¿Está tu pareja contigo solo por rebote? Las señales que delatan que lo vuestro no durará

Muchas relaciones nacen de la nada, sin previo aviso: dos personas se conocen y surge la chispa de inmediato. A continuación y de forma natural, comienzan una relación. Esto puede suceder cuando uno de los dos está sumido en una crisis de pareja. Al fin y al cabo, la mejor forma de superar el dolor de una relación fallida es conocer a otra persona que te aporte esas emociones que el tiempo o la rutina han ido mermando.

A pesar de que muchas de estas relaciones tienen buenos resultados, por norma general los momentos de ruptura hay que aprovecharlos para estar con uno mismo y sanar las heridas que ha dejado la relación fallida. Embarcarte en otro romance de forma precipitada puede hacer que intentes aplicar los atributos positivos que viste en tu anterior novio o novia en el nuevo, sean físicos o emocionales. Y, desde el otro punto de vista, enamorarte de alguien que acaba de pasar por una separación hace poco puede generar complejo o cierta inseguridad al pensar que eres el recambio emocional.

Así son las relaciones "de rebote" o "relaciones liana". De oca a oca y tiro porque me toca. Esto tampoco quiere decir que este tipo de relaciones sean negativas o no valgan la pena. De hecho, fomentan algo muy importante para la persona que sale de una relación fallida: la autoestima. Gracias a estos encuentros fugaces o experimentales, puede volver a sentirse deseada, especialmente si acaba de terminar una relación en la que ya no se sentía satisfecha.

Eso sí, hay que saber cómo gestionarlas, abordarlas y procesarlas. Si no ha pasado el suficiente tiempo o todavía la herida de la otra relación sigue abierta, en primer lugar deberías contárselo a tu nuevo crush para que lo tenga en cuenta. Cabe el riesgo de que acabas reproduciendo patrones negativos de tu anterior relación fallida. Y, si ese es el caso, debes estar muy atento a las señales que delatan que la persona no lo ha superado y necesitas alejarte de ella debido a que no es capaz de mantener de momento ninguna relación con nadie. La revista Best Life ha reunido algunos de estos signos, consultando con expertos, que veremos a continuación.

Vives en la dependencia

Cuando atravesamos por una ruptura, tendemos a estar más necesitados emocionalmente porque se ha producido un vacío en nuestros sentimientos. Un vacío que no podemos llenar a toda costa con otra persona, por más que queramos. En este sentido, merece más la pena aceptarlo y ser conscientes de que la persona que acabamos de conocer no puede hacerse cargo de este papel. En caso contrario, caeremos en una especie de dependencia heredada de nuestra anterior pareja que ahora se vuelca en la nueva.

"Es muy tentador intentar llenar el vacío que dejó tu ex, lo que puede llevarte a cruzar por etapas de la relación sin estar preparado"

"Depender demasiado emocionalmente de una nueva pareja puede crear una relación de dependencia poco saludable", asegura Luis Cornejo, terapeuta matrimonial. "También puede ejercer una gran presión sobre la nueva relación para 'arreglar' o detener el proceso de duelo de la anterior, lo que genera sentimientos de resentimiento o frustración".

No para de hablar de su ex

Es normal que aparezca de manera frecuente en las conversaciones, sobre todo si la ruptura está reciente, pero si continuamente no para de mentarle o hablar de cómo era su relación con él, eso es que la persona no está preparada para embarcarse en otra aventura amorosa. "Hablar constantemente de tu ex significa que piensas en él, lo que quiere decir que no lo has superado", asegura Cornejo.

No hay conexión emocional profunda

Es probable que sientas que hay una distancia emocional insalvable entre tu nueva pareja y tú. Esto podría denotar que aún no ha superado su anterior historia de amor, ya que al final esa profundidad emocional la reservaba celosamente a esa otra persona, por lo que tú no entras dentro de la ecuación. Esto no tiene por qué ser malo si te apetece vivir una aventura para, como decíamos, inflarte de autoestima o disfrutar de tu recién estrenada soltería, pero eso sí, ten en cuenta que la persona a la que acabas de conocer quizá busca otra cosa en ti.

Todo va muy rápido

Todo lo que sube demasiado rápido tiende a bajar al mismo ritmo. Y si solo os conocéis de unos días o semanas y ya te está proponiendo planes muy serios o arriesgados, ve con precaución, tanto si eres la nueva persona en su corazón como si eres quien acaba de dejarlo con su ex. "Es muy tentador intentar llenar el vacío que dejó tu ex", sostiene Cornejo, "lo que puede llevarte a cruzar por etapas de la relación sin estar preparado. Ir demasiado rápido solo resultará contraproducente, pues todavía no te has tomado el tiempo suficiente como para conocer bien a esa persona".