El esfuerzo del Atlético y Morata por demostrar su pedigrí rojiblanco

Álvaro Morata nació para jugar en el Atlético de Madrid. O en el Real Madrid. O en el Getafe. O en la Juventus. O en el Chelsea. Qué más da. El caso es que ha pasado por esos equipos y ha vuelto al primero. Y lo ha hecho con el rechazo de parte de la afición rojiblanca (ultras aparte), un rechazo que se esfumará si rompe a meter goles y que permanecerá como una sombra amenazadora si le cuesta marcar.

Guste o no, no son pocos en el Atlético los que ven su etapa madridista como una mancha difícil de limpiar. "Es un hombre que conoce y siente desde niño lo que es el Real Madrid", dijo en agosto de 2016 Florentino Pérez en la presentación de Morata tras dos años en la Juventus. Ese mismo verano, Morata estuvo a punto de fichar por el Atlético, a donde ha llegado ahora cedido por el Chelsea.

Este lunes, el jugador tuiteó una foto suya de niño vestido con el equipaje del Atlético. "Con la ilusión de un niño", escribió Morata. Este martes, durante su presentación, el Atlético proyectó un vídeo con varias imágenes del paso de Morata por el club, desde su carné de abonado en la temporada 1997-1998 a su etapa en la cantera, pasando por una foto junto a Fernando Torres. El vídeo fue colgado en las redes sociales del club y en el canal de YouTube.

"Es la infancia. La auténtica felicidad", dijo Morata tras ver el vídeo con una ligera sonrisa en la cara. "Significa mucho para mí estar hoy aquí. La gente que me conoce y que me quiere lo sabe. Agradezco mucho el vídeo porque ha sido muy bonito y me ha emocionado".

Parece que tanto Morata como el club están haciendo un esfuerzo por demostrar el pedigrí rojiblanco del delantero. No debería ser necesario que un futbolista tuviera que hacer ese trabajo, por mucho que haya jugado (y haya declarado en público su amor) en el máximo rival. Debería bastar con su compromiso a la hora de jugar, algo que se le presupone a cualquier futbolista profesional.

"Bendito problema. Ojalá todos sean que tenga que pensar qué voy a hacer después de marcar un gol", respondió cuando le preguntaron qué hará si marca a Real Madrid y Juventus, dos exequipos y rivales del Atlético en las próximas semanas. "En el momento que llegue esa situación, las cosas saldrán solas", añadió. Las celebraciones son una de esas cosas insignificantes del fútbol a las que algunos le otorgan mucha importancia. Bien haría Morata en celebrar todos los goles que meta, pero no por quedar bien, sino porque le da la gana.