Prisa sufre por los cuatro costados: caen los ingresos de todos sus negocios

Prisa presentó este lunes los resultados correspondientes al año 2016, en un momento de gran tensión, con la cúpula en el foco y una venta de Santillana renqueante.

Tras el magro beneficio obtenido en 2015 —5,3 millones de euros—, el gigante Prisa vuelve a firmar pérdidas por valor de 67,9 millones de euros. Si el año anterior el negocio de la prensa fue el único que cerró con números negros, en el último ejercicio todos han registrado unos ingresos menores.

Cabe mencionar que antes de impuestos, Prisa obtuvo un beneficio de 49,7 millones de euros. Sin embargo, la reforma del impuesto de sociedades de diciembre ha tenido un impacto fiscal negativo, que es lo que hace que la cuenta de resultados consolidada arroje pérdidas. Un beneficio que, en cualquier caso, llega tras los recortes de plantilla de los últimos años.

Por negocios, siempre en referencia a los resultados reportados, en la partida de educación Prisa ingresó 637,5 millones de euros, una caída del 0,8% que afectó tanto al negocio nacional (-3%) como internacional (-0,2%). Aunque Santillana se mantiene líder en casi todos los países en los que opera, los ingresos también cayeron un 1,6%, hasta los 632,6 millones.

A diciembre de 2016, el grupo adeudaba un total de 1.486,1 millones, una cifra inferior a los 1.659,7 millones registrados en el mismo mes de 2015

El apartado radiofónico registra una caída de ingresos del 4,4%, hasta los 301,1 millones. Tanto la publicidad nacional como la internacional cayeron, aunque el descenso fue mucho más pronunciado en el extranjero (-15,3%). En este caso, la compañía destaca el liderazgo de sus emisoras, tanto en contenidos generalistas como en programas musicales, con una cuota de mercado del 37% en el caso de la cadena SER y un 47% en radio musical.

La división de Prisa Radio, además de ser la que más cae de todas, es en la que está planeado ejecutar nuevos recortes de personal a lo largo de 2017, al no haber alcanzado los objetivos esperados, según informaron los sindicatos en diciembre.

Respecto a la prensa, el negocio que mejor se comportó en el ejercicio previo, los ingresos caen un 0,6%, hasta los 239,9 millones. En el desglose, mientras la circulación (-4,7%) y promociones (-0,5%) revelan caídas, la publicidad sube un 3%. ¿El motivo? Aunque la publicidad en prensa de papel cae un 9,2%, la publicidad digital experimenta un crecimiento del 15,2%, lo que permite que la partida de publicidad arroje un dato positivo. De hecho, el grupo señala que el 41% de sus ingresos publicitarios ya proviene del área digital.

La circulación de ejemplares impresos cae un 12,4% en el caso de 'El País', hasta los 194.005 ejemplares, y un 5,7% en el caso del diario deportivo 'As', hasta los 125.955 ejemplares.

TE PUEDE INTERESAR

La prensa de papel, en el chasis: la publicidad también caerá este año víctima de internet

Álvaro G. Zarzalejos

Por último, Media Capital, el grupo de comunicación portugués, se mantiene con unos ingresos estables con una mínima caída del 0,2%, hasta los 174 millones. Aunque la publicidad creció un 4,1%, la partida de 'otros' registró una bajada del 9%.

Hasta ahora, todos los negocios de Prisa muestran una caída de ingresos con respecto al año anterior. Sin embargo, la cosa cambia al analizar los ingresos de la compañía por sus actividades digitales. En este caso, todas las partidas experimentan subidas y Prisa admite que los "ingresos por la transformación digital" suponen ya el 15% del total del grupo.

Más de 1.400 millones de deuda bancaria

Desde hace años, una de las prioridades del grupo pasa por el saneamiento de sus maltrechas cuentas. A diciembre de 2016, el grupo adeudaba un total de 1.486,1 millones de euros, una cifra ligeramente inferior a los 1.659,7 millones registrados en el mismo mes de 2015.

Antes de 2018, la compañía debe abonar 956,5 millones de euros correspondientes al llamado tramo B del crédito de refinanciación rubricado en 2013. Precisamente, la venta de Santillana es una de las operaciones clave de cara a seguir bajando esa cifra. Una operación que se ha complicado en las últimas semanas después de que las ofertas recibidas no hayan cubierto las expectativas de la dirección.