La 'nueva' FIFA sí escucha las críticas de Amnistía Internacional sobre Qatar 2022

La FIFA ha respondido públicamente al informe publicado este miércoles por Amnistía Internacional (AI), que volvió a acusar a la federación internacional por su "escandalosa indiferencia" ante las condiciones laborales de los trabajadores que construyen los estadios que acogerán el Mundial 2022.

El máximo organismo del fútbol mundial, presidido desde hace un mes por Gianni Infantino, emitió un comunicado este jueves en el que afirma que es "plenamente consciente" de los riesgos a los que se enfrentan los trabajadores, la mayoría de ellos inmigrantes. La FIFA se defiende afirmando que las condiciones mejoraron en 2014 tras una reforma laboral y que desde 2011 trabaja con todas las partes implicadas, incluida AI, para implantar mejoras en las condiciones laborales lo más rápido posible. El comunicado de la FIFA es un cambio claro en su posición, aunque la celebración del Mundial, como le piden varias organizaciones, no está en duda.

"Escandalosa indiferencia de la FIFA"

La versión del organismo presidido por Infantino contrasta con la de AI, que volvió a alertar este miércoles sobre la explotación laboral de los trabajadores que trabajan en la sedes del Mundial 2022. En su informe "El lado oscuro del deporte rey: Explotación laboral en una sede del Mundial de Catar 2022", AI critica con dureza a la FIFA por su "escandalosa indiferencia ante el pésimo trato de los trabajadores inmigrantes".

La organización de defensa de los derechos humanos señaló que el informe se realizó después de reunirse con 132 inmigrantes que trabajan en la construcción del Estadio Internacional Jalifa, la primera de las sedes que estará finalizada para el Mundial de dentro de seis años. "El abuso sobre los trabajadores es una mancha en la conciencia del fútbol mundial. Para los jugadores y aficionados, un estadio de una Copa del Mundo es un lugar para soñar, pero para algunas de las personas que hablaron con nosotros es una pesadilla", dijo Salil Shetty, secretario general de AI. "Pese a que ya han pasado cinco años de promesas, la FIFA ha fracasado casi completamente en evitar que se vaya a disputar un Mundial en un lugar en el que se han violado los derechos humanos", continuó Shetty.

AI se reunió en Qatar con los trabajadores, la mayoría procedentes de países como Bangladesh, India y Nepal, entre los meses de febrero y mayo del pasado año. Todos los trabajadores inmigrantes denunciaron que viven en condiciones infrahumanas y sin derechos básicos, pues carecen de permisos para entrar o salir del país o para cambiar de empresa o empleador, al tiempo que les han quitado los pasaportes y documentos de identidad y no se les paga lo acordado.

"Viven en condiciones miserables"

"Tienen deudas, viven en condiciones miserables en campamentos en el desierto y les pagan una miseria. La vida de los trabajadores inmigrantes contrasta con las de los futbolistas que jugarán en ese estadio", sostuvo Shetty. "Todos quieren tener derechos: que se les pague a tiempo, poder salir del país si fuera necesario y ser tratados con respeto y dignidad", agregó el secretario general de AI.

La organización pidió a Adidas, Coca-Cola y McDonald's, patrocinadores principales de la FIFA, que presionen al organismo responsable del fútbol mundial para que trate la situación de los trabajadores inmigrantes en el Estadio Jalifa y para que elabore un programa que evite posibles abusos en futuros proyectos de la Copa del Mundo.

"Albergar un Mundial ha ayudado a Qatar a promocionarse como un destino de elite para algunos de los equipos más importantes del mundo. Sin embargo, el mundo del fútbol no puede pasar por alto esta serie de abusos en las instalaciones y estadios donde se jugarán los partidos", remarcó Shetty. "Si el nuevo liderazgo de la FIFA quiere de verdad hacer borrón y cuenta nueva, no puede permitir que un evento de esta magnitud se dispute en un estadio construido por trabajadores inmigrantes que han sido maltratados", concluyó el secretario general de AI.