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Cincinnati Bengals contra Los Angeles Rams: dónde mirar cuando empiece la Superbowl
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Cincinnati Bengals contra Los Angeles Rams: dónde mirar cuando empiece la Superbowl

El encuentro que decidirá el campeón de la NFL es una cita obligada incluso para los no tan aficionados al fútbol americano. Te contamos donde mirar si te sientas a ver el partido

Foto: Los cascos de Rams y Bengals, junto al trofeo. (Reuters/Caroline Brehman)
Los cascos de Rams y Bengals, junto al trofeo. (Reuters/Caroline Brehman)

Alitas y cerveza preparadas. En la tele, lo más grande posible, fuegos artificiales. 200 cámaras, siete horas de previa, un estadio de 2.000 millones en Los Ángeles y todo el potencial de la mayor maquinaria mediática del mundo del deporte desplegada a máxima potencia. Es fácil perderse con todo lo que la NFL nos va a enseñar en la Superbowl que disputarán la noche de este domingo Los Angeles Rams y los Cincinnati Bengals. Con todo, no es raro preguntarse: ¿dónde tengo que mirar para saber qué está pasando?

La respuesta más obvia sería, claro, mirar al balón. Es lo más fácil para seguir lo que está ocurriendo. Pero el fútbol americano es un deporte en el que, pese a tener la fama de mucho parón (Bordalás sonreiría satisfecho), ocurren muchas cosas a la vez. Por eso vamos a hacer una pequeña guía de a qué debemos estar atentos para disfrutar al máximo de la cita deportiva del año.

Cuando ataquen Los Angeles Rams

Son el favorito para hacerse con el título. La franquicia lo apostó todo a este año hipotecando el futuro y entregando elecciones del 'draft' a cambio de jugadores veteranos y contrastados que pudieran sumar desde el minuto uno. Y la apuesta, arriesgada y criticada, ha salido bien. Además, tienen la experiencia de la final perdida contra los Patriots en el año 2019, algo de lo que seguro que su entrenador, Sean McVay, ha aprendido mucho.

placeholder Matthew Stafford, con el número 9, en un partido ante los San Francisco 49ers. (Reuters)
Matthew Stafford, con el número 9, en un partido ante los San Francisco 49ers. (Reuters)

Los Rams son una de las grandes amenazas ofensivas de la competición. Tienen al mejor receptor de la liga, Cooper Kupp, digno aspirante incluso a MVP, que ha encontrado en Matthew Stafford al 'quarterback' con el que conectar a la perfección. Stafford es un pistolero y no tiene miedo a arriesgar pases a ventanas pequeñas, pero sabe cómo mover el balón y cómo tener a la defensa siempre preguntándose qué va a hacer.

Todo esto no sería posible sin la presencia de McVay en la banda. A sus 36 años (es el entrenador más joven de la historia de la NFL) es una de las mentes más brillantes y diabólicas del juego. Las dos semanas de preparación que ha tenido para estudiar al detalle a la defensa de los Bengals son una barbaridad para alguien como él. Habrá encontrado grietas y sabe cómo explotarlas. No va a dudar en usar a Kupp hasta la saciedad si detecta que eso funciona. Y ojo con el papel que pueda jugar Odell Beckham Jr.

Con eso, la gran esperanza de los Bengals para detener esa combinación Stafford-Kupp está en hacerle la vida imposible al 'quarterback' angelino. La línea de defensa, con Trey Hendrickson y sus 122 kilos al frente, lo tiene todo para presionar e incomodar a Stafford. Si no lo consiguen, la defensa va a sufrir.

placeholder Trey Hendrickson. (Reuters)
Trey Hendrickson. (Reuters)

En la secundaria parece evidente que tendrán que hacerle un marcaje doble a Kupp y esperar que, eliminando la mayor amenaza rival, puedan mantenerse en el partido para darle opciones a su ataque. En cualquier caso, la principal misión es minimizar daños y aplicar la política de doblarse pero no romperse. Es decir, no permitir grandes jugadas a su rival o anotaciones muy rápidas. La misión de la defensa de Cincinnati es aguantar, aguantar y aguantar para que la ofensiva sea la que gane el partido.

Cuando ataquen los Cincinnati Bengals

Si decíamos que en defensa debían aguantar, en ataque los Bengals deben desatar todo su poder ofensivo. Zac Taylor, el entrenador, sabe que su tarea es relativamente sencilla: hay que poner el balón en las manos de Joe Burrow todo lo posible y dejar que el 'quarterback' conecte con sus muchas opciones en ataque. Si nos atenemos a lo que ha ocurrido durante la temporada, sobre todo durante la segunda mitad de la misma, dejar que Burrow haga lo suyo parece una buena idea.

placeholder Joe Burrow, en hombros tras clasificarse para la Superbowl. (Reuters)
Joe Burrow, en hombros tras clasificarse para la Superbowl. (Reuters)

Porque la historia del número 9 de los Bengals es la típica de las películas americanas. Superestrella en la universidad de Louisiana State, guapo oficial, número uno del draft hace solo dos años y protagonista de una reaparición estelar después de destrozarse el ligamento cruzado durante la temporada pasada, la de su debut. Y ahora en la Superbowl. No hemos podido confirmar si su pareja es la jefa de las animadoras.

