Es noticia
El Barcelona se pasea en la Copa aunque el Atlético será otra historia
  1. Deportes
  2. Fútbol
EL ELCHE, UN OASIS EN MEDIO DEL DESIERTO

El Barcelona se pasea en la Copa aunque el Atlético será otra historia

Un oasis en medio del desierto. Así se podría definir la eliminatoria de octavos que el Barça disputó frente al Elche. El escenario de la Copa cambia con el Atlético

Foto: Los jugadores del Barcelona celebran el primer gol del equipo (Efe).
Los jugadores del Barcelona celebran el primer gol del equipo (Efe).

Un oasis en medio del desierto. Así se podría definir la eliminatoria de octavos que el Barcelona disputó frente al Elche. El marcador global, con nueve goles a favor de los azulgranas, habla por sí solo: en la ida firmaron cinco dianas y en la vuelta, cuatro. Un remanso de paz en medio del revuelo que hay en el famoso entorno que rodea al Camp Nou. Durante 180 minutos, el Barcelona pudo olvidarse de las elecciones anticipadas, de las dimisiones y los despidos o de la cara que puso Messi cuando Luis Enrique le mandó un mensaje durante la gala del Balón de Oro. Sólo importaba lo que sucedía dentro del terreno de juego. Bien es cierto que el Elche ayudaba a ello y que los culés no pueden olvidar que el Atlético será otro cantar.

Con el marcador a la vista (0-4), el encuentro que vieron los aficionados que se acercaron hasta el Martínez Valero no tuvo mucha más historia. El Barcelona decidió sustituir la falta de tensión competitiva con dos goles de bella factura, una diana que llegó desde los once metros y un tanto tardío con sello brasileño. A pesar del holgado resultado cosechado en el partido de ida (5-0), los hombres de Luis Enrique no perdieron la intensidad y la seriedad. Algo que agradecieron las gradas de la localidad alicantina que, a falta de tantos locales, se deleitaron con la calidad que sacaron a relucir Mathieu y Sergi Roberto.

El primero ejecutó una falta magistral que se coló, impecable, por la escuadra. El segundo se atrevió y cuando lo hace, llegan goles como el que llevó su firma: un zurdazo colocado perfectamente. Tanto que hasta Luis Enrique lo celebró en el área técnica. Pedro aprovechó un penalti que se antojó un castigo excesivo para el Elche para ratificar su condición de máximo goleador en Copa con cinco tantos; ayer no dejó que nadie lanzase la pena máxima. El remate llegó con el partido viviendo sus últimos minutos gracias a la conexión brasileña que surgió entre Douglas, asistente, y Adriano, rematador.

Como ven, muchos nombres poco habituales en las alineaciones de Luis Enrique. Y es que la eliminatoria invitaba a que el asturiano innovase, como suele ser habitual, pero para dar tiempo a los más jóvenes. Los Munir, Halilovic, Traoré, Sergi Roberto, Gerard o Rafinha tenían una oportunidad de oro para demostrar al jefe que sus ganas y su buen hacer siguen intactos a pesar de acumular minutos fuera del once titular. Sabían que la mirada de Luis Enrique les estaba examinando en un ambiente más relajado al habitual en el Barcelona y cumplieron. No dejaron pasar el tren que pasó por el Martínez Valero.

Es cierto que el Elche hizo lo que pudo y esto era un factor que jugaba a su favor, pero el técnico asturiano ya sabe que sus continuas variaciones cuentan con piezas nuevas. Los suplentes respondieron en la Copa, un torneo que parece antojarse perfecto para darles tiempo, pero Luis Enrique debe tener en cuenta que a partir de ahora los rivales tendrán mayor empaque que el Elche. Sin ir más lejos, la semana que viene tendrá su primer cara a cara con el Atlético de Madrid y eso será otra historia. Los de Simeone llegan a cuartos después de haber eliminado al vigente campeón, el Real Madrid, y con ganas de resarcir su derrota liguera en el Camp Nou. El escenario de la Copa del Rey cambia. Los ocho clubes que han llegado a cuartos son equipos de primer nivel y a los azulgranas les ha tocado bailar con la más fea. El Atlético es un arma de doble filo: puede ser la guinda del amargo pastel que se están comiendo en el Camp Nou en las últimas semanas o el punto de inflexión de este Barcelona.

Un oasis en medio del desierto. Así se podría definir la eliminatoria de octavos que el Barcelona disputó frente al Elche. El marcador global, con nueve goles a favor de los azulgranas, habla por sí solo: en la ida firmaron cinco dianas y en la vuelta, cuatro. Un remanso de paz en medio del revuelo que hay en el famoso entorno que rodea al Camp Nou. Durante 180 minutos, el Barcelona pudo olvidarse de las elecciones anticipadas, de las dimisiones y los despidos o de la cara que puso Messi cuando Luis Enrique le mandó un mensaje durante la gala del Balón de Oro. Sólo importaba lo que sucedía dentro del terreno de juego. Bien es cierto que el Elche ayudaba a ello y que los culés no pueden olvidar que el Atlético será otro cantar.

El redactor recomienda