España se acerca a cuartos de final al ritmo que marca un excelso Calderón

Nos jugaremos los cuartos de final ante un incómodo y rocoso rival, Italia. Será el lunes a partir de las 17:45 horas en el Stozice Arena. Antes, en el mismo escenario, España barrió de la pista a una voluntariosa Finlandia, a la que se le han acabado las fuerzas y que se despide de este Eurobasket como una de las grandes sensaciones. En esta ocasión, el combinado de Juan Antonio Orenga no dio ni una sola opción a la sorpresa y, de la mano de un fabulosoJosé Manuel Calderón, se anotó una balsámica victoria que le mantiene en la pelea. A diferencia del pasado jueves, en esta ocasión el equipo español sí estuvo a la altura de las circunstancias y demostró su potencial para seguir en la brecha. Tomó consciencia de que era una final, y así lo demostró a lo largo de los 40 minutos que duró el encuentro.

Koponen contra todos. Así podrían resumirse los primeros compases del partido. El base finlandés capitalizó el aspecto ofensivo de su equipo con los nueve primeros puntos del encuentro. Ni Ricky Rubio ni ‘Calde’ eran capaces de frenar al jugador del Khimki, aunque afortunadamente para la selección española, el base extremeño estaba de dulce en el apartado de ataque. A cada triple y acción del equipo escandinavo, el base de los Dallas Mavericks daba la contrarréplica, muy bien acompañado por un Víctor Claver que parece estar cogiendo el hilo a la competición a medida que ésta se aproxima al momento decisivo. Dos lunares tuvo el equipo de Orenga en los diez primeros minutos de este decisivo encuentro: el rebote defensivo y las pérdidas en ataque. Los españoles se mostraban muy débiles en su zona, originando segundas opciones de tiro para su adversario, y perdían demasiados balones (un total de siete en este período). Aun así, España mandaba en el marcador; eso sí, con diferencias muy cortas (18-15).

La igualdad siguió siendo la nota predominante con la segunda unidad de Orenga en pista. Había que dar descanso a los Marc, Rudy y compañía. Ahí entraron en juego San Emeterio y Germán Gabriel, que mantuvieron el tipo hasta que España vio un resquicio para despegarse en el marcador. Tras casi quince minutos sin poder correr y realizar nuestro mejor juego, salió esa Selección que nos enamora y que nos ha colmado de éxito. Fueron suficientes cinco minutos de delicatesen para abrir una brecha importantísima y reconfortante a nuestro favor. Un tremendo parcial de 16-4 ponía de manifiesto la necesidad de victoria por parte de los nuestros y su teórica superioridad. Había desaparecido Koponen y los que mandaban en el partido eran Calderón y Claver. El primero, en esa extraña alternancia en las posiciones de ‘1’ y de ‘2’, se había adueñado del partido y se jugaba al ritmo que él marcaba, mientras que el jugador de Portland anotaba un nuevo triple para poner el broche de oro a un gran segundo cuarto (42-30).

Y Finlandia bajó los brazos

Era necesaria mantener la misma intensidad, tanto en defensa como en ataque, para evitar sorpresas que desgraciadamente ya ha vivido la Selección en este Eurobasket. Y la lección parece estar bien aprendida, al menos así lo fue en esta confrontación con Finlandia. Los chicos de Orenga ya han recibido suficientes críticas y no quieren más. Como decíamos en la previa, los escandinavos podían pagar los platos rotos de la derrota ante Grecia, y así fue. España metió una marcha más al partido, y por mucho que los de Henrik Dettmann causaron una gran sensación en la primera fase del campeonato, jugar contra una enchufada campeona de Europa es misión imposible para ellos. La diferencia seguía creciendo de una manera vertiginosa, lo que provocó que el técnico finlandés tuviera que parar el vendaval de la ÑBA. La diferencia era diecisiete arriba para España, y el partido y la continuidad en el campeonato se le escapaban a los finlandeses. Tiempo muerto al canto.

Nada nuevo bajo el sol tras ese intento de Dettmann por parar el ritmo de los nuestros. Orenga parecía haberles puesto las pilas, y este equipo concentrado es casi imparable. Ésta es la España que demandamos y que queremos ver cada partido, aunque somos conscientes que no es fácil dar el máximo nivel en todos los encuentros. Sólo así mantendremos vivo el sueño. Algunos intercambios de canastas en el momento en que la Selección dio descanso a sus primeros espadas, pero todo estaba bajo control. La diferencia seguía moviéndose por encima de la llamada barrera psicológica de los diez puntos. Todo iba por buen camino.

Y para que nada se pudiera complicar, ahí estaba Calderón, que dijo “aquí estoy yo”. El base cuajó su mejor partido en este Eurobasket. Le echábamos de menos y, en un momento importante para su equipo, tomó la responsabilidad. Anotó, dirigió, robó… Hizo de todo, y eso lo notó el equipo. Esta vez jugó más minutos en la posición de ‘play maker’ y el equipo lo agradeció. Se encontraba cómodo, estaba de dulce y veía el aro contrario como una auténtica piscina (acabó con 23 puntos). Todo visto para sentencia, un triunfo más en el casillero de España y, lo dicho, ahora toca una batalla de las de órdago ante el combinado que dirige Simone Pianigiani. Desde luego, un partido no apto para cardíacos.

Ficha técnica:

82 - España (18+24+15+25): Rudy (6), Calderón (23), Ricky (4), Claver (12) y Gasol (6) -equipo inicial-, Rodríguez (9), Rey (6), Claver (12), San Emeterio (6) y Mumbrú (8).

56 - Finlandia (15+15+14+12): Huff, Lee (12), Salin, Kotti (6) y Koponen (17) -equipo inicial-, Koivisto (5), Muurinen (4), Haanpaa (6), Ahonen y Rannikko (6).

Árbitros: Olegs Latisevs (LET), Milivoje Jovcic (SRB) y Renaud Geller (BEL). Sin eliminados.

Incidencias: Partido correspondiente a la segunda jornada del grupo F de la segunda fase del Europeo 2013 disputado en el Stozice Arena de Liubliana ante 3.070 espectadores. Sergio Llull no jugó el partido como prevención por un golpe que sufre en la parrilla costa derecha.