Prisa sacrifica el beneficio tras la limpieza de balance de la nueva dirección

El Grupo Prisa registró el año pasado unas pérdidas de 269,3 millones de euros en 2018, una cifra superior a los 102,6 millones que se anotó en 2017, según la información financiera remitida a la CNMV. Esto se debe principalmente a que la compañía ha revisado el valor de los créditos fiscales y de Media Capital y ha contabilizado un deterioro de estos activos por valor de 202 millones y 76 millones, respectivamente. Sin esta limpieza de balance, Prisa habría registrado unos beneficios de 45 millones de euros.

La editora de 'El País' también se anota un EBITDA comparable de 298 millones, un 10,3% más respecto al ejercicio anterior y una generación de caja positiva de 42 millones de euros. Además, la compañía señala que ha cumplido el plan de eficiencia con dos años de adelanto y se ha apuntado un ahorro de 48,5 millones. En términos de deuda, la compañía mantiene un saldo de 929 millones frente a los 1.422 millones de diciembre de 2017.

Además de aprobar las cuentas, la otra gran decisión que ha tomado el consejo de Administración que preside Javier Monzón desde el 1 de enero es la compra del 25% de Santillana que no tenía. Tal y como ha adelantado El Confidencial, Prisa ha llegado a un acuerdo con Victoria Capital para adquirir el paquete accionarial que no controlaba por 312,5 millones de euros. La operación se abonará con nueva ampliación de capital por valor de 200 millones de euros y cuenta con el compromiso del Banco Santander (que tiene casi el 4,1% de la editora) para sacarla adelante.