Es noticia
Furia y sangre en EEUU contra el Gobierno: de Oklahoma a las milicias de Trump
  1. Cultura
Historia

Furia y sangre en EEUU contra el Gobierno: de Oklahoma a las milicias de Trump

Hace justo ahora 25 años tuvo lugar el peor atentado terrorista en EEUU después del 11 de septiembre de 2001

Foto: Atentado de Oklahoma, 1995.
Atentado de Oklahoma, 1995.

El peor atentado de la historia de Estados Unidos antes del 11 de septiembre ocurrió en Oklahoma en 1995 hace 25 años. Su perpetrador, Tim McVeigh, era un "patriota" según su propia declaración: lo hacía para proteger al pueblo americano de los excesos del poder. Murieron 168 personas, entre ellas quince niños. El día que voló por los aires el edificio Alfred P. Murrah del FBI en Oklahoma el 19 de abril de 1995 representó un punto álgido en cuanto a la amenaza de una resistencia interior, una serie de milicias que se oponían al gobierno federal y que han resurgido con la presidencia de Donald Trump.

Más aún ahora cuando Trump se resiste a dejar la Casa Blanca tras el resultado electoral que ha dado la victoria al demócrata Joe Biden. La polarización de los últimos comicios en EEUU han hecho saltar las alarmas de un país en donde no sólo la abundancia de armas por todas partes, sino también la firme convicción entre algunos sectores extremistas de que existe un derecho particular a reclamar el mensaje de los padres de la patria, planea como una oscura sombra en la entrega de poderes después de las elecciones. Hace apenas un mes el joven de 17 años Kyle Rittenhouse disparó y mató a dos personas que protestaban por la violencia policial en Wisconsin. Rittenhouse, como McVeigh, pertenecía a una milicia local llamada la Guardia de Kenosha.

placeholder Tim McVeigh, el responsable del atentado de Oklahoma
Tim McVeigh, el responsable del atentado de Oklahoma

Tim McVeigh, el hombre que introdujo una furgoneta cargada de explosivos en el edifico Murrah del FBI no era un lobo solitario. De hecho, en pocos días fue detenido junto a otro terrorista, Terry Nichols, que pertenecía a una milicia, la de Michigan, que tanto ha dado que hablar estos días de elecciones. Según McVeigh él era un patriota no un terrorista que "hacía un llamamiento para los ciudadanos preocupados de que el gobierno estaba destruyendo su libertad", -Diane Andrews 'The Oklahoma City Bombing'-.

Tanto McVeigh como Nichols pertenecían a un entramado de organizaciones que de alguna forma interpretataban que EEUU no sólo se debía a sus instituciones. Se debía a la ciudadanía y al margen de las agencias gubernamentales. Una red armada, peligrosa y con capacidad terrorista.

La misma a la que interpela Trump de forma indirecta ahora cuando se dirige al país para denunciar un supuesto fraude electoral. Es más, en Michigan a cuya milicia pertenecía McVeigh, una de las mas antiguas del país, otro grupo conectado, los Wolverines Watchmen, planeaban secuestrar a la gobernadora demócrata Gretchen Whitmer. El FBI detuvo a 13 personas ligadas a este movimiento de extrema derecha.

El asedio de Waco

La tragedia de Oklahoma y la explosión del movimiento de milicias tuvo su precedente inmediato en otro drama nacional: el asedio del complejo de Waco, Texas, de los Davinianos de la Iglesia del Séptimo Día en 1993. Parece una locura porque lo es, pero significó un punto de inflexión. En el rancho de Monte Carmelo, en Waco, su líder espiritual, David Koresh, había interpretado su particular visión de una pseudo religión que databa de los años treinta. Dio igual que hubiera pruebas de abusos de todo tipo.

El FBI decidió asaltar el complejo de los davininianos en Waco, Texas. Fue un desastre televisado en directo

En España sería sencillamente una secta más, pero allí tenían la posibilidad de financiarse, comprar armas y lo que es peor atrincherarse ante una orden federal. La serie documental de Netflix 'Wild Wild West' aportó contexto para quien no conozca este fenómeno en EEUU. Lo hicieron hasta que el FBI, que les seguía la pista, decidió intervenir. Bill Clinton era el presidente. En 1993, el asedio de Monte Carmelo por parte del FBI duró 56 días.

