La desaparición de las tres mujeres de Rubiales y la reaparición del agente García 'Graba'

Aunque el titular pueda parecer el de una novela de Joël Dicker, en realidad se trata del último capítulo de la desastrosa gestión del fútbol femenino, y del fútbol español en general, por parte de la federación de Rubiales. Tras las convulsiones vividas en la Selección, este martes la Liga Profesional de Fútbol Femenino (LPFF) se presentará en sociedad con un acto en el que se dará a conocer su identidad de marca y contará con la presencia de jugadoras, clubes, instituciones, medios de comunicación y, por supuesto, grupos políticos, pues sabido es lo sensibles que estos son con todo lo que ataña a la mujer, aunque en algunos casos sea de cara a la galería.

Si bien en la visita a Moncloa con las campeonas del mundo sub 20, a 'Rubi' se le vio un poco apartado, pues no en vano se trata de un investigado por la Fiscalía Anticorrupción y ahí está todo lo desvelado sobre él en este diario, Pedro Sánchez saludó al presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF) como si nada hubiera pasado. Quién sabe, igual le confundió verle con la medalla de oro colgada al cuello...

Opinión

TE PUEDE INTERESAR

Franco ningunea a las mujeres y cede al 'caudillo' Rubiales un sorteo que acaba en chapuza

Kike Marín

Quizás esta sea la explicación de que el secretario de Estado para el Deporte, José Manuel Franco, volviera a blanquear a Rubiales al convocarle a una reunión con la presidenta de la citada LPFF, Beatriz Álvarez de Mesa, como si la que fuera directora general de Deportes del Principado de Asturias no fuera capaz de gestionar por si sola la función que se le ha encomendado o, lo que viene a ser lo mismo, tuviera que estar tutelada por un hombre. Ya saben, mucho lenguaje inclusivo en cuanto al género, pero al final el mismo número de mujeres con capacidad de decisión: ninguna.

La reunión auspiciada por Franco al menos permitió que dos días después la situación se desatascara y se empezaran a tomar decisiones sobre temas tan importantes como, por ejemplo, el número de extracomunitarias. Con el director general del CSD, Albert Soler, como anfitrión, por parte de la LPFF asistieron sus tres representantes habituales. Es decir, Pablo Vilches, director general, y los asesores legales, Irene Aguiar y Santiago Nebot. Sin embargo, por parte de la RFEF sorprendió la ausencia de Ana Álvarez, directora del Departamento de Fútbol Femenino, María Tato, su antecesora en ese cargo y ahora recolocada en el Área Internacional, y Patricia González, a saber, hija del abogado Tomás González Cueto, brazo armado de Rubiales y bajo sospecha por la conexión Caravaca-Franco.

La propaganda de la RFEF

Según se anunció a bombo y platillo desde Las Rozas, las mencionadas iban a ser "las tres mujeres encargadas de las negociaciones que deberán culminar con un documento en el que se establezcan los principales aspectos en los que ambas partes deberán coordinarse, para lograr así que la primera edición de la Competición Profesional de Fútbol Femenino sea un éxito". Para añadir que "la delegación designada por la RFEF, compuesta únicamente por mujeres, atesora una gran experiencia en la organización de competiciones del fútbol femenino, así como una trayectoria profesional en el sector de gran reputación y reconocimiento".

Pues bien, en otro gesto que demuestra la falta de confianza de Rubiales en las mujeres y, lo que es casi peor, la utilización que hace de ellas para aparentar lo contrario, por parte de la RFEF acudieron su secretario general, Andreu Camps, y Pedro González Segura, jefe de la asesoría jurídica, aunque más conocido en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas como el 'concejal de festejos', además del reaparecido Miguel García Caba, el vicesecretario de la RFEF que confesó ser el autor de la grabación de una reunión que mantuvo el 28 de mayo con Javier Tebas en un hotel de Madrid.

El presidente de la patronal del fútbol español, que desde entonces le llama García 'Graba', denunció a quien fuera jefe de los servicios jurídicos de LaLiga, para pasar posteriormente al Real Madrid y de ahí a la RFEF. En la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, donde nadie se atreve a acercarse a él por miedo a que le grabe, misteriosamente fue relevado de esas funciones para ponerse al servicio de Rubiales e intentar, sin éxito, involucrar al mencionado Tebas en una presunta trama contra él.

La confesión que dejó claro todo

"Desde el otro lado del muro querían captarme como a Juan Rubiales, el tío del presidente", llegó a decir García Cava en una entrevista concedida al mismo medio que publicó sus grabaciones, la mayoría sacadas de contexto con el único objetivo de intentar hacer ver que detrás de los Supercopa Files de El Confidencial estaba Tebas. Este, que aprovechó para recordar que "Rubiales grabó en su día, y aún no ha dado explicaciones, a la exsecretaria de Estado para el Deporte Irene Lozano y al exministro José Guirao", acusó al presidente de la RFEF de mandarle a Miguel García Caba a grabarle.

"Me contaron que Rubiales le había mandado a casa, que en la Federación no le quería y que se quieren reunir conmigo. Lo hice porque quería denunciar. Es lo que he hecho siempre que me han querido denunciar temas de corrupción. Tienen que sacar toda la cinta, se habló de temas muy interesantes en esa reunión", explicó el presidente de LaLiga. "Aunque tengo serias dudas de que las declaraciones de Miguel García Caba hayan sido realizadas en plena libertad y no bajo presión de terceras personas", aseguró Tebas, quien anunció una querella contra él "por los comentarios injuriosos y las calumnias vertidas" en la mencionada entrevista.

TE PUEDE INTERESAR

Las capitanas del Barça llaman a Rubiales para pedirle la destitución del seleccionador nacional

Kike Marín

Claro que siendo noticiable la reaparición del vicesecretario de la RFEF, en sustitución de las tres mujeres de Rubiales ahora que sí se tienen que tomar decisiones, aún lo es más que Caba, precisamente una de las personas que allá por 2015 más tuvo que ver en la creación de los estatutos de la Asociación de Clubes de Fútbol Femenino (ACFF), que en 2020 ya registró la solicitud oficial de calificación de profesional para la Primera División, sea ahora quien, "desde el otro lado del muro", como diría él, pretenda coartar los derechos de la LPFF una vez que, a pesar de la RFEF, finalmente está en marcha y, por tanto, lejos del alcance de Rubiales, a quien le gustaría presidir LaLiga y hace tiempo que podría haber sido inhabilitado para presidir la RFEF...