A Benítez le recomiendan unos meses en el paro

Es uno de los entrenadores con mejor cartel internacional y por eso, desde que salió del Inter de Milán en vísperas de Navidad, varios son los equipos importantes que han comenzado a sondearle. Sin embargo, últimamente a Rafa Benítez le han aconsejado que espere, que esté tranquilo. Es decir, le han recomendado unos cuantos meses en el paro.

Son las personas que le rodean y que se preocupan de guiar su carrera quienes creen que esta opción es la mejor. Está claro que el entrenador madrileño tiene siempre la última palabra, pero también él es consciente de que el siguiente paso que dé tiene que ser lo más fiable posible, después de que su imagen se desvirtuase durante la última etapa en el Liverpool y de que su labor en el Inter pusiera sus métodos en entredicho.

Precisamente para evitar una mala elección que devalúe definitivamente su caché, estas voces le han pedido que no acepte, de momento, ninguna oferta. En la Premier League se rifan a Benítez, y equipos como el Manchester City y el Chelsea se han acercado al entorno del entrenador español para indagar sobre su disponibilidad y sus pretensiones, tal y como han asegurado fuentes de total fiabilidad a El Confidencial.

Pero de los intereses de Rafa Benítez se encargan varias personas. La principal es Manolo Quilón, su representante, que fue quien apostó por él desde el inicio de su carrera y quien le ha proporcionado los mejores contratos. El técnico siempre ha hecho caso de sus consejos y es una de las personas que ahora más trabajan para determinar su futuro a corto, medio y largo plazo.

Quieren que regrese a su esencia ganadora

En este tipo de operaciones millonarias, intervienen siempre otros intermediarios que aconsejan a los protagonistas. Por ejemplo, en el caso de Benítez destaca la figura del abogado inglés Colin Pomford, quien le lleva varios asuntos en las islas.

Dentro de esta nebulosa consejera que rodea al ganador de la ‘Champions’ de 2005, destaca la citada recomendación de que aproveche unos meses para descansar. Según esta idea, Benítez debe oxigenarse mentalmente con el objetivo de volver a la esencia de sus años ganadores en el Valencia y de los tres primeros que pasó en Liverpool, antes de que comenzara la crisis institucional y de resultados que sufre todavía la institución red.

Los que así opinan afirman que, igual que un deportista puede llegar al agotamiento físico por un sobre-entrenamiento, un entrenador puede alcanzar el agotamiento mental después de muchos años seguidos entrenando sin descanso. Y en su última experiencia en el Inter, aunque duró pocos meses y conquistó dos títulos (Supercopa de Italia y Mundial de Clubes), el desgaste fue muy alto.

En el equipo nerazzurro Benítez entró con mal pie a un vestuario que lo había ganado todo. El jueves de la semana pasada, uno de los capitanes del equipo milanés, Marco Materazzi, criticó la labor de su ex entrenador, dejando entrever que era demasiado estricto con una plantilla ya formada, ganadora y acostumbrada a funcionar de una determinada manera. El polémico defensa afirmó que el técnico español era “un guardia de tráfico con un Fórmula 1. Si somos un coche necesitamos un piloto, no un policía. Somos campeones del mundo y queremos crecer, no debilitarnos”.

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