Intereconomía se segrega por áreas de negocio para atraer nuevos inversores

Intereconomía Corporación, editora del diario La Gaceta, busca soluciones a sus estrecheces económicas. Y ha recurrido a nuevas vías más allá de los ajustes de personal y la renegociación de la deuda con banca y proveedores. Según información publicada en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (Borme), el grupo de Julio Ariza ha llevado a cabo una importante reorganización societaria, al segregar la matriz y constituir cinco empresas independientes con sus principales áreas de negocio. Todo con el fin de facilitar la entrada de nuevos inversores en el grupo, necesitado de auxilio tras perder 16 millones el pasado año.

La escisión se hizo efectiva el pasado mes de agosto, si bien el grupo de medios no hizo entonces explícito su alcance. Las cuentas correspondientes al año 2011, recientemente remitidas al Registro Mercantil, clarifican el objetivo perseguido por la compañía. “Se está llevando a cabo la reestructuración de la estructura societaria del grupo del que Intereconomía Corporación S.A. es cabecera, con el fin de favorecer en un futuro la realización de posibles operaciones corporativas que refuercen las medidas tomadas anteriormente (…), tales como la entada de nuevos inversores”, reza la memoria incorporada a los estados contables.

El cambio societario “tiene el objetivo de diferenciar las distintas ramas de actividades que viene desarrollando [el grupo] y lograr procesos más eficientes en el desarrollo de los distintos negocios, que permitan una mayor especialización y competitividad de cada una de las sociedades”. De este modo, se crean cinco “entidades unipersonales” para el desarrollo de los negocios de radio, televisión, publicaciones, ‘business media’ e inversiones. “Cada una forma una unidad económica independiente (…), recibiendo a cambio la sociedad segregada todas las participaciones de las sociedades beneficiarias”, se explicaba en las cuentas del pasado año.

La medida se suma al plan de reestructuración y ahorro de costes que la compañía puso en marcha el año pasado como respuesta a unas pérdidas insostenibles que alcanzaban los 1,3 millones al mes; es más, la firma acumula un agujero de ejercicios anteriores que supera los 19 millones. Dicha hoja de ruta de ruta incluye la renegociación de la deuda con bancos y proveedores para “garantizar la viabilidad futuro del negocio”; un reequilibrio patrimonial vía ampliaciones de capital y la obtención de préstamos participativos, y un drástico ajuste de plantilla. La compañía, con graves problemas de tesorería, puso en marcha un expediente de regulación de empleo y recortes salariales de entre el 10% y el 15% por los que espera ahorrar 5,5 millones anuales.

Una remota salida a bolsa

La captación de nuevos inversores no es la única vía explorada en los últimos meses por Ariza para conseguir financiación. Y es que el presidente del grupo ha cortejado también la opción de sacar la compañía a bolsa, una posibilidad que hoy parece remota a la vista de la situación del grupo –y del mercado-. Es más, según aseguran fuentes del sector, Deloitte preparó la operación con el Santander como banco colocador antes del verano. No obstante, las elevadas aspiraciones de capital de la compañía para su oferta de acciones –en torno a cinco millones de euros- le obligarían a recibir la supervisión de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNVM) en lugar de la del Mercado Alternativo Bursátil (MAB), cuyas exigencias son mucho más laxas. Una razón suficiente para frustrar esa alternativa.

La empresa desglosa en su informe de gestión los problemas para generar ingresos de sus diversas áreas de actividad, en un año en que la facturación se redujo en casi 10 millones de euros y quedó en 31,5 millones. De este modo, denuncia que Mediaset España y Antena 3 acentuaron en 2011 el “duopolio de hecho” que mantienen en el mercado publicitario televisivo, lo que redujo en un 47% la parte del pastel que se repartieron las cadenas más pequeñas. La caída en la radio se atenuó –cerró para el sector con descensos del 4,3%-, si bien los volúmenes son mucho menores. “Excepto en el área de Internet (…), el resto de áreas se comportan como indicadores avanzados del ciclo económico, con lo que sus ingresos también sufren reducciones de, aproximadamente, un 38% con respecto al 2009”, zanja la compañía.

Pese a que la auditoría advierte de que la sociedad presenta fondos propios y un fondo de maniobra negativos, lo que alerta de tensiones de caja y de que las exigencias a corto plazo de la empresa no están bien cubiertas, Ariza se defiende y asegura que “dispone del apoyo financiero de los socios y de terceros y tiene la certeza de la recuperabilidad de sus cuentas a cobrar y la posibilidad de hacer frente a sus compromisos a corto plazo”. La esperanza de la compañía cara al año próximo se centra en los retornos que pueda recibir de productos como Tadeo Jones, película de animación en la que el grupo participa y que ha sido un éxito de taquilla sin paliativos.