¿Quieres ahorrar en calefacción? Apunta este truco marinero de la II Guerra Mundial

Con la llegada del frío a la vuelta de la esquina, la factura energética en el hogar se dispara. Y más este año con el precio del gas y la luz por las nubes como consecuencia del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania. Por este motivo, mucha gente intenta buscar la manera de reducir el gasto en la calefacción para que la factura no suba más de la cuenta.

Conseguirlo es sólo cuestión de aplicar una serie de consejos de sentido común e invertir en equipamiento en determinados casos. No obstante, hay trucos para ahorrar en calefacción que no necesitan inversión alguna o apenas un coste muy limitado.

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Jose Luis Gallego

Es el caso del método Winter que un marinero británico llamado Dylan Winter ha ideado para calentar una habitación por unos pocos céntimos al día. La idea no es novedosa ya que se trata de un sistema que se remonta a la Segunda Guerra Mundial, ya que fue utilizado en los refugios antiaéreos en Reino Unido.

Ocho velas y dos macetas

La referencia de este método viene del apellido de su creador, no porque Winter signifique invierno en inglés. Es solo una mera coincidencia. El sistema en cuestión parte de una barata y sencilla idea y solo se necesitan ocho velas y dos macetas.

Las velas se colocan encendidas en el interior de un molde de metal y se cubren con una maceta de cerámica pequeña con el agujero del fondo tapado. Posteriormente, esa maceta pequeña se cubre con otra más grande dejando, esta vez sí, el agujero abierto, según se puede observar en el tutorial explicativo de YouTube.

Las velas, al estar encendidas, calientan el aire que hay dentro de las macetas, explica el marinero. El calor tiende a ir hacia arriba gracias a la corriente de convección entre al aire caliente y frío, lo que provoca que ese aire caliente salga por el agujero de la maceta más grande y por la parte baja de la bandeja, calentando una habitación en pocos minutos y con un gasto mínimo.

El método Winter es un sistema barato y sencillo y solo se necesita ocho velas y dos macetas

No obstante, este método tiene también sus detractores que consideran que no es fiable por el sistema de combustión, ni seguro al utilizar fuego en casa. Además, dudan de su eficiencia energética, ya que la máxima energía que se transmite es la de la propia vela que, según datos científicos, no es demasiada.