El estallido de Griezmann: de una cláusula con polémica a la tenebrosa sombra del PSG

Este domingo tiene la oportunidad de que los diferentes debates abiertos se cierren por completo. Va camino -si no lo es ya- de ser declarado sin discusión como el mejor jugador de esta Eurocopa. Máximo goleador con 6 dianas, Antoine Griezmann coló a Francia en la gran final con un par de goles ante Alemania, confirmando que ya nos encontramos ante uno de los mejores jugadores del planeta. Por algo el Atlético de Madrid llevaba tiempo tratando de amarrarlo con determinación con un nuevo contrato que espantara a los 'enemigos'. Lo consiguió a medias, porque su plan era otro al que finalmente culminó.

Hace unos días el Atlético de Madrid hacía oficial la prórroga del contrato del futbolista, que firmaba un nuevo compromiso que expira en junio de 2021. Con una sustancial mejora en sus emolumentos, hubo debate entre el jugador y el club a cuenta del precio a reflejar en su cláusula de rescisión. El protagonista y su círculo de confianza se cerraron en banda cuando se les planteó que superara los 100 millones de euros. El club quería elevarla en unos cuantos más, viendo cómo en diferentes lugares millonarios de aquí y allá tienen el suficiente patrimonio como para birlar a la mayoría de estrellas del fútbol mundial.

La libertad del brillante delantero es costosa, sí, pero él sabe de sobra -sus asesores, por supuesto- que en el fútbol actual hay clubes que se pueden plantear seriamente desembolsar esa cantidad de dinero. El primero que aparece en escena, obviamente, es el poderoso PSG. Ha estado durante semanas enredando con Neymar, dato que confirma que está dispuesto a todo para reforzar su ataque con un crack después de la salida de Ibrahimovic, que jugará en el Manchester United a las órdenes de Mourinho. El club parisino tiene euros de sobra como para acometer el fichaje del goleador.

De Gregorio Manzano a David Villa

El club que preside Nasser al Khelaïfi se había fijado como objetivo para este nuevo curso contratar una estrella de brillo planetario. Con Cristiano Ronaldo próximo a renovar su compromiso con el Real Madrid y Neymar descartado tras certificar un nuevo contrato con el Barcelona, Griezmann aparece como el candiadto idóneo para hacer feliz a Unai Emery. Desde hace tiempo el PSG se centra en 'afrancesar' su plantel y en estos momentos el del Atlético es el jugador perfecto para seguir esa senda. El dueño qatarí ya se plantea la operación, más ahora que Antoine es héroe nacional.

Fue en el verano de 2011 cuando el club fijó su mirada en el delantero francés, que ya brillaba en la Real Sociedad. Con Diego Forlán y el Kun Agüero en la rampa de salida, el Atlético de Madrid -en aquel momento el equipo era entrenado por Gregorio Manzano- buscaba a la carrera futbolistas de primer nivel para tapar los boquetes que iban a dejar el uruguayo y el argentino. No hubo manera de alcanzar un acuerdo con la institución donostiarra, vistiéndose finalmente de rojiblanco Radamel Falcao, que ofreció un rendimiento superior en sus dos temporadas en el Vicente Calderón.

Tres años después, tras ganar el título de Liga y caer en la final de la Champions League en Lisboa a manos del Real Madrid, le tocó al Atlético de Madrid buscar recambios para Diego Costa y David Villa, que emigraron a Chelsea y New York City, respectivamente. Para sustituir al primero se eligio al Mandzukic y en cuanto al segundo se tuvo claro que Griezmann era el mejor candidato posible. Con 23 años -ahora tiene 25- había crecido año tras año en San Sebastián. Se estimaba que era un elemento perfecto para que cubriera el hueco que iba a dejar libre el 'Guaje'.

Las dudas de Simeone

Mientras desde la dirección deportiva y la zona ejecutiva se tenía claro el tiro, al que le surgieron las dudas fue al Cholo Simeone. No tuvo nada claro que Griezmann fuera el mejor elemento para reemplazar a Villa y así lo manifestó en la intimidad. Prefería que el club apostara por el fichaje de un delantero con más kilómetros, más rodado, con un punto más de veteranía. Pero esta vez no se salió con la suya y el entrenador argentino cedió ante la dirigencia. El Atlético de Madrid acabó firmando al fino y talentoso futbolista a pesar de que el entrenador no lo tenía muy claro. No lo consiguió en 2011, pero al final la institución pudo hacer realidad el anhelado sueño tres años después.

Le costó lo suyo a Griezmann acoplarse al exigente método instaurado por Simeone en el Atlético de Madrid. Tuvo muchos problemas para asumir ese nivel de exigencia necesario para convencer al estratega argentino y de hecho más de una vez se le vio sentado en el banquillo. Cuando Griezmann entendió que debía involucrarse de verdad en esa cultura del esfuerzo, su crecimiento ha sido imparable. En esta Eurocopa de Francia ha explotado por completo, gracias a que el Cholo, con la inestimable ayuda de algún jugador de rango en la plantilla, le convenció de cuál era el camino correcto para convertirse en una estrella de verdad. Lo que ya es...