Roberto Martínez lleva al Wigan a Wembley para seguir haciendo historia

Es su cuarta temporada en el modesto Wigan, y el técnico español Roberto Martínez ya ha hecho historia. Tras la sorprendente y contundente victoria de este sábado en Goodison Park ante el Everton (0-3), el conjunto del Gran Manchester se ha clasificado por primera vez desde su fundación (1932) para unas semifinales de la FA Cup, probablemente el torneo más querido por los aficionados ingleses. Y con el valor añadido de que Martínez y los suyos rendirán visita al templo del fútbol británico, Wembley, que albergará las dos semifinales el fin de semana del 13 y 14 de abril.

Tres goles (uno de ellos de Jordi Gómez) en otros tantos minutos sentenciaron un partido y un resultado absolutamente increíble. Y es que un equipo en zona de descenso, como es el caso del Wigan, se paseó en el estadio de un conjunto que lucha por jugar la temporada que viene en competición europea. Los de David Moyes fueron incapaces de doblegar a los de Martínez, que cuajaron uno de sus mejores partidos, si no el mejor, de la presente temporada.

Pero el idilio de Roberto Martínez con los de Lancashire viene ya de su época como futbolista. El ahora entrenador llegó a Wigan en el año 1995 junto a otros dos españoles, Jesús Seba e Isidro Díaz (compañeros en el Real Zaragoza), y dejó una huella muy profunda en sus seis temporadas allí. No obstante, y para que tengamos en cuenta de la dimensión que Martínez adquirió en esta pequeña localidad del centro de Inglaterra, en 2005 fue elegido por los socios como el mejor jugador de la historia del club, algo que lógicamente variaría si la votación se realizara ahora, y es que el español tan sólo jugó en la Third y en la Second Division. Pero ahí queda el dato.

Tras una primera toma de contacto con los banquillos en el Swansea (2007-2009), tan de moda ahora y que también fue españolizado entonces, Roberto Martínez recaló en el Wigan como consecuencia de su buen rendimiento en tierras galesas. Con uno de los presupuestos más bajos de la Premier, el entrenador de Balaguer ha logrado la permanencia en las tres campañas al frente de los del DW Stadium. En ésta, el sufrimiento va a ser la nota predominante en el objetivo de seguir en la élite del fútbol inglés. El Wigan es decimoctavo, a un puesto y tres puntos de una salvación que en estos momentos marca el histórico Aston Villa.

Momento para el recuerdo

Pero al margen de que la tónica en la competición liguera vaya a ser de cierta angustia, los aficionados del Wigan ya tienen un motivo más para ensalzar y encumbrar a ese 'españolito' que llegó a mediados de la década de los noventa para hacerse un hueco en la historia de este modesto club.

Los ‘latics’ acudirán a la cita de Wembley sacando pecho, orgullosos de un equipo casi desconocido una década atrás y que ahora se codea con los más grandes del país. Allí estará el Manchester City (se deshizo cómodamente del Barnsley) y hoy se certificará el pase de los otros dos semifinalistas en los duelos que miden a United y Chelsea y a Millwall y Blackburn Rovers.

Aunque no sea un título, esto puede ser considerado, sin duda, como un éxito más de la diáspora española en Inglaterra. Y Roberto Martínez ejemplifica que, desde la sombra y sin hacer mucho ruido, también se puede triunfar en esto del fútbol. Y tiene 39 años, por lo que se le augura una larga carrera en esto de los banquillos. ¿Quizá en un equipo de mayores prestaciones? Como diría un inglés, ‘keep calm’ (mantener la calma).