Desconfianza alrededor del intento de Mario Conde por comprar el Zaragoza

Mario Conde está intentando de nuevo acceder al mundo del fútbol a través de la compra del Real Zaragoza. Junto con su socio, Luis Oliver, ya experimentado en este negocio, el ex banquero gallego busca estos días adquirir las acciones de Agapito Iglesias, actual propietario del club aragonés, en un movimiento que ha levantado cierta desconfianza dentro del fútbol español.

Este negocio es una gran familia donde todo se termina sabiendo, por lo que la noticia publicada ayer no ha sorprendido a muchos de los integrantes del negocio futbolístico. Fuentes anónimas de este sector, aseguraron a El Confidencial que hace poco Conde y Oliver estuvieron tanteando a la familia Ruiz-Mateos para hacerse con el Rayo Vallecano, después de haber errado meses atrás en la compra de gran parte de las acciones del Real Betis que pertenecían a Manuel Ruiz de Lopera.

En el entorno del club maño se cree que los dos pretendientes quieren beneficiarse de la más que posible entrada de la entidad en la Ley Concursal una vez que Agapito abandone el poder. El actual dueño tiene nexo directo con el Gobierno de Aragón, poseedor de parte del accionariado, y depende de los avales depositados en Ibercaja. Esta es la principal razón por la que, a pesar de la mala situación económica, el Zaragoza todavía no se haya acogido al proceso de concurso de acreedores previsto en la citada ley, ya que la Administración autonómica no quiere verse en ese proceso. Si Ibercaja da el ok, Oliver y Conde tendrán todo a favor para hacerse con el club de La Romareda y Agapito será historia.

Con la concursal, la deuda se hará asumible

La ley ampara a todas las sociedades que entren en lo que siempre se llamó suspensión de pagos. Si el Zaragoza entra en la Ley Concursal, su deuda pasará a ser gestionada por un juez, quien valorará los recursos del club desde donde afrontar los pagos así como la prioridad de los mismos. En definitiva, en un proceso concursal la deuda acaba por ser menor y bastante más asumible para aquellos que estén al frente de la nave.

Es ese oportunismo el que quieren tener Conde y Oliver. Lo intentaron con el Betis en situación similar a la del Zaragoza, aunque el proceso de venta que había emprendido Lopera estaba ya judicializado y finalmente la juez que llevaba el caso anuló la compra de las acciones que Conde y Oliver habían acordado con quien fue durante dos décadas presidente del Betis.

Después de no decidirse por el Rayo, cuya deuda reconocida es de unos 25 millones de euros, cuatro veces menor que la actual del conjunto maño, Mario Conde trabaja en la sombra para conseguir al fin su salto al mundo del fútbol, que mientras  le mira con cierto recelo. El tiempo demostrará qué tipo de inversión en el Zaragoza se han planteado ahora el ex presidente de Banesto y Luis Oliver.

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