El plan de Mazinho de separar a Thiago de Rafinha empieza a tomar forma gracias al United

Thiago Alcántara se ha convertido en el gran objetivo del Manchester United de cara a la próxima temporada. El centrocampista español es pretendido por los 'red devils', y el último paso sobre su hipotética salida lo ha dado el Barcelona a través de la eliminación del jugador de una fotografía oficial. Después del espectacular Europeo sub-21 que ha firmado, el club inglés no está dispuesto a dejar que se le escape... pero esta contratación haría realmente feliz a una persona: Mazinho.

El que fuera campeón del mundo con Brasil en 1994 siempre ha demostrado ser una persona ambiciosa. Mazinho nunca se conformó con ser uno más en el terreno de juego, sino que siempre buscó ese punto que le diferenciara de los demás. El exjugador brasileño pasó buena parte de su vida deportiva en España y, a pesar de formar parte de clubes de diferente nivel -Valencia, Celta, Elche y Alavés-, su calidad le valió para ser un habitual de la selección brasileña.

Mazinho ha vivido en sus propias carnes la dificultad que supone triunfar en el fútbol y, desde muy temprano, decidió inculcar sus ideas a sus hijos para que se convirtieran en grandes jugadores. El principal eje sobre el que giró la particular política del exinternacional brasileño fue claro: que ambos se separaran, vivieran vidas paralelas en clubes distintos, para convertirse en iconos de dos aficiones diferentes.

Sin embargo, aunque Mazinho lo intentó, ofreciendo a sus hijos a clubes como Chelsea, Real Madrid o Valencia, no fue capaz de 'colocarlos' en equipos distintos. Así, el Barcelona se interesó en fichar a ambos, ante lo que terminaría cediendo. A pesar de que no encajaba en exceso en su filosofía, Mazinho aceptó que el mismo club se hiciera con los dos jugadores, dando lugar a que Thiago -con 14 años- y Rafinha -12 años- se convirtieran en jugadores del Barcelona. Pero la dualidad seguía estando en sus planes.

Aunque pertenecían al mismo club, ambos jugadores fueron tomado caminos bien distintos en algunos aspectos básicos. Mientras que Thiago se decantó por jugar con la selección española, Rafinha lo hizo por jugar con Brasil; Thiago ha destacado por ser un excelente asistente y Rafinha es un verdadero llegador, un hombre con el gol en la mente; Thiago es imagen de Nike, pero Rafinha lo es de Adidas... Las diferencias entre ambos eran claras, y sólo faltaba el cambio de club para redondear la jugada.

Por ello, la aparición en escena del Manchester United se ha convertido en la posibilidad que Mazinho esperaba desde hacía tiempo. El exjugador confía mucho en las posibilidades de sus dos hijos: mientras que Thiago se puede convertir en una pieza importante de los 'red devils', Rafinha tiene un esperanzador futuro en el fútbol, y se confía que a lo largo de la próxima temporada vaya teniendo su alternativa al más alto nivel. La oportunidad de ambos está muy cerca.

Si finalmente se concreta el fichaje del internacional español por el Manchester United, Mazinho habrá conseguido por fin su objetivo. Tener a dos hijos con perfiles bien diferentes, en clubes distintos, y con características básicas para convertirse en estrellas en distintos equipos. Se acabó el provocar que existan comparaciones entre ambos: Mazinho ha 'creado' dos iconos diferenciados. Sus planes están muy cerca de cumplirse.