El Valencia sigue siendo un polvorín que nadie controla a horas de conocerse su destino
Bankia y la multinacional KPMG, darán por cerrada el miércoles la recepción de ofertas por parte de los inversores interesados en la compra del Valencia
A las 14:00 horas de mañana se empezará a conocer el destino del Valencia. En ese momento, Bankia y su asesor financiero, la multinacional KPMG, darán por cerrada la recepción de ofertas por parte de los inversores interesados en la compra del club. En concreto, para saldar la deuda que el Valencia y la Fundación Valencia tienen con Bankia. Algunas empresas ya se han retirado de la puja, pero otros inversores mantienen su interés en un club que vive uno de los momentos más convulsos de su historia.
Por el momento, ha sido Peter Lim el único que ha dado un paso al frente poniendo las cartas sobre la mesa. Fue Amadeo Salvo el que explicó el proyecto, sin ofrecer todos los datos, del multimillonario de Singapur. El presidente calificó de “barbaridad” la propuesta de Lim, subrayando que la intención del magnate es invertir unos 40 millones de euros en reforzar la plantilla de inmediato para tratar de alcanzar la cuarta plaza que da derecho a disputar la Champions League.
Y hablando de fichajes, la filtración de las fichas de los jugadores, información desvelada por Las Provincias, incendió el club y por encima de todo el vestuario. Sentó a cuerno quemado que se filtraran los emolumentos que ganan los futbolistas, algo que sembró de incredulidad al grupo. No entienden éstos que sucedan este tipo de cosas, que sólo sirven para soliviantar un poco más a un grupo muy poco compacto y en el que desde hace meses hay muchos recelos entre sus diferentes ‘capillas’.
Requisitos innegociables
Para complicar más la situación, varios integrantes de la actual plantilla meditan seriamente abandonar el club en este mercado de invierno. Unos por el poco protagonismo y otros a la vista de las constantes tormentas que asolan la vida diaria de la entidad. Mientras, Juan Antonio Pizzi trata de acomodarse poco a poco en este hostil medio. El técnico argentino ha pedido dos delanteros para empezar a hablar, pero habrá que ver cuáles son los elegidos, pues algunos que han sido ‘tocados’ no se plantean incorporarse a un club que vive un terremoto diario.
En el interior del club el terremoto fue de máxima magnitud, emitiendo un comunicado de inmediato. En el mismo manifestaba ‘su total indignación’, subrayando que ‘la información confidencial fue facilitada hace escasos días por el Valencia CF a requerimiento del Juzgado de Instrucción Número 3 de Valencia, en relación a la querella presentada por Andrés Sanchís contra, entre otros, varios administradores anteriores del Club’. Además, avisó de que ‘el Valencia Club de Fútbol va a iniciar todas las acciones legales a su alcance para esclarecer este asunto y solicitará a las autoridades judiciales pertinentes la colaboración en este caso’.
Este es el panorama que se va a encontrar el futuro dueño del Valencia. El elegido deberá haber cumplido con unos requisitos innegociables. Para empezar, poner en marcha una ampliación de capital con el fin de liquidar la deuda; a continuación, finalizar las obras del nuevo estadio; y para acabar, presentar un proyecto deportivo lo suficientemente ambicioso como para colocar de nuevo al club en primera línea.
A las 14:00 horas de mañana se empezará a conocer el destino del Valencia. En ese momento, Bankia y su asesor financiero, la multinacional KPMG, darán por cerrada la recepción de ofertas por parte de los inversores interesados en la compra del club. En concreto, para saldar la deuda que el Valencia y la Fundación Valencia tienen con Bankia. Algunas empresas ya se han retirado de la puja, pero otros inversores mantienen su interés en un club que vive uno de los momentos más convulsos de su historia.