Más de 39.000 aficionados con entrada y sin partido

Más de 39.000 personas, entre aficionados del Atlético de Madrid con el abono total y 500 seguidores del PSV Eindhoven que ya habían adquirido su entrada, se quedarán sin presenciar el partido de Liga de Campeones entre ambos equipos en el estadio Vicente Calderón por la sanción de la UEFA. El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) confirmó este jueves que ese encuentro, que se disputa el próximo 26 de noviembre, se jugará a puerta cerrada en el campo rojiblanco, por lo que no se permitirá la entrada de público al estadio por el castigo impuesto por la UEFA tras el pasado duelo entre el Atlético y el Olympique de Marsella.

Esa decisión del Comité de Apelación del organismo europeo dejará sin público ese choque, con lo que 39.143 aficionados con abono total, que da derecho a presenciar todos los partidos como local del Atlético en Copa del Rey y competición europea esta temporada, más 500 seguidores del PSV Eindhoven, no podrán presenciar el encuentro en el Vicente Calderón, aunque tenían entrada para ese partido.

La devolución de una parte del abono total, de momento, no está contemplada por el club, ya que el partido se disputará a puerta cerrada por una causa de fuerza mayor y ajena al Atlético de Madrid y porque los abonos totales incluyen un paquete de encuentros de Copa del Rey, Liga de Campeones o Copa de la UEFA, si es eliminado del máximo torneo europeo, por lo que el importe de un partido solo únicamente se podría valorar al final de la campaña.

Enrique Cerezo, presidente del Atlético, manifestó que el último recurso que le queda al club es "ganar bien a los holandeses y clasificarse para los octavos de final". "Sentimos mucha decepción por la resolución del TAS. Seguimos pensando que la sanción es injusta. El Atlético de Madrid y sus aficionados no tuvieron nada que ver en los incidentes en el encuentro ante el Olympique de Marsella. No hubo racismo ni xenofobia en ese encuentro", dijo, contundente, el presidente rojiblanco. Para Cerezo, no hay otro remedio que aceptar la sanción y "pasar página". "Ya no nos queda ninguna posibilidad de recurso, sólo el ganar bien al PSV y pasar a octavos de final sin tener que jugarnos el pase en el último partido en Marsella".

El TAS mantiene la sanción de un partido a puerta cerrada y rebaja la multa a 75.000 euros

El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) ha decidido mantener la sanción impuesta por la UEFA al Atlético de Madrid de jugar a puerta cerrada el encuentro ante el PSV Eindhoven de la Liga de Campeones del próximo miércoles por los incidentes acaecidos en el partido frente al Olympique de Marsella. En la resolución hecha pública después del mediodía, el TAS reduce la multa de 150.000 a 75.000 euros y le libera de pagar las costas ante la UEFA. El Tribunal estima, "en línea con la UEFA", que el Atlético "cometió varias infracciones graves de seguridad durante el partido contra el Olympique de Marsella, que permitieron que ocurrieran los incidentes del estadio Vicente Calderón". "La situación del club empeora debido a hechos del pasado reciente, lo que ha llevado al Panel (de jueces) a mantener la sanción de jugar el partido del 26 de noviembre a puerta cerrada", señala el fallo.

"Sin embargo", añade, "el segundo partido a puerta cerrada, que estaba en suspenso, se revoca y la multa se reduce a la mitad, en vista de que los actos racistas que alega la UEFA no han podido ser establecidos con certeza". El TAS anuncia que los fundamentos de su resolución se harán públicos en próximos días. La apelación del Atlético contra las sanciones que le impuso la UEFA ha sido analizada "con urgencia" por un panel presidido por el suizo Olivier Carrard y del que también formaban parte el español José Juan Pinto -árbitro elegido por el club madrileño- y el italiano Luigi Fumagalli. El Atlético presentó el 4 de noviembre un recurso ante el TAS en el que pedía la anulación de la sanción impuesta por el Comité de Apelación de la UEFA, dos encuentros a puerta cerrada (el segundo en suspenso sujeto a un periodo de prueba de dos años) y una multa de 150.000 euros por los incidentes en el partido ante el Marsella.

La vista duró siete horas

Apelación ya había reducido en su día la sanción original del Comité de Control y Disciplina de la UEFA de dos partidos de clausura del estadio, que debían jugarse a un mínimo de 300 kilómetros de Madrid, más un tercero condicionado a que no se repitieran incidentes, la correspondiente multa y dos encuentros de suspensión al técnico mexicano Javier Aguirre por insultos a un jugador del conjunto marsellés, medida esta última que el Atlético no consiguió evitar.