El Madrid arrolla al Barça y tendrá el primer 'match point' el domingo (81-66)

La final de la Liga Endesa viajó a Madrid, al Wizink Center, para determinar qué equipo tendrá el primer 'match point' el domingo. Las tablas estaban presentes en el marcador, pero el Real Madrid desniveló la eliminatoria. La actuación de Edy Tavares fue fundamental para que los culés/blancos hayan tomado ventaja.

Este inicio de encuentro, a diferencia del último precedente de la serie, fue diferente. El Barcelona empezó con más intensidad y le aguantó el pulso a un Madrid, que aún no sabía cómo se le escapó la victoria el miércoles en la Ciudad Condal. La efectividad, sin embargo, no predominó en los primeros compases. De hecho, Tavares falló sus dos primeros tiros libres. Y el 0-0 se mantuvo durante tres minutos en el marcador.

Los fallos en los tiros de campo justificaron el mal inicio de ambos. Hubo voluntad, pero no acierto. Uno de siete del Barça y uno de cuatro del Madrid. En esos instantes, hubo un doble tapón a Cory Higgins, primero de Ádám Hanga y luego de Tavares.

Los cánticos a Pablo Laso

La afición del Madrid no les falló a los suyos, especialmente a su entrenador, Pablo Laso. Tras el infarto que sufrió, el técnico sigue la final desde su casa. Y los fans le cantaron varias veces en señal de agradecimiento por la década que lleva al frente del club.

El Madrid estaba mejor, con una corta ventaja que Nikola Mirotic igualó gracias a un triple. El hispano-montenegrino fue, de nuevo, uno de los jugadores más decisivos del Barcelona. Nunca está de más tener al mejor de Europa en tu equipo. En el Wizink seguro que recordaron que ese coraje y esa audacia estuvieron, no hace mucho, al servicio de los blancos.

Los últimos minutos del Madrid en el primer cuarto fueron sensacionales. Tanto que lo finalizaron con una ventaja de cinco puntos. Esta derrota momentánea del Barça tal vez estuviera justificada en el escaso acierto desde la línea de 6’75 (tan solo dos de siete en triples). Acostumbrado a ser efectivos desde esa distancia, los culés entraron mejor por el perímetro.

El recuerdo del partido anterior

El esfuerzo realizado por el Barça en el partido anterior no lo olvidaron los hombres de Jasikevicius. En la Ciudad Condal tuvieron que remar mucho para empatar la eliminatoria. En el segundo cuarto, salieron con la misma intención. Gracias a dos triples consecutivos de Kyle Kuric se colocaron a un punto.

La ventaja del Madrid al descanso (45-39) llegó a raíz de una falta de Sertaç Sanli, que el colegiado consideró antideportiva. A esa desafortunada acción, le siguió una pérdida del Barça que permitió que los blancos se colocaron ocho puntos por encima. Estaban groguis los culés.

El dominio blanco, manifestado con la captura de los rebotes en ataque y los robos al rival, irritó a Jasikevicius. El técnico culé, antes de entrar en vestuarios, declaró: "Hemos sufrido mucho. Si cambiamos, podremos estar en el partido. Si no, estamos perdidos".

Las declaraciones fueron sinceras y razonables. Su equipo no jugó bien y, por mucha intención que puso, siempre estuvo un peldaño por debajo del Madrid. Los blancos, por su parte, se aferraron al buen momento de forma de Edy Tavares, imparable tanto en ataque como en defensa.

Madrid está de fiesta porque el domingo quizá tengan celebración en su propia casa. Seguro que aún no se han olvidado del festejo de hace tres semanas por la consecución de la Champions. Ahora, quizá tendrán una nueva oportunidad de celebrar. Qué mejor manera para hacer feliz a Pablo Laso que regalándole el triunfo el domingo.