Marc Márquez: "En casa me darán una colleja si despego los pies del suelo"

Es probable que se hayan acabado los calificativos para definir lo que está haciendo esta temporada Marc Márquez. El joven piloto de Cervera está rompiendo todos los registros en su debut en la categoría reina del motociclismo mundial. Hasta Valentino Rossi se rinde a los pies del que todos señalan como el nuevo 'capo' de este deporte. Líder del mundial, con cinco victorias en su estreno en MotoGP, Márquez disfruta de lo que más le gusta, pilotar. El título de campeón del mundo ya no es una utopía, es una realidad más que palpable, pero el piloto del equipo Repsol Honda quiere ser prudente, sólo así cree que se pueden alcanzar los éxitos. Dentro de su apretadísima agenda, hace un hueco a El Confidencial para charlar de todo lo que le está pasando a sus 20 años y lo que aún queda por venir. Una auténtica delicia.

¿Habrías imaginado una temporada como esta?

No, la verdad es que lo estoy haciendo mejor de lo que todos esperábamos, incluido yo. Hicimos una buena pretemporada y hemos conseguido una regularidad para estar en el podio que en el salto a Moto2 me faltó, pero sin las lesiones de Jorge y Dani creo que habría sido todo diferente a estas alturas.

Todo el mundo habla de la adaptación al cambio de cilindrada, sobre todo en el salto a la categoría reina. A ti casi ni te ha hecho falta, ¿no?

Sinceramente, la verdad es que venir de Moto2 me sirvió mucho, porque ya era una moto casi del mismo peso, de cuatro tiempos, y sí que es cierto que aquí hay mucha más potencia y electrónica, pero desde que me subí a la RC213V me sentí muy cómodo.

¿Qué significa competir contra un ídolo y/o mito como Valentino Rossi? ¿Y ganarle?

Es una sensación especial. Cuando estás en la pista no lo piensas, haces tu carrera, pero cuando te paras a mirarlo o estás en el corralito, nos divertimos mucho. Él es uno de losmás grandes, o el que más, de la historia.

Tal y como se han desarrollado los acontecimientos del Mundial de este año, te has convertido en el gran favorito al título. ¿Es una presión excesiva?

No, para nada. La presión me la pongo yo, porque quiero intentar estar delante, pero es el primer año y todo lo que venga bienvenido será, pero no hay ninguna obligación. Esta situación nos ha sorprendido a todos, pero todavía queda muchísimo campeonato y no tengo esa presión.

¿Realmente te ves levantando el título el año de tu debut?

¡Para nada! Sería muy bonito, pero no es algo que piense. Como te digo, queda mucho campeonato y nosotros nos centramos en seguir la misma línea que hemos hecho hasta ahora.

Tu forma de pilotar y valentía han provocado algún que otro enfado en la parrilla (caso Lorenzo). ¿Consideras excesivo ese tipo de enfados?

Bueno, en caliente se pueden decir cosas, pero eso se queda en la pista. En el caso de Lorenzo, por ejemplo, en frío hablamos y ya está olvidado.

Sin embargo, todo el mundo del motociclismo te sube a los altares. Expertos, compañeros, aficionados. ¿Cómo se asimila eso con tan sólo 20 años?

Se asimila como se puede, pero supongo que el entorno ayuda mucho. En casa siempre me han inculcado la importancia de ser humilde y ya saben que si algún día se me despegan los pies del suelo, tendrán que darme una colleja (risas).

¿Uno se acostumbra tanto a ganar que luego las derrotas escuecen más? ¿Uno llega a saber perder?

No, uno no se acostumbra a ganar, para nada. Hay que trabajar muy duro para ganar, y siempre hay que saber perder y aprender de los errores para mejorar.

Desde muy niño, en el mundo de las motos.¿Te imaginas algún día fuera de él?

La verdad es que no. Incluso cuando los periodistas me preguntan qué haría si no fuera piloto, siempre he sabido que mi sitio está aquí. Como mecánico o lo que fuera, pero en las motos.

¿Cómo es Marc Márquez fuera de los circuitos? ¿A qué dedica su poco tiempo libre?

Una vida muy normal. Procuro descansar, divertirme y entrenar. Soy un chico de 20 años, al que le gusta estar con sus amigos, disfrutar en casa y de la tranquilidad de mi ciudad, Cervera, y por suerte también disfruto mucho de mis entrenamientos. Ir en bici, hacer motocross o dirt track es cierto que forman parte de mi entrenamiento, pero son mis aficiones favoritas.

¿La fama cambia?

Creo que no, o eso espero. Es lo que decía antes, en casa y desde mi entorno, con Emilio Alzamora, siempre hemos tratado de mantener los pies en la tierra, mis aficiones, mis amigos. Es cierto que has de saber parar y no dejar llevarte por la corriente, ser consciente de cómo has llegado donde has llegado, y lo importante que es el trabajo y la humildad en este mundo.

¿Qué locura te atreverías a hacer en caso de ser el campeón del mundo más joven de la historia de MotGP?

La locura sería ser campeón del mundo y pensar que ya lo soy, así que si llega, tendremos que improvisar.