Hubiera sido inconcebible en Europa, la misma razón por la cual todavía es posible sorprenderse de lo enrevesado que puede ser la transición de una administración a otra en EEUU, la democracia más antigua del mundo. El caso es que en Waco, es cierto que el FBI hizo mal todo aquello que era capaz de empeorar: usar la fuerza es un arma de doble filo aunque la ley te dé la razón.

placeholder El complejo de la iglesia Daviniana de Waco, Texas, en llamas.
El complejo de la iglesia Daviniana de Waco, Texas, en llamas.

Después de varios días de asedio decidieron tomar por la fuerza el complejo de la secta daviniana en lo que fue un espectáculo televisado. No sólo hubo cientos de agentes disparando a troche y moche contra la secta armada, sino que llegaron a emplear incluso tanques para derribar lo que se consideraba una violación de las leyes federales. En ciertos sectores de EEUU, que no pertenecían a ninguna secta, se consideró un atropello: las milicias lo interpretaron así.

El peligro de las milicias

McVeigh, el hombre que hizo saltar por los aires el edifico Murray de Oklahoma explicó que Waco había sido un detonante para su acción terrorista: un FBI saltándose lo que él consideraba un derecho ciudadano. Lo que escondía, sin embargo, era una creciente y preocupante red de milicias "patriotas" que se oponían al "control de la ciudadanía" por parte del gobierno.

Es el mismo avispero que agitó el mismísimo presidente de EEUU Donald Trump en su último debate en la campaña con Joe Biden cuando de hecho condenó tímidamente a los movimientos de las milicias y de extrema derecha para a continuación respaldar a uno de sus grupos los 'Proud Boys'. Las milicias paragubernamentales tienen un referente claro en las de los años 30 en Europa, un peligro que de hecho ha asustado a un país que se precia de ser la democracia más antigua del mundo y que ahora contiene la respiración después de un escrutinio muy tenso. La polarización en un país armado hasta los dientes sólo puede traer malas noticias.

Las milicias sufrieron un retroceso tras el atentado terrorista hasta la victoria de Barack Obama, el primer presidente negro de EEUU

Precisamente, la salvajada del atentado de Oklahoma provocó que los afiliados de las milicias cayeran ¿Cuando resurgieron? con la victoria de Barack Obama. Un presidente negro. No olvidemos que bajo el supuesto patriotismo son milicias de extrema derecha, supremacistas, violentas. Ya en agosto de 2009 apenas unos meses después de ser presidente se observó un renovado interés en el movimiento de las milicias espoleadas por el racismo y que la presidencia de Trump sñolo ha agravado justo en un momento en el que el país pasaba por el movimiento Black Lives Matter tras la muerte a manos de un policia de George Floyd en plena crisis del Covid.

Uno de sus acólitos sigue siendo el responsable del segundo peor atentado de la historia del país. En EEUU existe la creencia intrínseca a su forma de gobierno de que son plausibles. Actualmente, en Texas, existen algunas que se dedican a patrullar la frontera con México para evitar que entren sin papeles: inconcebible en un estado de derecho. Si Oklahoma fue un toque de atención terrible ahora parece haberse olvidado. El llamamiento a un supuesto fraude electoral por parte de Trump sólo puede empeorar las cosas. Ahora el país contiene el aliento esperando que no se produzca otra manifestación de violencia como la de Oklahoma, quedan tres meses. Sólo puede empeorar una vez que los movimientos de milicias se haya desbocado como ya ocurrió en la década de los 90.

El peor atentado de la historia de Estados Unidos antes del 11 de septiembre ocurrió en Oklahoma en 1995 hace 25 años. Su perpetrador, Tim McVeigh, era un "patriota" según su propia declaración: lo hacía para proteger al pueblo americano de los excesos del poder. Murieron 168 personas, entre ellas quince niños. El día que voló por los aires el edificio Alfred P. Murrah del FBI en Oklahoma el 19 de abril de 1995 representó un punto álgido en cuanto a la amenaza de una resistencia interior, una serie de milicias que se oponían al gobierno federal y que han resurgido con la presidencia de Donald Trump.

Terrorismo