Candanchú: diez cosas que debes saber para disfrutar de la estación española más antigua

Es un clásico dentro de los clásicos. En pleno Pirineo oscense y pegadita a la estación de Astún, Candanchú se convierte en destino de miles de aficionados a la nieve cada temporada. Una estación que tiene más de ochenta años de historia, ya que se inauguró en 1928 y fue la primera de España, algo que se nota en los remontes, excesivamente lentos y que se han quedado obsoletos. Una de las pocas cosas que chirrían en un dominio que tiene de todo y para todos... y donde casi todo es bueno.

Porque Candanchú está dividida en seis áreas y tiene un total de 50 kilómetros esquiables repartidos entre 51 pistas. Hay casi tantas verdes y azules como rojas y negras (10, 12, 19 y 12 respectivamente), lo que significa que es una estación abierta a todo tipo de esquiador. Los novatos tienen uno de lasmejores áreas de aprendizaje de todo el país, mientras los más expertos disponen de palas por las que hacer unas bajadas que quitan el sentido.

Ahí van las diez cosas que debes saber si quieres que tu día de nieve sea perfecto.

1. ¿Es fácil llegar aCandanchú? ¿Hay problemas de aparcamiento?

Llegar a la estación es sencillo, ya que Candanchú está situado a menos de 30 kilómetros de Jaca, por la N-330, justo antes de la frontera con Francia por el Puerto de Somport. Hay que tener en cuenta que los días de diario no hay problema de aparcamiento, pero los fines de semana se llena, así que es conveniente llegar antes de las 9.30. Además, el trayecto desde Jaca los sábados y domingos te puede llevar más de una hora si no madrugas, en vez de los 25 minutos habituales. Y, cuidado: hay una curva de 180 grados poco antes de llegar a la estación, a la altura de Rioseta, que suele tener placas de hielo por las mañanas, lo que la convierte en muy peligrosa.

2. ¿Dónde compro el forfait más barato?

Si quieres ahorrarte unos euros respecto al precio de los forfaits en la estación, cómpralos en tixalia.com. Los venden al precio de temporada baja aunque sea para fin de semana (temporada alta). Hay que imprimir un bono y presentarlo en taquilla. Además, Ibercaja ha vuelto a sacar su tarjeta Astún-Candanchú con la que tienes un ahorro importante. Lo mejor es que funciona como un bono de temporada, pero se cobra cada día que se usa: 32 € el fin de semana y 27,75 los días de diario, hasta llegar al tope de 610 euros. A partir de ahí, gratis. Y lo mejor de todo: no tienes que adelantar el dinero del forfait de temporada... y esquías indistintamente en Astún, Candanchú... o en las dos estaciones el mismo día.

3. ¿Dónde alquilo mi equipo?

Si eres de los que no compras tu material, sino que prefieres alquilarlo, en Candanchú tienes varias opciones. Lo más cómodo es hacerlo en el 'Kiosko de Pista Grande', ya que dejas tus zapatos y sales esquiando. El precio de un equipo completo de gama media-baja es de 38 euros por dos días. En Deportes Galindo te ahorras unos euros, ya que cobran 35 euros también por dos días, pero está un poco más alejado. Consejo: evitar la tienda de Sport Pirineos, en los bajos del Hotel Edelweiss: no sólo se quedan con tu DNI a modo de fianza (algo, a priori, ilegal), sino que son más caros y bastante poco agradables.

4. ¿Cuál es la mejor pista para los novatos?

Candanchú tiene una de los mejores zonas para debutantes, justo al lado de la base de la estación. Es la zona de Pista Grande, donde se agrupan todas las pistas verdes disponibles. Cada una tiene su percha para volver al principio y puedes aprender durante todo el día sin tener que perder el tiempo cogiendo sillas.

5. ¿Cuál es la mejor pista de la estación?

