Arbeloa, no estás solo: el Atlético le da pánico a toda Europa

Antes de hablar del PSV Eindhoven y de si el Atleti es favorito, que lo es, para pasar a cuartos de Champions League, y el supuesto fracaso que supondría caer en la primera ronda de eliminación directa, hablemos de qué hace el Atlético de Madrid otra vez en octavos de final de la máxima competición europea. Antes de hablar de que el Atleti es mucho mejor equipo que los holandeses, que es uno de los ogros de Europa, que hace ya tiempo que nos hemos acostumbrados a verlo por estas zonas privilegiadas, analicemos la historia del Atleti. Y echémonos las manos a la cabeza, pase lo que pase este martes en el césped del Calderón.

Nadie pudo hablar el año pasado de fracaso por no acercarse lo suficiente a repetir el éxito europeo de la 13-14. Nadie le exige al Atleti que gane la Champions League, sino que todos le otorgamos el beneplácito del equipo modesto (apelativo cada vez menos aplicable para el club rojiblanco) que de repente apareció entre los mejores y que no siempre se le espera por ahí. Pero también debemos recordar a gritos, escribirlo por doquier y escucharlo cuando nos lo digan, lo poco que sorprende verlo ya a estas alturas, juntándose de manera natural con la aristocracia europea como si siempre hubiera formado parte de ella. Dice una de las leyes de la dialéctica que todo cambia, todo se mueve, pero ciertas variaciones se producen bruscamente. Lo que era un cambio cuantitativo se transforma en un cambio cualitativo de manera radical, se produce una revolución, que se asienta. Eso hizo el Atlético con el Cholo.

Hasta el año pasado, el Atlético de Madrid cambió un registro negativo en su historia. Jamás había alcanzado la antepenúltima ronda de la Copa de Europa en dos ediciones consecutivas. Nunca había repetido un buen papel. Sus participaciones más históricas, las semifinales de 1959, la final de 1974, no se correspondieron posteriormente con otro otro buen torneo. Esto es razonable por el hecho de que había que ser campeón de Liga para jugar en Europa, y es que las veces que el Atleti revalidó una Liga ocurrieron antes de que Bernabéu se inventara lo que hoy es la Champions League.

Pero desde que la Champions abrió sus puertas a equipos no campeones, el Atleti no ha tenido mejores números. Antes de la era del Cholo, alcanzó los cuartos de final en la 96-97, pero el Ajax de Van Gaal le echó en la prórroga. Y hasta que se cargó al Milan en 2014 no pisaba de nuevo esa ronda tan importante y tan traumática para la Selección. El año pasado repitió. Tuvo que ser por penaltis, pero no por ello supuso mayor sorpresa. El Atleti estaba entre los ocho mejores del continente, porque es de los ocho mejores del continente. Lo era entonces, y hoy lo es también. Más aún, si cabe. El Atleti está entre los cuatro mejores, y por eso nadie le quiere en el sorteo del viernes.

En cuartos ya va quedando poco lastre que soltar. Algún equipo con no demasiada reputación internacional quedará aún en la próxima ronda, como pueden ser el Benfica y el Wolfsburg, pero lo normal es que el resto de equipos que queden con vida den miedo a cualquiera. Si todo sale según lo previsto, el Barça, el campeón, estará en cuartos. Con él, el Madrid, y puede que el Bayern. Es el 'top 3' de clubes a evitar, a esperar que toquen cuando ya no haya más remedio, es decir, en la final. Por ahí estarán también el Paris y el Manchester City, poderosos, acaudalados, pero no muy temidos. ¿En qué grupo caería el Atleti si elimina al PSV? Sin duda, en el primero. Porque el Atleti ya daba respeto la primera vez que se metió en estas lides, pero ahora, tiempo después, hay que añadir la experiencia adquirida, que es un grado fundamental.

La progresión desde el derbi

Es por eso que Álvaro Arbeloa, al que se le respeta poco, pero cuando habla dice grandes verdades, dijo que "para el resto de equipos sería bueno que el Atlético cayera". Lo dice porque así lo siente. Cuando habla sobre esto, el lateral madridista no está pensando en que es el enemigo histórico, el vecino antipático, la piedra en el zapato del Madrid, sino un adversario temible. Prefiere casi a cualquier otro antes que al Atlético, porque los del Cholo se han ganado el respeto de todos, sobre todo del Real Madrid.

Si los octavos de final se hubieran producido hace tres semanas, a lo mejor la sensación general no habría sido la misma. El Atleti era peligroso, pero no tanto. Era accesible. Sin embargo, el derbi, precisamente el derbi, cambió la trayectoria de los rojiblancos. Habían surgido dudas sobre el juego, la falta de gol y la solución de mandar a Jackson a China. Pero ganarle al Madrid en el Bernabéu les ha hecho encadenar una serie de resultados positivos y buen nivel global. Ahora hasta marcan tres goles por partido. Cuando hay que marcarlos es esta noche, ante el PSV, para que no peligre el pase y se pueda seguir cerniendo el fantasma sobre Europa.

Alineaciones probables:

Atlético de Madrid: Oblak; Juanfran, Giménez, Godín, Filipe; Saúl, Gabi, Augusto, Koke; Carrasco y Griezmann.

PSV Eindhoven: Zoet; Arias, Bruma, Héctor Moreno, Willems; Propper, Guardado, Van Ginkel; Narsingh, De Jong y Locadia.

Árbitro: Mark Clattenburg (Inglaterra).

Estadio: Vicente Calderón.

Hora: 20.45 (Antena 3).