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Los ultras convierten el partido del Calderón en un homenaje a la estupidez
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graves incidentes antes del atlético-deportivo

Los ultras convierten el partido del Calderón en un homenaje a la estupidez

El Atlético ganó al Depor, pero fue lo de menos. Un hincha gallego se debatía entre la vida y la muerte tras una pelea entre ultras de ambos equipos

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Inevitablemente, el partido matinal del Calderón no puede comentarse abstrayéndose de lo sucedido unas horas antes y a escasos metros del estadio de la ribera del Manzanares. Es más, se hace complicado hablar de fútbol cuando la gentuza que lo utiliza como excusa para delinquir sigue teniendo tanto protagonismo cuando están perfectamente localizados e identificados. Por ello, lo curioso es que el partido pretendiera jugarse como si nada hubiera ocurrido. Pero no fue así. Ni el ambiente de la grada ni el ánimo de los dos equipos fueron los que debieron. El Atlético se limitó a cumplir con el guión. Ganó (2-0) a un Deportivo que está condenado a luchar por no descender y los rojiblancos siguen con paso firme la estela del Real Madrid.

Cuando el balón echó a rodar en el Calderón, un ultra del Depor, de los Riazor Blues concretamente, se debatía entre la vida y la muerte en el hospital Clínico como consecuencia de una pelea con utras del Atlético, quienes, presuntamente, le arrojaron al río. Una salvajada que una vez más debería sonrojar -además de recapacitar- a quienes les dan cobijo con el pretexto de lo mucho que animan. La pregunta es si dadas las graves circunstancias, lo lógico hubiera sido no jugar el partido, aunque así se decidió ya que la Liga valoró suspenderlo, algo a lo que Atlético y Deportivo estaban dispuestos, pero, según el presidente de la LFP, Javier Tebas, no encontró a nadie de la Federación Española de Fútbol para poder hacerlo.

El Atlético condenó los incidentes ocurridos en Madrid Río, aunque lo cierto es que el Frente Atlético ya asesinó en 1998 a Aitor Zabaleta, un aficionado de la Real Sociedad en los aledaños del Calderón, y los ultras siguen campando a sus anchas por él. Eso sí, el silencio vivido en el estadio y los pitos al Frente Atlético cada vez que iniciaban algunos de sus cánticos demuestran que la inmensa mayoría de la afición del Atlético está en contra de la violencia y los violentos. Los gritos de 'asesinos, asesinos' de los pocos hinchas del Deportivo que entraron al campo, pues los implicados en la pelea fueron retenidos en la Casa de Campo, completaron un ambiente en el que se hacía complicado disfrutar del fútbol.

Los rojiblancos buscaban su tercera victoria consecutiva en casa tras las logradas ante el Málaga en Liga (3-1) y ante el Olympiacos en Champions (4-0). La novedad en el once de Simeone fue la titularidad de Saúl, junto a Tiago en el eje y con Griezmann y Mandzukic en punta. A los ocho minutos, un gran pase de Koke lo cabeceó Mandzucik al poste, pero lo cierto es que el Depor se defendía con bastante orden. Eso sí, de acercarse a la portería de Moyá, nada de nada. Al borde del descanso, y una vez más a balón parado, Saúl marcó de cabeza el 1-0. Falta lateral botada por Koke, peinada de Mandzukic y gol del canterano rojiblanco en el segundo palo.

El Atlético apuntaló su cómoda victoria a los pocos minutos de la segunda parte. un tiro de Arda desde la frontal del área y a la salida de un córner, lo desvió a su propia portería Sidnei, aunque pudo haber fuera de juego de Tiago y Mandzukic. Y el partido no tuvo más historia. La victoria coloca provisionalmente como segundo al Atlético, a la espera de lo que esta noche haga el Barcelona ante el Valencia, pero esto también es lo de menos en otro día aciago y vergonzoso para el fútbol español. en el que el partido del Calderón no fue otra cosa que un homenaje a la estupidez. El gesto de un aficionado del Atlético y otro del Depor intercambiándose una bufanda en los últimos minutos del partido fue recibido con aplausos por la grada, mientras el Frente Atlético retiraba su pancarta. Ojalá la retiraran para siempre... La escoria sobra en el Calderón, en el fútbol y en la sociedad.

Ficha técnica:

2 - Atlético: Moyá; Juanfran, Giménez, Godín, Ansaldi; Tiago; Arda Turan, Koke, Saúl (Cristian Rodríguez, m. 66), Griezmann (Cerci, m. 74); y Mandzukic (Raúl Jiménez, m. 58).

0 - Deportivo de La Coruña: Fabricio; Juanfran (Laure, m. 16), Diakité, Sidnei, Insua, Luisinho; José Rodríguez, Wilk, Medunjanín (Cuenca, m. 63); Cavaleiro (Toché, m. 77) y Hélder Postiga.

Goles: 1-0, m. 43: Saúl remate una falta lanzada por Koke. 2-0, m. 55: Arda Turan, desde el borde del área tras un rechace en un saque de esquina.

Árbitro: José Antonio Teixeira Vitienes (C. Cántabro). Amonestó a los locales Mandzukic (m. 33) y Giménez (m. 39) y a los visitantes Juanfran (m. 13) e Insua (m. 40).

Incidencias: partido correspondiente a la decimotercera jornada de la Liga BBVA, disputado en el estadio Vicente Calderón ante unos 45.000 espectadores.

Inevitablemente, el partido matinal del Calderón no puede comentarse abstrayéndose de lo sucedido unas horas antes y a escasos metros del estadio de la ribera del Manzanares. Es más, se hace complicado hablar de fútbol cuando la gentuza que lo utiliza como excusa para delinquir sigue teniendo tanto protagonismo cuando están perfectamente localizados e identificados. Por ello, lo curioso es que el partido pretendiera jugarse como si nada hubiera ocurrido. Pero no fue así. Ni el ambiente de la grada ni el ánimo de los dos equipos fueron los que debieron. El Atlético se limitó a cumplir con el guión. Ganó (2-0) a un Deportivo que está condenado a luchar por no descender y los rojiblancos siguen con paso firme la estela del Real Madrid.

Diego Simeone Vicente Calderón
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