Como canta el grupo 'Un pingüino en mi ascensor', “en la variedad está la diversión”. Cada esquiador tiene sus propias pistas fetiche, pero hay varias que se repiten cuando preguntas a los habituales de la estación. Aludes y Carabineros se llevan la mayoría de los votos. La primera es una pista roja, la situada más a la izquierda de la estación, en la Zona Tuca. La segunda, una negra que recorre media estación, desde esa misma zona hasta la base, pasando por la Rinconada, durante casi dos kilómetros. También merece la pena lanzarse por otra negra, la Quebrantahuesos, mientras los que aún no tengan el nivel de expertos disfrutarán bajando la pista Rey Juan Carlos, una azul que va desde la Zapatilla, a más de 2.200 metros, hasta la Zona Tuca.

6. ¿Y si queremos hacer un fuera-pista?

Sin duda, el más famoso es la Loma Verde, un paraje excepcional que ha hecho que Candanchú sea conocido por media Europa. El problema es que muchos esquiadores, atraídos por su fama, se meten por esa zona sin conocerla bien y no son conscientes de los peligros a los que se exponen y que se pueden ver claramente desde la silla de Tortiellas. Mucho cuidado, no es nada sencillo. Otra zona que atrae a muchos aficionados es el Tubo de la Zapatilla, mientras otros apuntan a la zona de Pinos como la mejor zona fuera de las rutas marcadas.

7. ¿Es segura la estación de Candanchú?

Todo aquel que practica el esquí sabe que éste es un deporte no exento de riesgos, en el que debes estar pendiente de ti, pero también de los que te rodean. Sin embargo, aquí encontramos uno de los pocos puntos negros de Candanchú: la recogida en pistas de un accidentado. Al contrario que en otras estaciones, aquí se encarga un sólo 'pister' de recogerte, colocarte en la camilla y bajarte a la base, lo que provoca que se dé algún caso como el de hace unas semanas, en el que una camilla se separó de su 'pister'tras otro accidente y bajó cientos de metros en caída libre mientras los gritos aterrorizados de la chica accidentada se podían oír por toda la estación. Gracias a un auténtico milagro, todo quedó en un susto.

8. ¿Qué podemos hacer si sale un día malo y no podemos esquiar?

Todo el Valle del Aragón es precioso para disfrutar de sus paisajes y sus gentes. Sin embargo, si no hace día de esquí es posible que tampoco apetezca darse un paseo a cielo abierto, por lo que proponemos alguna alternativa. Una visita a Canfranc es imprescindible y, una vez allí, hay que acercarse a la vieja estación de tren, un maravilloso edificio de 1928 construido para exaltar la imagen de España ante los extranjeros que llegaban a nuestro país. También en Canfranc merece la pena el Centro 'A Lurte', que en aragonés significa 'el alud': se ha convertido en referencia internacional en el estudio de la nieve y los aludes y cuenta con una exposición permanente.

9. ¿Dónde nos alojamos en Candanchú?

La urbanización en la que está situada la estación permite dormir a pie de pistas y acudir andando hasta los propios remontes. Las mejores opciones son las del Hotel Candanchú, muy recomendado por los aficionados por su ubicación y su buen trato, y el hotel Edelweiss, también en primera línea. Un poco más alejados, en Canfranc, hay dos buenos hoteles: Santa Cristina y Villa Anayet, aunque si buscamos una opción económica, la respuesta la encontramos en los albergues cercanos a la estación: Albergue Aysa, Albergue El Águila, Albergue Valle del Aragón y el Refugio Pepe Garcés.

10. Y el sitio perfecto para tapear y cenar es...

La urbanización de Candanchú es relativamente pequeña, por lo que no abundan las opciones para salir después de esquiar. Hay un centro comercial con varias opciones, pero lo mejor está en el Estanés o La chimenea. Si lo que quieres es tomar unas raciones, el sitio es el Pikoteo, especialista en huevos rotos y con un precio ajustado, al igual que El Chalet, donde comes bien y no pagas mucho si no te pasas con el vino. Saliendo hacia Canfranc está Santa Cristina, de excelente calidad-precio y donde más opciones hay es en Jaca, la localidad de referencia en el valle y que ya descubrimos en el reportaje sobre Astún.