Mourinho crea corriente de opinión y maneja los tiempos de los medios

José Mourinho se ha convertido en un auténtico creador de corriente de opinión. No hay rueda de prensa del portugués que no sea acompañada de debates durante días y días. El técnico llegó al Real Madrid el pasado verano, reunió a sus ayudantes y a todas las personas que trabajan alrededor del primer equipo y les dijo que aquí el único que hablaba era él y que todas las decisiones relacionadas con el equipo y su entorno eran cosa suya. ¿Recuerdan la frase de que todo es por culpa del cabrón de Mourinho? Sí, la dijo ese día, tal y como informamos en El Confidencial. A los jugadores les comentó que asumía toda la presión, que ellos se olvidaran y que a partir de ahora iba a aparecer en muchas menos ocasiones ante la prensa. Y lo cierto es que el plan le ha salido a la perfección. En el Real Madrid los jugadores se han convertido en seres transparentes, éstos lo agradecen, y la única voz autorizada es la del técnico.
 
Mourinho marca los tiempos de lo que se habla y cuándo se habla. Y hay que reconocer que, maneras al margen, está consiguiendo lo que quería. Inició sus argumentos hablando de lo mucho que corrían los equipos ante el Real Madrid y lo poco que lo hacen ante otros equipos. Después pasó a hablar de los árbitros, papel en mano, y todos a hablar de los aciertos y errores de los colegiados. Su siguiente tema en poner sobre la mesa fue el de la permisividad arbitral ante la dureza que sufría Cristiano Ronaldo, lo que originó que se comparara al ex del Manchester United con Messi, logrando de paso enfrentar a la prensa madrileña con la catalana..
 
El tema estrella, sin duda, ha sido el de los horarios televisivos y el beneficio que obtiene el Barcelona respecto al equipo que entrena y dirige. El portugués, que no da una sin intención, ha conseguido que un periódico le dedique cuatro páginas al asunto, que otro le dé dos y que programas de radio y televisión entraran a debatir sobre la importancia del descanso del deportista atendiendo a cuestiones físicas y médicas. Cierto. Lo que más sorprende de este asunto es que Mourinho se ha atrevido a morder la mano que da de comer al Real Madrid, aportando más del 25% del presupuesto.
 
Hablamos de Jaume Roures, presidente de Mediapro y principal culpable de los horarios de los partidos de Liga, marcados por el interés televisivo. Lo curioso ha sido la reacción del aludido Roures, entrando a calificar las elecciones técnicas del portugués al dejar en el banquillo a Di María. Nuevo éxito de Mourinho o es que dudan de que al final consigue lo que quiere. Sardá, presentador de éxito pasado, también entró al trapo, descalificando la manera de actuar del entrenador.

Las quejas de Mou no tienen respuesta

A los dirigentes de la entidad madridista no le gusta en demasía la continua queja en la que vive instalado Mourinho, pero no quieren decir nada. Guardan silencio. Valoran más la tranquilidad interna, que las consecuencias de los debates. Otra cosa será a final de temporada. No duden que a mayores éxitos, menor importancia de los charcos en los que se mete cada semana el responsable técnico de la plantilla madridista.
 
El último punto del análisis al comportamiento de Mourinho tiene que ver con los medios de comunicación. Y es que el técnico está demostrando tener más capacidad creativa que la prensa, que asiste impávida al transcurrir de los temas que el portugués coloca como asuntos de debate, sin mas actuación que el simple acompañamiento. Pasan los meses y Mourinho consigue marcar el devenir de toda la información que genera el Real Madrid, lo que buscaba a su llegada al Bernabéu el pasado verano. Algún día se hablará de fútbol. Cuando quiera el técnico del club blanco. No lo duden.

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