Bridgestone obtiene información, pero no el visto bueno de los pilotos

La espera ha entrado en la recta final. Aficionados y pilotos siguen tachando días en sus calendarios viendo que el Mundial de Motociclismo está a la vuelta de la esquina: Dentro de un par de semanas, el telón se levantará en Qatar y todavía hay algunos aspectos por pulir. El principal y sobre el que trabajan todos los equipos señala a Bridgestone y a sus neumáticos. Además de los dos entrenamientos de Sepang, la marca japonés programó una tercera parada en Phillip Island para trabajar de forma específica con los nuevos suministros sobre los que montarán los pilotos esta temporada. Información han obtenido, pero no el visto bueno de nombres como Lorenzo o Pedrosa. Y es que algunos pilotos todavía no saben qué compuestos usarán en Qatar.

La primera toma de contacto tuvo lugar en Valencia, un día después de acabar la temporada de 2013. Tras esos test, los motores se apagaron hasta el pasado mes de febrero. Fue entonces cuando los pilotos hicieron las maletas rumbo a Malasia para desempolvar sus nuevas máquinas y Marc Márquez recordó a sus compañeros de parrilla por qué había ganado el título en su primer año en la máxima categoría. El dominio de Honda en la primera toma de contacto de 2014 se hizo extensible a la segunda que tuvo lugar en el mismo trazado. Semejante superioridad respondía a la mejor adaptación de Honda a los nuevos neumáticos proporcionados por Bridgestone. Los problemas que Yamaha tenía en las suspensiones no terminaban de desaparecer y los avisos y las críticas de Jorge Lorenzo y Valentino Rossi no se hicieron esperar.

Lo cierto es que en los primeros entrenamientos oficiales, los equipos tuvieron a su disposición tres juegos con especificaciones de 2014 aunque trabajaron con los de 2013. Por esta razón, no era útil hacer simulacros de carrera puesto que la información que se obtenía no servía ni a los equipos ni al fabricante de neumáticos. Las cosas cambiaron en los segundos test que se vivieron en Malasia ya que se usaron las gomas que Bridgestone ha preparado para esta temporada, unos neumáticos que algunos ya han definido como peculiares y complicados. Jorge Lorenzo fue más allá asegurando que no le daban confianza y es que Yamaha ha sido el equipo que más problemas ha tenido.

La clave no pasa por el desarrollo sino por la adaptación y hasta que llegaron a Australia, parecía que la marca del diapasón no conseguía acoplar las suspensiones de su moto a los nuevos Bridgestone lo que le hacía perder agarre en el paso por curva y le impedía coger ritmo de carrera o hacer vuelta rápida. En Phillip Island las cosas han cambiado. El circuito ha sido el elegido porque la pasada temporada el desgaste de las ruedas fue tal que hubo que improvisar una parada en mitad de la carrera para que los pilotos cambiasen de moto. Esta vez, sin gaviota de por medio, Jorge Lorenzo ha liderado la tabla de tiempos aunque su mejor crono llegó cuando su moto llevaba neumáticos con especificaciones de 2013. La parada en el trazado australiano estaba planificada por Bridgestone cuyo objetivo pasaba por obtener la mayor información posible, los tiempos eran lo de menos.

Este punto lo ha cumplido, pero los pilotos siguen sin dar el visto bueno a sus nuevas gomas: el primer día comenzaron con seis juegos y han ido descartando para llevar a cabo tandas intermedias en la segunda jornada y una simulación de carrera desarrollada el último día. Para Pedrosa las sensaciones han pasado de no ser muy buenas a definir como positivo el paso por Phillip Island mientras Jorge Lorenzo volvió a incidir el rendimiento de los neumáticos asegurando que a día de hoy, no sabe cuál llevará en Qatar. Tampoco hay que olvidar que la pista registrará 20 grados menos cuando se celebre el gran premio en octubre por lo que las condiciones serán distintas.

Losail recibirá a las tres categorías dentro de un par de semanas, tiempo que Bridgestone empleará en aplicar a sus gomas la información obtenida de los últimos test. Será entonces cuando haya que tomar elecciones y se sabrá si, a pesar de las críticas, el fabricante sigue al frente con los compuestos proporcionados hasta ahora o introduce modificaciones.