Las señales más comunes que delatan que tu pareja ya no confía en ti

La confianza es el pilar de toda relación romántica. Si no hay confianza, no hay comunicación y, con ello, tampoco entendimiento. Además, al contrario de otros problemas conyugales más frecuentes, si tu pareja ya no confía en ti o tú no confías en ella, poco hay que hacer más que aceptar que debéis separaros. Al fin y al cabo, reparar lo mucho que confías en otra persona cuesta mucho y no hay una manera concreta de hacerlo o de que esa confianza se recupere de la noche a la mañana.

Puede que esa falta de fe responda a una experiencia traumática negativa, como un caso de infidelidad pasado o la propia inseguridad de alguien que presiente que le están mintiendo o no le están contando toda la verdad. El primer paso para recuperar el entendimiento con tu pareja (para lo que es imprescindible, de nuevo, tener confianza) es identificar qué es lo que está mal o cuáles son los aspectos clave de vuestra relación en los que no confías.

"Si tu pareja empieza las frases de manera frecuente con palabras como 'pensé que habías dicho...', presta atención"

Solo así podrás saber qué papel llevar a cabo para hacer que la duda de la honestidad de tus palabras no vuelva a hacer acto de presencia. La revista 'Best Life' ha consultado a distintos expertos para saber identificar cuanto antes que existe esa falta de confianza y qué hacer al respecto para que no se convierta en un problema de primer orden.

Hace demasiadas preguntas

Una de las señales más evidentes de su falta de confianza. Si constantemente te pregunta por tu paradero, con quién estás o qué vas a hacer en el corto plazo, podría ser porque cree que tienes algo que ocultar o que podrías estar engañándole. Si incluso llega a ponerse en contacto con la gente con quien le has dicho que estás, es bastante evidente de que tiene un problema muy grave a la hora de confiar.

Intenta pillarte en cualquier momento

Si cada vez que te pide una explicación por algo lo hace en un tono detectivesco, o notas que pone demasiada atención a todo lo que dices por si le estás mintiendo, es un claro signo de que no tiene ninguna fe en lo que le digas. Imagina que le has dicho que estarás en casa a tal hora y llegas tan solo quince minutos tarde. "Si tu pareja empieza las frases de manera frecuente con fórmulas como 'pensé que habías dicho...', presta atención, es posible que crean que hay algo que no saben y que tienen que descubrir", asegura Elizabeth Brokam, terapeuta de parejas estadounidense.

Se molesta cuando no respondes

Si tu pareja se molesta constantemente cuando no respondes de manera inmediata a sus mensajes, es evidente que no confía lo suficiente en ti. "Las personas que tienen dificultades para confiar en alguien tienden a hacerse preguntas todo el rato y a sacar conclusiones cuando no tienen noticias tuyas al momento", observa Gina Marie Guarino, psicóloga estadounidense. "Estos sentimientos, junto con sus enfados, suelen ser poco razonables y son un indicador de que su ansiedad y desconfianza les puede llevar a sacar conclusiones precipitadas, incluso cuando saben que estás ocupado".

Revisa tu teléfono cuando puede

No solo es una falta de confianza clarísima, sino que también, dependiendo de la gravedad del acto, puede llegar a ser hasta delito. Todo el mundo tiene derecho a la privacidad de sus correos electrónicos, mails y mensajes de redes sociales. Por tanto, el acto de revisar tu teléfono puede denotar no solo una falta de confianza, sino también celos o la sospecha de que le estás engañando con otra persona o teniendo una doble vida. En caso de que se incurra en este comportamiento, más vale que los dos implicados tengan una conversación seria, pues es bastante grave. Y, si eres el espiado y se convierte en una actitud habitual, lo mejor es que lo hables con otra persona o barajes la posibilidad de denunciar, ya que por mucho que no confíe en ti, no tiene derecho a acceder a los contenidos de tu móvil.

Qué hacer al respecto

Como decíamos, la falta de confianza es sin duda uno de los elementos más peligrosos que desestabiliza en gran medida todas las relaciones en las que aparece. Puede estar justificada o no, pero en cualquier caso es un tema que más vale afrontar con comunicación, ya que las consecuencias pueden ser muy dañinas. Ante todo, establece límites que el otro no pueda sobrepasar y haz que los comprenda al cien por cien, al igual que crea unas expectativas razonables. Sea como sea, la confianza es completamente necesaria si quieres tener una relación sana. Y, en caso de carecer de ella, tal vez lo mejor sea barajar una posible separación, aunque solo sea momentánea o indefinida.