Burrow es un jugador super explosivo capaz de ejecutar cualquier jugada sobre el campo. Durante el año ha pasado sus altibajos (los Raiders tuvieron a los Bengals contra las cuerdas en la primera ronda de Playoffs), pero se ha sobrepuesto cuando nadie (absolutamente nadie) contaba con que los Bengals se plantaran en el partido por el título.

Tendrá muchas opciones para elegir una vez tenga el balón. Tee Higgins, Ja'Marr Chase y Tyler Boyd forman el tridente de receptores más poderoso del juego, sobre todo porque se complementan a la perfección. El mejor de ellos es Chase, compañero de Burrow en la universidad, que supone una amenaza en el juego profundo, pero es capaz de dominar también en el centro del campo. Es rápido, potente y lo atrapa todo. Higgins y Boyd no se quedan atrás y se aprovechan de toda la atención que genera Chase. El papel del primero de ellos en estas eliminatorias por el título está siendo clave.

placeholder De izquierda a derecha, Joe Mixon, Ja'Marr Chase y Tee Higgins. (Reuters)
De izquierda a derecha, Joe Mixon, Ja'Marr Chase y Tee Higgins. (Reuters)

Por tierra parece que explotar el potencial del corredor Joe Mixon va a ser algo más complicado. Es verdad que Mixon es muy versátil y puede salir a recibir pases, algo que puede ser una gran válvula de escape para Burrow cuando llegue la presión, que llegará, pero todo apunta a que romper por el centro la potente línea de defensa de los Rams va a ser una tarea ardua. Mixon va a tener una noche larga.

Enfrente, la mejor defensa de la liga. De largo, además. Y en el centro de ello, el jugador más temible: Aaron Donald. Es el mejor jugador defensivo de la liga y una de las figuras más dominantes que ha visto la competición en las últimas décadas. Es el líder espiritual del equipo y su gran objetivo será llegar a Burrow para aguarle la fiesta. A su lado, Von Miller, otra superclase cuando se trata de placar al 'quarterback' rival.

placeholder Aaron Donald, con el número 99. (Reuters)
Aaron Donald, con el número 99. (Reuters)

Además, sus espaldas están muy bien cubiertas. Jalen Ramsey es probablemente el mejor antídoto contra Ja'Marr Chase. Tiene el tamaño, la velocidad y la movilidad, además de la inteligente, para detener a cualquier receptor de la liga en uno contra uno, lo que da al resto de la defensa mucha flexibilidad. Si Ramsey logra borrar del mapa a Chase, algo que puede hacer perfectamente, los Rams van a tener un partido muy tranquilo.

Vale, pero... ¿Quién va a ganar?

Los Rams son favoritos, pero los Bengals ya han demostrado que tienen ese gen que les hace superar adversidades y, claro, eso los convierte en un equipo peligroso. El arranque del partido va a ser muy importante. Si Burrow consigue imponer su ritmo y mover el balón puede conseguir que la defensa dude y tenga que salir de su zona de confort buscando los ajustes. No es difícil aventurar que Zac Taylor va a salir a la yugular del rival desde el minuto uno.

Eso, claro, puede volverse en contra. Si Aaron Donald y sus muchachos maniatan a la ofensiva rival y les frustran durante las primeras posesiones van a provocar que el fallo llegue. Burrow no tiene miedo a lanzar balones ajustados porque confía en sus receptores, por lo que el más mínimo error puede provocar una intercepción que cambien el rumbo del partido o lo sentencie.

Es una Superbowl y ambos equipos tienen motivos y argumentos para plantarse en el partido pensando que ellos son los favoritos. ¿Por qué no iban a hacerlo? El encuentro lo tendrá todo. Estrellas, defensas duras, ataques explosivos, un estadio reluciente en Los Ángeles... Y nosotros tendremos alitas y cerveza. A disfrutarlo.

Alitas y cerveza preparadas. En la tele, lo más grande posible, fuegos artificiales. 200 cámaras, siete horas de previa, un estadio de 2.000 millones en Los Ángeles y todo el potencial de la mayor maquinaria mediática del mundo del deporte desplegada a máxima potencia. Es fácil perderse con todo lo que la NFL nos va a enseñar en la Superbowl que disputarán la noche de este domingo Los Angeles Rams y los Cincinnati Bengals. Con todo, no es raro preguntarse: ¿dónde tengo que mirar para saber qué está pasando?

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