El Gallinero | El mejor día en la vida de Pablo Casado fue también el peor: "Ya acabo"
El líder nacional de los populares se animó a salir al balcón de Génova junto a Isabel Díaz Ayuso e incluso habló primero. El público allí concentrado le calló al grito de "AYUUUUUSO"
¡Que hable la mayoría! Fue el eslogan de Unidas Podemos durante la campaña. Y la mayoría habló, vaya que si habló, habló tanto que quizá a Pablo Casado le hubiera gustado que hablara un poco menos…
Bienvenidos al gallinero español.
Si hablamos de ruido, jarana y polarización, la campaña ha sido estupenda (terrible, eso sí, si lo que a uno le gusta son los retiros espirituales).
¿El mejor momento en términos de decibelios? El debate en la SER. Con Pablo Iglesias en una de esas sobreactuaciones melodramáticas que tan bien le salen, Rocío Monasterio en modo encargada de plantación de algodón en Alabama, Ángel Gabilondo y Mónica García haciendo una espantada en diferido tras consultar sus móviles, Edmundo Bal bordando el papel de ciudadano medio superado por los acontecimientos crispadores y Ángels Barceló envuelta en los ropajes de la DEMOCRACIA.
Pablo Iglesias abandona el debate de la cadena SER ante la barra libre de la extrema derecha para provocar y sembrar odio.
— Javier Sánchez Serna (@J_Sanchez_Serna) April 23, 2021
Ya está bien de blanquear a esta gentuza. #DebateSER pic.twitter.com/sjPhiCIiWY
Pero no importa lo que pase durante la campaña, como si tiran una bomba atómica, que lo mejor (y lo más esclarecedor) llega siempre al cierre de urnas.
En efecto, es imposible superar en intensidad emocional el momento ganadores y perdedores. Sobre todo porque se pasa de la crispación teatral hacia el partido rival a la tensión interna dentro del propio partido. Como dijo una vez Konrad Adenauer (sí, amigos, esto es columnismo de altos vuelos), "hay tres tipos de enemigos: los enemigos a secas, los enemigos mortales y los compañeros de partido".
Aunque la ganadora de las elecciones fue Isabel Díaz Ayuso, el primer discurso de la noche genovesa lo dio Pablo Casado. No sin riesgos: la multitud eufórica le interrumpió un par de veces al grito de AYUUUUUSO-AYUUUUUSO… y Casado tuvo que decir, "ya acabo".
Ayuso y Casado ya en el balcón de Génova. Se confirma el fenómeno del ayusismo. En casi todos los municipios el PP primera fuerza (más del 40% escrutado) y en todos los distritos de la capital. También en Vallecas. pic.twitter.com/09tuPgP5UK
— Paloma Esteban (@PalomaEsteban) May 4, 2021
Luego Ayuso dio un discurso de los suyos… ¿Que qué dijo? Es difícil de explicar sin ayuda de un egiptólogo y, además, da exactamente igual, porque a estas alturas ya no hay dios que la pare.
Entre bastidores, de hecho, hubo comedia política de enredo: Ana Pastor entrevistaba a Ayuso cuando Casado apareció por allí por sorpresa... y le acabó entrevistando a él. Ejem. Al borde del duelo de folclóricas.
Por supuesto, Ayuso no tiene aspiraciones nacionales, Casado es el líder querido del PP y en Doñana viven unicornios.
Que hable la mayoría.
¡Que hable la mayoría! Fue el eslogan de Unidas Podemos durante la campaña. Y la mayoría habló, vaya que si habló, habló tanto que quizá a Pablo Casado le hubiera gustado que hablara un poco menos…