Natalia Rodríguez, de un repentino adiós "por problemas" a soñar con Río 2016

Natalia Rodríguez anunció su retirada del atletismo de alto nivel hace apenas una semana. Precisamente hoy, estaba previsto que la mejor mediofondista de la historia de España ofreciera una rueda de Prensa de despedida. “Hoy cuelgo las botas. Lo he meditado y he decidido poner punto y final a mi etapa como atleta, satisfecha por todo lo conseguido”, anunciaba en su perfil oficial de Twitter. Pero la tarraconense ha decidido dar marcha atrás y este martes reconocía que seguirá en activo. El Confidencial se ha puesto en contacto con ella que quiso explicar por qué reculó en su decisión: “Llegas a un punto que lo has pasado mal pero también te planteas si realmente hay alguna posibilidad de seguir intentándolo”. A sus 35 años, Natalia no se rinde y quiere seguir en la élite, al menos, hasta los Juegos Olímpicos de Río 2016.

Había meditado mucho la decisión, lo tenía claro, pero una semana después, Natalia Rodríguez ha decidido recular. “Cuando di el paso de anunciar la retirada, estaba bastante saturada porque venía arrastrando circunstancias desagradables. En ese momento, estaba convencida de ello. Había tenido una lesión importante en el gemelo, llevaba unos meses también que, después de haberme ido con Antonio Serrano, me había costado mucho adaptarme al cambio de entrenamientos... En definitiva, tuve una serie de problemas. Esperaba que me fuera mejor, pero me fue todo fatal. Llegó un punto que, con la edad que tengo y después de una temporada en blanco, me planteé dejarlo. Llevaba mucho tiempo pasándolo mal y entonces, piensas si merece la pena seguir porque ya no disfrutas tanto como antes”, reconoce.

Pese a que en el momento que anunció vía Twitter que abandonaba el atletismo de alto nivel estaba segura de hacerlo, una semana después, Natalia explica las razones por las que ha decidido volver: “Entre el día que anuncié la retirada y la rueda de prensa que quería dar este miércoles, no he parado de darle vueltas a todo. Tenía inquietud e incertidumbre y realmente no estaba convencida, había algo que no me dejaba estar tranquila. Llegas a un punto en el que lo has pasado mal, pero también te planteas si realmente hay alguna posibilidad de seguir intentándolo y ves que sí. Después, tienes el apoyo de la gente, todas esas muestras de cariño que te hacen pensar en todas esas veces que lo has pasado mal y has salido adelante. Eso es lo que te hace ver que realmente puedes intentarlo una vez más”.

Me dedicaré 100% a entrenar. Creo que tengo capacidad para recuperar el nivel en el que estaba, pero eso requiere estar a tope en esto

Durante estos días, Natalia se ha acordado de Ruth Beitia, otra atleta que también anunció que dejaba el atletismo y que regresó para conseguir grandes éxitos: “Me he acordado de ella, de este paso que dio también. Aun así eran circunstancias totalmente diferentes. Ella venía de una temporada buena, de haber estado ahí arriba, estaba en un momento dulce como para dejarlo. Es algo más agradable y puedes tener las cosas más claras y pensarlo más fríamente. En mi caso, es todo lo contrario. Yo vengo de una temporada en blanco, de pasarlo mal, de una situación muy dura y quizás te cuesta encontrar ese momento neutro de poder tomar una decisión sin sentirte influenciada por ninguna circunstancias externa. Cuando estás en una situación dura es muy difícil pensar en positivo”.

Natalia Rodríguez tiene ganas de seguir dando guerra en el mediofondo y sigue soñando con colgarse una de las pocas medallas que le faltan: “Me falta una medalla olímpica en mi historial. Es cierto que pienso, ‘has hecho mucho’, pero siempre te exiges el máximo. También me gustaría volver a estar en los 4 minutos en los 1500 metros. Creo que tengo capacidad para volver a hacerlo. Soy consciente de que estos últimos años no me he dedicado 100% a entrenar sino que ha habido otras tareas, como estudiar mi carrera de Fisioterapia o estar de concejal antes de los Juegos Olímpicos de Londres. Son cosas que te van mermando y te van absorbiendo, no estuve todo lo que tenía que haber estado en el atletismo”, asegura.

Por eso, Natalia cambiará su dinámica a partir de ahora: “Voy a apartar mis estudios y me dedicaré 100% a entrenar. Es algo que hace años que no hacía y creo que tengo capacidad para recuperar el nivel en el que estaba pero eso requiere estar a tope en esto”. Con la mente ya puesta en los próximos objetivos, la tarraconense mira a Río esperanzada: “La idea es conseguir clasificarme para estar en los Juegos Olímpicos y una vez allí intentar estar en la final. Si me clasifico, ya se verá. Es muy justo pensar en estar en el Mundial de Pekín a tope. Si consigo estar, será más una preparación de cara a Río”, concluye.