Inglaterra sigue con vida y EEUU se salva en el descuento

Inglaterra cumplió con lo previsto y ya está en los octavos de final del Mundial tras derrotar a Eslovenia con suficiencia, pero sin excesivas florituras. Fabio Capello salvó la papeleta gracias a un tanto de Defoe y, sobre todo, a un cambio en la actitud de sus jugadores. Las críticas recibidas de la siempre cordial prensa inglesa motivó a unos jugadores que salieron decididos a sentenciar por la vía rápida, con un fútbol directo, que propició hasta cinco claras ocasiones de gol en la primera mitad. Barry, Johnson, Rooney y Lampard tuvieron oportunidades para poner delante a la selección inglesa antes del tanto de Defoe. 

 

La distancia entre uno y otro equipo quedó manifiesta desde el principio del partido, pero el conformismo inglés al verse clasificado para los octavos sirvió de freno a su juego, a su ambición. Tras el descanso Inglaterra se limitó a dejar correr el tiempo, a ceder la pelota a unos eslovenos que tampoco mostraron una ambición desmesurada, pensando que el empate que reflejaba el marcador del Estados Unidos-Argelia le beneficiaba y le permitía seguir con vida. No arriesgaron, jugaron con fuego y cuando el equipo yankee se adelantó en el marcador ya no tenían tiempo para nada, sólo para lamentarse y llorar su eliminación del Mundial.

 

Inglaterra, aunque parezca mentira, terminó pidiendo la hora. Un gol esloveno hubiera significado el adiós de Capello, de ahí que sus jugadores se refugiaran en un córner a la espera del pitido final del partido. Hasta en tres ocasiones buscaron la esquina como consuelo ante una Eslovenia que contó con una triple ocasión que hubiera sido definitiva para continuar su viaje en Sudáfrica y para terminar con el sueño inglés, pero la inocencia en el remate de los eslovenos certificó su defunción mundialista. Y todo gracias al gol del norteamericanos Donovan en el tiempo añadido del choque ante Argelia y que valió la más que merecida presencia norteamericana en la siguiente ronda.

 

La lección de estos dos partidos la marca la ambición de los cuatro equipo. Estados Unidos buscó el gol desde el primer minuto y al final tuvo el premio de pasar como primero de grupo. Inglaterra se limitó a cumplir mostrando carencias, mientras que Eslovenia pagó cara quien sabe si su falta de ambición, su falta de fútbol o una mezcla de los dos factores. Argelia pasó de puntillas y nada pudo hacer ante el poder estadounidense.