Las tres caídas de Lorenzo terminan por confirmar su maldición en Sachsenring

Jorge Lorenzo ha protagonizado la imagen del fin de semana en MotoGP. O más bien, las imágenes. El mallorquín se ha caído nada menos que tres veces en lo que llevamos de Gran Premio de Alemania, lo que termina por confirmar las malas sensaciones que lleva acumulando durante estos días. Su poca confianza en la moto y las reviradas condiciones del circuito han hecho que el campeón del mundo haya besado el suelo tantas veces.

La primera fue el viernes, en la curva 11 del circuito de Sachsenring. Se trata de una de las más complicadas del calendario, ya que es altamente peligrosa debido a la forma del trazado. Desde la curva 3, que es a derechas, todas son a izquierdas hasta la curva 11. Eso normalmente provoca que el flanco derecho del neumático se enfríe y pierda tracción a la hora de apoyarlo al tumbar la moto. Además, el frío vivido durante la sesión no hizo más que añadir complicaciones.

Brandl sufrió el mismo destino que Lorenzo segundos después -de hecho, su moto pasó bastante cerca del mallorquín cuando trataba de levantarse- y Viñales. El pentacampeón se asustó, ya que después del aparatoso golpe, estaba bastante dolorido. Todo quedó en "solo" un esguince de tobillo y una contusión en la mano izquierda que no le impidió subirse de nuevo a la moto en la clasificación.

Ahí, Lorenzo cayó dos veces. La primera vez en la curva 8, con poco ángulo pero muy larga. Ahí, tocó el piano y la línea, lo que produjo que su Yamaha se desestabilizara y se fuera al suelo. Pese al contratiempo, consiguió meterse en la Q2 para pelear por la 'pole'. Jamás había estado en una Q1 en toda su carrera, siempre había conseguido un tiempo en libres que le permitiera acceder directamente a la Q2,... Pero Sachsenring está maldito para Jorge.

En la Q2 volvió a besar el asfalto y eso le hizo estallar. No se hizo daño, pero el 'cabreo' del piloto se vio con claridad. Por tercera vez en 24 horas perdió el equilibrio. En esta ocasión, fue en la curva 1, ubicada justo después de la larga recta de salida. La moto se le fue recta y acabó en la puzolana. Al final, con tanto contratiempo, consiguió salir en undécima posición.

La maldición de Lorenzo en Sachsenring

Las malas sensaciones del fin de semana no solo están producidas por la moto. Jorge Lorenzo jamás ha ganado en Sachsenring, algo raro para alguien que ha ganado cinco títulos entre todas las categorías. Desde su debut en 2002, el mallorquín no ha logrado doblegar a todos sus rivales en este trazado.

De hecho, Valentino Rossi, que tampoco andaba muy convencido con la puesta a punto de su Yamaha, mejoró a medida que rodaba hasta conseguir un tercer puesto en la línea de salida. Tampoco ha logrado todos los podios que le hubiese gustado: seis de catorce posibles. Lorenzo también se cayó en 2005 cuando corría en la categoría de 250cc y en 2013 durante los entrenamientos.

Una temporada repleta de caídas

La mala suerte que acumula en Sachsenring se une a que la diosa Fortuna tampoco le ha sonreído a lo largo de la temporada 2016. Después de ocho grandes premios y a punto de comenzar el noveno, se ha ido al suelo en Barcelona, Argentina, Austin, Assen y Sachsenring. Una historia sin precedentes en la carrera de Lorenzo.

La primera fue en Argentina, donde el balear perdió el control de su Yamaha en la curva 1 durante la quinta vuelta. Se fue del país sudamericano sin puntuar. Después llegó Austin. En el circuito estadounidense, el piloto se fue al suelo durante el calentamiento, aunque luego consiguió 20 puntos en la carrera.

Le Mans y Mugello respetaron a Jorge Lorenzo, pero después llegó Barcelona. Ahí Ianonne se llevó por delante al balear en una curva y le echó de la pista. Ahí acabó su participación en la carrera. Dos fines de semana después, llegó Holanda. Ahí, en Assen, durante el FP3, perdió adherencia en la rueda trasera de su Yamaha y acabó con la cara en el asfalto.

Se suman a las caídas de hoy para consolidar, probablemente, que esta es la temporada con peor suerte para Lorenzo. En cinco de los nueve circuitos por los que ha pasado el Mundial de MotoGP, se ha podido ver al mallorquín perdiendo el control de su moto.