cuestión de pasión y disfrute. Encontrar esa motivación en la moto era complicado, había demasiado estrés, pero en el coche es un auténtico placer, las pistas, los derrapes, los paisajes... Aún así, este año hice dos carreras en motos, en Italia y Rumania, y todavía tengo un contrato con Yamaha, después de veintiséis años. Mi gran pasión es todavía la moto, nunca en el Dakar pero me encantan las pruebas de enduro.

Para el Dakar de este año, tiene al lado varios Minis oficiales, quizás la montura más competitiva para la victoria.¿Qué espera de esta prueba para usted? ¿Y qué piensa de Nani Roma y Carlos Sainz?

Quiero pensar que tengo opciones de victoria, pero no es fácil, Nani Roma será uno de mis rivales más duros, ha tenido una gran temporada y ha ganado muchas carreras, cada día tiene más confianza. Y si no puedo ganar, me encantaría que ganara él, es realmente un amigo (además de ser su compañero de equipo junto a NasserAl-Attiyah) . Si no tengo opciones de victoria me emplearé al cien por cien para ayudarle a ganar.

Y en cuanto a Carlos, siempre es peligroso y rápido, tiene una gran técnica de pilotaje y velocidad. Y una de sus grandes cualidades es que es un auténtico luchado. Realmenteno le conozco desde hace tanto tiempo como a Nani, pero cuando le veo en el coche, cuando acaba una etapa, está totalmente destrozado. Da más del cien por cien al volante, es algo que respeto mucho.