Ni Madrid ni Barça necesitan dar el 100% para jugar su quinta final en seis años

El clásico es más clásico en la Copa del Rey. Por segundo año consecutivo, por quinta vez en los últimos seis años, Real Madrid y Barcelona, se verán las caras en la final. En el torneo en el que puede ganar cualquiera (o eso es lo que dice todo el mundo), han ganado los de casi siempre. La igualdad que se había visto en la primera parte de la Liga no ha viajado a Gran Canaria, y el Felipe VI debutará en el palco de su torneo con la final esperada.

De los dos, quizá el que más ha sufrido ha sido el Barcelona, pero tampoco ha lllegado al último minuto de sus dos partidos con el marcador igualado. El Madrid tampoco tuvo que cerrar sus encuentros en el tramo final, pues ya lo había hecho antes, concretamente en los dos terceros cuartos. Pero sí se nota que ni uno ni otro han desplegado todo su potencial durante 40 minutos seguidos, ya sea porque no lo han necesitado o porque no han podido. En el caso del Madrid, sus dos primeras partes son un buen indicador.

"Debemos jugar muy serios desde el principio, porque si lo hacemos como hoy, el Barcelona nos ganará por 20", afirmó Sergio Llull en la rueda de prensa posterior a la victoria contra el FIATC Joventut. "Si queremos ganar, tenemos que estar como en las dos segundas partes de los partidos (...) Tenemos que salir con esa mentalidad. Contra un equipo como el Barça no podemos salir como hemos salido en estos dos partidos porque si no la final se nos puede ir", comentó Felipe Reyes. Los jugadores del Madrid son conscientes de que a los azulgrana no se les puede dar 20 minutos de ventaja.

En el caso del Barça, fue su propio entrenador, Xavi Pascual, el que midió el bajón de su equipo en la semifinal contra Unicaja. “La verdad es que no estoy demasiado satisfecho, porque hemos estado por debajo del 70% de nuestro potencial, sobre todo en la primera parte, donde no hemos tenido el juego que venimos desplegando en las últimas jornadas", afirmó el técnico culé. A pesar de eso, su equipo ganó al líder de la Liga. Y lo hizo de una manera menos dramática que hace poco más de un mes en la Liga Endesa, cuando tuvo que forzar la prórroga con un triple sobre la bocina de Abrines. El Barcelona tiró de banquillo para solventar la papeleta en el su peor momento: seis abajo en el último cuarto.

“La aportación final de Mario (Hezonja) y Maciej (Lampe) ha sido importantísima para el desenlace. Han jugado muy bien. Ahora hay que pensar en la final y tener continuidad durante los 40 minutos”, explicó Pascual.

El de esta tarde será el cuarto enfrentamiento de la temporada entre los dos equipos. Y todos han acabado con victoria clara para alguno de los dos equipos. El primero, aún en pretemporada, lo ganó el Madrid por 99-78 en la final de la Supercopa. El segundo, en la Liga Endesa, cayó del lado azulgrana por 76-68. Y el tercero, hace 17 días en el Top 16 de la Euroliga, lo volvió a ganar el Madrid por 97-73. "No todos los partidos son iguales, este será un partido totalmente diferente a los que hemos tenido en los últimos meses", advierte Gustavo Ayón. Puede que el desarrollo sea distinto, pero el desenlace será similar al del último lustro: o Madrid o Bará campeón.