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La grabación que lleva a Rubiales ante el juez por la presunta agresión a una mujer
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JUICIO ORAL AL PRESIDENTE DE LA RFEF

La grabación que lleva a Rubiales ante el juez por la presunta agresión a una mujer

Según el auto de la Audiencia Provincial de Valencia al que ha tenido acceso El Confidencial, "la implicación es racional por basarse en indicios suficientes de responsabilidad criminal"

Foto: Luis Rubiales, presidente de la Federación Española de Fútbol, antes de una rueda de prensa. (Reuters)
Luis Rubiales, presidente de la Federación Española de Fútbol, antes de una rueda de prensa. (Reuters)

Si el asunto ya es sensible por tratarse de un presunto caso de violencia contra una mujer, "la consecuencia más extendida de la discriminación de género", según Amnistia Internacional, el hecho de que el acusado y ahora también imputado sea nada menos que el presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF) y vicepresidente de la UEFA lo agrava si cabe aún más. No en vano se trata de un cargo público y de un ámbito tan expuesto como es el fútbol. Sin salir de la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, cabe recordar que Andreu Subies, vicepresidente económico de la RFEF, dimitió en marzo del año pasado tras ser acusado de un presunto desvío de fondos para beneficio propio.

[El candidato a suceder a Villar, acusado de agredir a la arquitecta que reformó su casa]

Finalmente Luis Rubiales irá a juicio por un supuesto delito de lesiones a una mujer, más concretamente a la arquitecta que reformó su vivienda. Según informó 'Valencia Plaza' y tal y como puede comprobarse en el auto al que ha tenido acceso El Confidencial, el presidente de la RFEF no podrá evitar sentarse en el banquillo de los acusados después de que la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Valencia haya rechazado el recurso de apelación interpuesto por el abogado de Rubiales, que pretendía que se declarara nula la grabación aportada por la acusación particular pues en ella no interviene quien graba. Sin embargo, el Ministerio Fiscal impugnó el recurso, toda vez que entiende que sí participa. Curioso en alguien como Rubiales acostumbrado a grabar a los demás. Como aquello del cazador cazado, el grabador grabado...

Además, el Ministerio Fiscal entiende que "la existencia de indicios es innegable" y habla de "una denuncia que relata un proceder del investigado que podría ser constitutivo de un delito de lesiones, ya que la perjudicada aporta documentación médica suficiente, existe un parte médico forense y una declaración testifical que corroboran, al menos indiciariamente la denuncia interpuesta". "Nos encontramos ante un incidente del que no se cuestiona su existencia, sino su modo de producción", puede leerse en el auto.

"Es evidente que hay base suficiente para la decisión que se ha tomado por el Juez instructor" y "la implicación es racional por basarse en indicios suficientes de responsabilidad criminal". "En realidad lo que se nos pide es una sentencia anticipada, al que es ajeno a nuestra competencia y al cauce procesal elegido. Hay razones por tanto para que su conducta deba valorarse en el juicio oral", concluye.

Tal y como informó Roberto Ballesteros en su momento en El Confidencial, la denunciante acusó a Rubiales de haberla agarrado, zarandeado y empujado violentamente en una breve e intensa discusión que habrían mantenido en la plaza del Ayuntamiento de Valencia en julio de 2017. El motivo de la discusión habrían sido los 120.000 euros que la arquitecta aseguraba que el entonces presidente de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) y ahora de la RFEF le debía.

placeholder La presidenta del CSD, Irene Lozano, y el presidente de la RFEF, Luis Rubiales, durante la firma de un acuerdo para crear un código de buena conducta. (EFE)
La presidenta del CSD, Irene Lozano, y el presidente de la RFEF, Luis Rubiales, durante la firma de un acuerdo para crear un código de buena conducta. (EFE)

¿Y el Código Ético de la RFEF?

Dicho todo esto, es evidente que será un juez quien dicte sentencia sobre el llamado 'caso arquitecta', aunque de momento la imagen de Luis Rubiales se ve seriamente dañada con el hecho de tener que sentarse en el banquillo de los acusados por un delito penal delicado y grave. Entre tanto, cabe recordar que la RFEF aprobó y anunció el pasado 13 de diciembre "el nuevo Código Ético y el Código de Cumplimiento Normativo, con obligaciones que garantizan la buena gestión de esta entidad y las conductas ejemplares".

En el caso del Código Ético, se especificó que deberá ser cumplido en primer lugar "por los miembros de órganos directivos", entre los que se supone que está la propia RFEF y, a la cabeza de ella, su presidente. Además, se explicó que su incumplimiento podrá ser sancionado con hasta 100.000 euros y la inhabilitación para ejercer actividades relacionadas con el fútbol federado durante 5 años.

Por último, se informaba que la facultada para investigar y juzgar las conductas que pudieran ser inapropiadas será la Sección de Ética del Comité Jurisdiccional, de la que el 16 de enero, es decir, justo un mes después, dimitieron —antes de que les echaran— los vocales Araceli Mangas Martín y José Luis Pérez Triviño y fue destituido su presidente, Manuel Villoria Mendieta. Por si fuera poco, ese mismo día se conoció la dimisión de la vicepresidenta de Integridad de la RFEF, Ana Muñoz, la única que votó a favor de aceptar la dimisión del mencionado Subies la primera vez que este la presentó y que no viajó a Arabia Saudí al no estar de acuerdo con que la Supercopa de España se disputara allí, por razones que también tienen que ver con la integridad.

Es verdad que entre "la prohibición de acoso, falsificación de documentos, abuso de cargo, implicación en apuestas, juegos de azar o actividades similares, cohecho, corrupción y apropiación indebida de fondos, amaño de partidos o competiciones, con sus correspondientes sanciones" no se habla explícitamente de la violencia contra las mujeres, aunque se da por hecho. Sabido es que la presunción de inocencia prevalece hasta que un juez diga lo contrario, pero si el silencio es cómplice, en algunos casos como este también puede resultar atronador.

Si el asunto ya es sensible por tratarse de un presunto caso de violencia contra una mujer, "la consecuencia más extendida de la discriminación de género", según Amnistia Internacional, el hecho de que el acusado y ahora también imputado sea nada menos que el presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF) y vicepresidente de la UEFA lo agrava si cabe aún más. No en vano se trata de un cargo público y de un ámbito tan expuesto como es el fútbol. Sin salir de la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, cabe recordar que Andreu Subies, vicepresidente económico de la RFEF, dimitió en marzo del año pasado tras ser acusado de un presunto desvío de fondos para beneficio propio.

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