Entre Gallardón y Lassalle anda el juego: del dividendo digital a la división de las teles

Se avecinan curvas en el sector audiovisual. La patronal de las televisiones comerciales, Uteca, celebra a finales de noviembre sus jornadas anuales en un momento delicado para la entidad. El pasado mes de marzo, las televisiones más pequeñas que integran la patronal montaron un 'lobby' paralelo tras sus continuos choques con Atresmedia y Mediaset. De nada sirvió crear una vicepresidencia para José María Mas (13TV): las televisiones pequeñas consideran que sus intereses no están lo suficientemente representados.

Esta nueva asociación, impulsada por DKISS (Blas Herrero) y 13TV (Mas), aglutina también a Real Madrid TV, Veo TV (Unidad Editorial) y Net TV (Vocento), si bien estos dos últimos mantienen un perfil mucho menos beligerante. El único pequeño operador que ha optado por mantenerse al margen es Ten (Grupo Secuoya).

Fuentes conocedoras de la situación explican que, pese a las tensiones internas, todos los miembros han adoptado una posición conciliadora para intentar reconducir la situación. Los grandes operadores entienden que tener una única voz ante el Gobierno es mucho más útil que ir por separado, por lo que aspiran a desactivar la 'rebelión' interna más pronto que tarde.

Las televisiones llegan a su jornada anual divididas. Siempre han tenido sus diferencias, pero la fractura interna no se había evidenciado hasta ahora

Una misión complicada, para la que se ha contratado a Alberto Ruiz-Gallardón, amigo personal de Herrero. El exministro lleva meses actuando como una suerte de mediador en el conflicto televisivo, aunque por el momento sin demasiado éxito. Mientras que el tándem Atresmedia y Mediaset considera que su posición de dominio es el resultado del libre mercado, las televisiones más pequeñas creen que se han convertido en un duopolio que absorbe demasiada publicidad, una tesis que también comparten las autonómicas. En cualquier caso, las conversaciones, tal y como admiten fuentes de la patronal, siguen en marcha.

Así las cosas, las televisiones llegan por primera vez a su jornada anual divididas. Aunque siempre han tenido sus diferencias, la fractura interna no se había evidenciado hasta la creación del nuevo 'lobby'. La cita, que contará un año más con la presencia de la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, se ha convertido en un foro de excepción para que los 'popes' del sector hagan sus peticiones al Gobierno.

Uno de los temas que figurarán en la agenda sin lugar a dudas es la implantación del nuevo dividendo digital, un asunto que preocupa mucho a las cadenas de televisión. A la vuelta del verano, Televisión Abierta, el 'lobby' constituido para abordar este tema, mantuvo una reunión con José María Lassalle, secretario de Estado para la Sociedad de la Información y la Agenda Digital.

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Á. G. Z.

El encuentro, celebrado en términos muy cordiales, sirvió para explorar la implantación del citado dividendo, prevista para 2020. Las televisiones no quieren repetir los errores del pasado, de ahí que hayan manifestado al secretario de Estado su interés por participar "activamente" en la nueva hoja de ruta. Por su parte, Lassalle les comunicó que se abriría una consulta pública sobre el asunto, algo que las cadenas esperan que ocurra cuanto antes para evitar que se convierta en un brindis al sol.

Por último, las televisiones volverán a exigir igualdad de condiciones para todos los operadores del mercado, algo que ya pidieron hace un año. Las plataformas como Netflix, que son competidores directos, no están sujetas a la misma normativa que las televisiones y no tienen, por ejemplo, que destinar el 5% de sus ingresos a financiar cine español.